This Don't Have To Be Over ~ Zerrie |mature| (Terminada)

~Capítulo 31~ agua fría

-Nació?-

-Sí, hace una semana. Es preciosa. Eleanor me mandó una foto.- recordó -Ahora te la envío.-

-Y cómo se llama?-

-Adeline.-

-Es un nombre muy lindo.- mencionó desde el otro lado de la línea.

-Sí.-

-Y vos, Pezz? Cómo estás?-

-Bien.-

-Estás comiendo?-

-Sí, mamá.- respondió, sabiendo que no podía verle rodar los ojos.

-La última vez que te vi estabas muy delgada.-

-Siempre lo fui.-

-Pero ahora más. No quiero que te pase nada.- habló, tan preocupada como siempre. De sus hijos, Perrie era la única mujer y por la que más se preocupaba Debbie. -No quiero que te mates de hambre por el trabajo.-

-No me mato de hambre por el trabajo.- respondió casi en un bufido -Y vos? Cómo está todo?-

-Bien, cariño. Hoy invité a cenar a Jonnie y a Liss.-

-Oh, ya volvió?-

-Por suerte.-

-Que bueno. Mandales mis saludos.-

-Lo haré.- respondió la cálida voz y entonces el celular le vibró en la mano.

-Gracias. Mamá, me están llamando, hablamos luego, sí?-

-De acuerdo. Te quiero, Pezz.-

-Yo también.- respondió antes de cortar y contestar a la llamada entrante. -Hola.-

-Podes venir al apartamento?- la voz ronca retumbó en el parlante, erizando la piel de Perrie. Hacía días que no lo veía.

-S..sí.- no supo por qué, pero su respuesta salió como aire desproporcional.

Tras eso, la llamada terminó y antes de lo que esperaba, estaba entrando en el moderno piso.
Zayn estaba apoyando en la mesada, vestido tan impecable y frío como siempre, mirando directo hacia la puerta. Tenía las pupilas dilatadas, sus manos apretando los bordes de la mesada y estaba evidentemente acelerado.

-Estás b..- antes de que la pregunta terminara de escapar de los labios de Perrie, Zayn la estaba besando, casi a la fuerza al principio, de forma brusca. Ella lo siguió, pero no con la agresividad con la que él estaba atacando su boca. Tironeaba de su cabello rubio aprovechando que lo llevaba suelto mientras con la otra mano la apretaba contra él y le bajaba el cierre del vestido. No era un acto pasional, era salvaje. Perrie no tardó en comprender que estaba muy molesto por algo y quería desquitarse con sexo, y ella era donde se desquitaría.
Le dio tiempo para respirar cuando se apartó solo unos centímetros para ayudar a terminar de caer el vestido y quitarse su saco así como su camisa.

-Zapatos.- gruñó, exigiéndole que se quitara sus tacones mientras él quitaba su par de - probablemente costosos - mocasines. Perrie obedeció en seguida y entonces Zayn volvió a besarla, apretando su trasero con tanta fuerza que la rubia juraba debía haberle dejado marca.