-Me encanta teneros aquí - Comentó Marcos, el cuñado de Lucas-. Estoy muy contento del reportaje que me has hecho por San Valentín. Fue todo éxito. Quiero hablar para unas futuras ideas que tengo en mente...
-Por supuesto, no te preocupes... -Le aseguró Thom.
-Y ciertamente, me gusta que estéis vosotros dos prometidos. Pero podríais haberme dicho algo -Se quejó con una sonrisa agradable.
-Lo siento Marcos, Sabrina es un poco tímida sobre ese tema...
-Bueno, yo me marcho a casa que me espera tu hermana Bianca. Quiero estar con ella antes de que se me vaya una larga temporada a Sídney.
-No se como lo aguantas -Dijo Lucas-. Pídele que no viaje tanto...
-Que le vamos hacer, su trabajo es así.... Le quito eso, y le quito la vida –Rió mientras se despedía de las dos parejas.
-Veo que le va muy bien con ésta compañía de teatro -Comentó Helen.
-Sí, dice que tiene muy buenos compañeros de trabajo y con ésta obra se siente muy a gusto. Supongo que está aprovechando un poco, antes de quedarse embarazada. Luego se cogerá obras más pequeñas...
-¿Cómo se encuentra Hannah con la pierna? -Preguntó Sabrina al haber mencionado él, el tema de niños.
-Enfurruñada -señaló Helen con cariño-, la pobre no puede salir al patio a jugar con sus compañeros.
-En el fondo le está bien empleado -Interrumpió Thom-. Es una chica, no tiene por que subirse a un árbol para demostrarse mejor que a los chicos.
-Tiene catorce años -observó Sabrina-, mejor para ti que aún piense en retar a los chicos, que querer ligárselos -. Sonrió al ver el fruncimiento de su amigo, ante la idea de que su hija tuviera novio a tan temprana edad.
-En eso tiene razón -Apoyó Helen.
-Pues que quieres que te diga -contradijo en tono burlón Lucas-, si no tiene un novio pronto. Corres en peligro de tener a una mini-Sabrina -Dicho aquel comentario, solo se escucharon las carcajadas de los dos hombres. Mientras que ellas dos los fulminaban con la mirada.
-¿Qué? -Protestó Thom-. Venga vamos, ha sido una observación cariñosa. Acertada, pero con cariño... -Carraspeó un poco, al ver que sus expresiones seguían sin producir cambio alguno-. ¿Oye Lucas, verdad qué no lo has hecho sin ningún ánimo de ofender?
-Por supuesto, es solo que me ha recordado mucho a ti Sabrina -Se giró hacia ella, poniéndole ojitos de cordero degollado-. Vamos mujer, no seas así... siempre decías que no querías tener aún pareja. Y con cualquier cosa, ibas demostrando la igualdad de sexos...
-Pero ahora no es así, ya que al fin declaró que estáis muy enamorados y que tenéis pensado en casaros... -Señaló en broma Thom.
-¡Thom! -Lo reprendió su esposa.
-¡Qué! Se besan y salen en una revista. Pasa un poco de tiempo y me los encuentro yo besándose otra vez. No sé, si se vuelven a besar después de aquella última vez. Pero aparece que están prometidos y luego San Valentín -Miró a su mujer exasperado-. Y hoy, me los encuentro a los dos en el sofá de su oficina...
-¿Cómo? -Helen abrió los ojos y miró a Sabrina en busca de una respuesta. Y la vio, con la cara roja pero sin saber si era de vergüenza o de ira.
-Que culpa tengo yo, de que éste sea un pulpo y se aproveche de cualquier
situación... -Acusó en su defensa.
-¡Lucas! -Lo recriminó Helen, pero sin poder ocultar mucho la sonrisa que le
asomaba a los labios.
-Que culpa tengo yo -Se defendió, pero sin ocultar su expresión de diversión en ningún momento-, de que ella no pare de provocarme en todo momento y yo me sienta atraído. Estoy esperando a que admita lo que siente por mí, y así poder...
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Saga Edificio XIV -Doble Trampa-
RomansaNos vamos a Londres. Donde en el edificio XIV, parece que nuestro amigo cupido se haya quedado atrapado para el grupo alocado de amigas que trabaja en la planta 9ª y 10ª. En ésta parte, nos encontraremos con la historia de Sabrina. Una reportera f...