Manuel ya estaba llegando a su destino, solo faltaban un par de paradas y después de unos minutos ya había llegado. Bajó del tren, como le dijeron, en la estación le estaba esperando el padre Andres.
El padre Andre había sido sacerdote de aquél pueblo desdé hacía más 60 años y ya era hora de que volviera a la diosisis para poder descansar, el hombre tendria más 80 años.
Manuel se hacerco a él y le saludó con mucho respeto y el padre Andres de devolvió el saludo y al paso del padre Andres se marcharon hacía la iglesia que tardaron 12 minutos y una vez allí...-¡Es preciosa! -su sorpresa no era infundada. La verdad es que la fachada conservaba el mismo esplendor que cuando fue construida. La puerta era de roble macizo, donde estaban tallados todos los apóstoles en ella, los muros eran de piedra y poseía un campanario que aún funcionaba.
-La he mantenido así desdé en mismo día que se construyó y espero que tú hagas lo mismo.
-Por supuesto señor.
-Acompañame, voy a enseñarte el interior.Nada más entrar Manuel se quedo de piedra, desdé fuera no se podia apreciar, pero en el centro de la iglesia había una cúpula y en ella estaba representada la Virgen Maria y a su alrededor tenían, en pinturas más pequeñas, toda la vida de ella. Colgada del techo había una preciosa y enorme lámpara de araña, por las paredes estaba representada la pasión de Cristo y por último estaba el altar con un enorme crucifijo.
A los dos lados del altar habían dos puertas, una daba al confesionario y la otra daba al despacho y a la casa sacerdotal y entraron por esta puerta hasta el despacho. El padre Andres como estaba cansado se sentó en una de las 3 butacas que habían.-Escucha con mucha atención joven -empezó a hablar -no sé que clase de enseñanza habrás recibido, pero en este pueblo la gente es muy tradicional. Eso quiere decir que te finas a las escrituras, no me vengas con modernismos....
-Asi lo haré...
-¡No me interrumpas!
-Lo siento.Hubo un silencio y durante ese tiempo el padre Andres examinó a Manuel de arriaba a bajo.
-Te contaré algo que tu no sabes. La diócesis, antes de tu llegada, había enviado a otro, puede que tuviera tu edad o algunos más, ese joven duró aquí solo 3 semanas -Manuel se sorprendió bastante de esas palabras -¿sabes por qué te cuento esto? -Manuel negó con la cabeza -porque me da la sensación que tu serás como aquél joven.
-Intentare dar mi mejor esfuerzo para demostrarle que no todos los jóvenes somos iguales.
-Más te vale, porque fui yo quien te escogió de entre más de 50 sacerdotes.
-¿Fue usted?
-Sí, así que no hagas que yo me arrepienta.
-No lo hara.Después de esta pequeña charla el padre Andres le contó todo lo que tendría que hacer y Manuel lo entendió todo.
Fueron pasando los días y cada vez estaba más acostumbrando a aquél sitio y por fin llegó el domingo, el ansiado domingo. Ese seria el día donde Manuel daría su primera misa y por esa razón se levantó pronto y más de 3 horas de la misa él ya estaba en la capilla preparandolo todo, al cabo de 1 hora el padre Andres aparecio delante de él.-¿Eso qué noto son nervios? -bromeo un poco.
-Sí señor -se notaba en su voz que estaba muy nervioso.
-No te preocupes joven, si lo hacés como te he enseñado, todo saldrá bien.
-Más que nervios, lo que tengo es una gran inquietud.
-¿Por qué, joven?
-Es que tengo el presentimiento de que algo saldrá mal.
-Si ese es el caso, yo estaré aquí para sustituirte.Eso no tranquilizó de nada a Manuel y sin darse cuenta la gente estaba empezando a entrar en la iglesia y a la hora prevista la misa inició. Todo iba muy bien hasta que a mitad de la misa Manuel vio entrar por la enorme puerta a Carlos y es allí donde se congeló durante un rato y cuando reacciono pidió disculpas y continuó la misa como si nada.
Al terminar Manuel se fue al despacho y 5 minutos después entró el padre Andres.-¡Enorabuena joven! Lo has hecho muy bien, para ser tu primera misa -eso último lo dijo más para si mismo que otra cosa.
Manuel solo podía pansar en una cosa asi que de las palabras del padre Andres no se entero.....
-Joven... joven... baja de las nuves que ahora te toca ir al confesionario.
-Lo siento. Ahora voy... -dijo volviendo a la tierra.Salio del despacho y se dirigió al confesionario y allí espero a la primera persona, que resultó ser una señora, después fue un señor algo mayor y el último fue Carlos.
-Perdoneme padre porque he pecado....
-¡¡Carlos!!
-Te dije que te volvería a encontrar, tenemos una conversación pendiente.
-Este no es ni el momento, ni el lugar.
-¿Qué lugar más privado hay más que un confesionario?
-Aqui no escucha nuestro señor.
-¡¡¡Ohhh. Venga ya!!!. No me vengas con esas, que tú eres el menos indicado para entar en una iglesia.
-Todos mis pecados han sido perdonados
-¿De qué pecado estas hablando?
-El de estar contigo.
-¿Qué te han hecho estos últimos 6 años? -estaba realmente preocupado por el cambio que habia sufrido.
-Puede que sintiera algo por ti, pero eso fue un error y ahora ya estoy curado.
-Estas hablando de nuetra relación como si fuera una enfermedad...
-¡Y era una enfermedad! Me dolia cuando te ibas, si no te veia en días no podia comer, ni dormir, ni pensar. Lo unico que estaba en mi mente eras tú y eso me consumia día tras día.... asi que decidi que no podia podia seguir asi.Hubo un silencio por parte de los dos, que duro más de 1 minuto.
-Si eso que me acabas de decir es cierto, ¿por qué desapareciste?
-Eramos unos crios Carlos, y lo que haya hecho o dicho entonces no tiene ningun valor y por eso te pido que si me aprecias, aún que sea un poco, desaparece de mi vida.Manuel cerro la cortina del confesionario y salió por la puerta de atrás, pero no lo pensó muy bien, ya que a la hora de atravesar el altar Carlos le impidió irse cogiéndolo de un brazo.
-No pienso volver a dejar que te alejes de mí de nuevo.
-Tienes que hacerlo. Yo soy un sacerdote y ya he tomado mis votos, asi que dejame y ves a acostarte con otros.
-¡Otros!¿pero de qué me estas hablando? -eso le pillo por sorpresa -no sé de donde has sacado eso, pero en mi vida solo has estado tú.
-Ya claro y yo voy y me lo creo -su sarcasmo se percibió a kilómetros de distancia.Diciendo eso se soltó, bruscamente, del agarre que tenía y se fue hacía el despacho. Allí se sentó en la mesa que había y hundió so rostro entre sus manos y estuvo así hasta que el padre Andres entró.
-¿Qué es lo que ha pasado allí fuera? -al parecer lo había visto todo.
-He perdido un poco la compostura.
-¿Un poco? Te has puesto a discutir con un joven en medio de la iglesia. Ya tenía que ser importante.
-Es sólo que lo conozco y me ha dicho algo que me ha sacado de mis casillas....Al padre Andres no le dio tiempo para decir nada, ya que llamaron a la puerta y cuando la abrieron...
Continuará....
Hasta aquí :-DSé que el título no tiene mucho que ver con el capítulo... pero no pasa nada.
Por cierto el en próximo habrá bastante hard (。♥‿♥。)Un besiko y hasta pronto ;-)
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El Pecado De Amar.
RomanceManuel es cura y tiene la difícil decisión de dejar atras su pasado y seguir adelante con su vocación o caer en la tentación.