No te alejes!

Alguien como tú

No sé cuanto tiempo estuve así, estaba paralizada. ¿Qué voy hacer de mi vida ahora? ¿Porqué la vida me está dando esta mala jugada? Ya no tenía más lágrimas, la vida me los arrebato en un abrir y cerrar de ojos.

-Chloe- Escuche a mi mejor amiga hablarme- lo siento mucho, sabes que cuentas conmigo incondicionalmente- sentí sus brazos rodeándome.

Fue entonces hay cuando no pude contener las lágrimas y volví a llorar, me sentía tan vulnerable y sola. Ya no tendría mas a mis padres, me dejaron sola, me quede huérfana, no tenía familia, hermanos, estaba sola...

Un mes después.

Ha pasado un mes después de que sepulte a mis papas.

¿Cómo estoy? Me siento mal, siento como si mi otra mitad ya no estuviera. Las personas más valiosas se fueron sin decir adiós.

La casa de siente tan sola, si no fuera por mis mejores amigos creo que ya no estuviera en este mundo. Me has servido tanto de ayuda, no se que haría sin ellos.

-Chloe- Danny grito venia corriendo hacia mi.

-Daniell- Le sonreí.

-¿Qué clase te toca?- Danny me pregunto mientras escribía en su celular

-Química- dije frunciendo el ceño- no entiendo nada de eso, si quiera ¿En que me va ayudar en un futuro?

-Chelo no es tan mal como parece, si le poner atención y no te distrajeras le podrías entender.

-No puedo evitarlo, esa clase me aburre tanto- hice una mueca al recordar al profesor Trevor hablando sin entender alguna palabra.

El timbre sonó y me despedí de Daniell.

La clase había pasado tan lento, definitivamente no estudiaría algo que tenga que ver con química.

Después de pasar más de 6 horas en la escuela ya iba en camino para mi casa, Jordan dijo que me podría llevar a casa pero me negué, mi casa no estaba tan lejos de la escuela así que preferí caminar. Faltaban 3 cuadras para llegar a mi casa iba tan distraída que no sentí cuando choque con alguien.

-Auch- me queje recogiendo mis libros del suelo, con la persona que choque no se tomó la molestia de ayudarme a recogerlos.

-¿Porque no te fijas por dónde vas?- escuche que me dijeron, levante la cabeza para encontrarme con un joven más o menos de mi edad.

¿Enserió dije joven? Fruncí el ceño

-¿Piensas quedarte ahí mirándome siempre?- escuche que me hablo con un tono frio y molesto

Me anime a hablar. -Perdón, venía muy distraída- fue lo único que pude decir

No me había percatado que el era alto, muy guapo, su cabello lucia despeinado pero lo hacía ver sexy.

-Si me fije, para la otra fíjate por donde caminas- dijo sin siquiera mirarme.

-Ya te pedí disculpas, no es para que seas así de grosero- conteste ya enojada.

Pues que le pasa, no tenía que ser tan grosero, digo solo choque con el, ni que fuera cosa del otro mundo

-Como sea- dijo rodando los ojos- no se que hago peleando con alguien como tú.

Y se fue.

¿Con alguien como yo? Me quede sin decir una palabra, no podía decir nada. Era algo estúpido seguirlo así que mejor me fui a mi casa.