Continuamos comiendo y charlando tranquilamente.
-Luego los llevaré a recorrer el lugar, asi refrescan su memoria, ¿les parece?.- Nos pregunto emocionada la tia Karen.
Por supuesto que queria, estaba mas emocionada que ellos, volver a California era lo que habia soñado desde que me mudé a Texas. No es que no me guste Texas, es solo que estando allí extrañaba a la tía Karen, y a mis antiguos amigos. Aunque a ellos los he olvidado, porque no podiamos comunicarnos. Supongo que ellos tambien me olvidaron a mi.
Eso por una parte me hacia sentir mal. Me gustaria recordar todos los momentos que vivi antes de la mudanza, pero los unicos momentos que llegan a mi mente son los que pasé con la tia Karen.
-¿Que opinas, linda?.- Dylan y la tia K me estaban mirando sonrientes.
-Seria fantastico, estoy emocionada.- dije casi saltando de la silla. Ellos rieron y mi tia fue a tomar un baño.
-Te veo distinta Tif... ¿Mas contenta?.- me preguntó Dylan
-Asi es. A partir de hoy voy a volver a ser la misma de hace 3 meses. Ya sabes, feliz.- dije sonriéndole. El sonrió aun mas.
-Me alegra saber que serás la misma insoportable, pesada, histerica..
-Ya entendi.- le dije riendo. Ambos explotamos en carcajadas sin alguna razon.
Nos quedamos hablando un rato mas cuando escuchamos el timbre de la casa. Malcom, el mayordomo, se apresuró a abrir la puerta, y luego se acercó a nosotros.
-Buenas tardes, señores Duff.- ¿señores?.- Los Conrad estan aquí.
-Oh, emm, claro pero.. ¿Quienes son los Conrad?.- pregunté confundida
-Vecinos, señorita.- me respondió. ¿Que hacía ahora? ¿Que mierda le decía? ¿Que pasen? Que mas da.
-Diles que pasen, ¡Hay que conocerlos!- dije y Dylan me miró como diciendo "¿Que carajo te pasa?"
Solo estaba emocionada. Ya extrañaba esa parte de mi. La parte alegre.
Esperamos parados a un lado del enorme sillón que habia en el living mientras Malcom iba a decirles a los Conrad que pasen. Espero que sean simpáticos, y no como mi vecina de Texas que era una vieja pesada que me hacia la vida imposible. Hasta que un día se cansó de nosotros y se mudó. A ver, tenía que vengarme de alguna forma, asi que tambien le hacia la vida imposible. Bromas y mas bromas.
Estaba tan perdida en mis pensamientos que no me di cuenta que los Conrad estaban aqui.
-Buenas tardes, ustedes deben ser Tiffany y Dylan Duff. Mi esposa me habló mucho de ustedes.- dijo el señor Conrad mientras nos daba un apretón de manos.
-Espero que hayan sido cosas buenas.- le dijo mi hermano sonriendo. Quise reirme. ¿Mi hermano siendo educado? Tengo que filmar esto.
-Oh claro que si. Por lo que me ha contado ustedes eran unos niños traviesos.- dijo el señor riendo. ¿su esposa ya nos conocia? Wow, se ve que hace muchisimo vive aqui.
La señora Conrad se mantenia callada, al igual que yo. En un momento, mientras los hombres hablaban, dirijo mi mirada a la señora, y ella me mira tambien. Ambas sonreimos. Siento que la conozco, pero es un recuerdo borroso en mi mente.
Fuimos a sentarnos al sillon mientras esperabamos a la tia Karen. No tuvimos que esperar mucho porque unos minutos despues de que nos sentemos, ella ya estaba aqui con nosotros.
-Martina, querida, que bueno que viniste.-dijo mientras se abrazaban.- y George, que sorpresa..-dijo sonriendo
-Es un placer volver a ver a los pequeños traviesos. Aunque ya no estan tan pequeños.- dijo hablando por primera vez. Dylan y yo nos reímos. Y mi tia tambien
-Es cierto, ya estan grandes, y mas bonitos.- dijo mirandonos.- ¿Ali no pudo venir?.- pregunto a los señores Conrad.
-No, ella está en casa de su abuela ahora, pero prometió venir más tarde.- dijo Martina. ¿Quien es Ali?
En fin, preferí no preguntar y continuar hablando tranquilamente con todos. Martina y George, como me habian dicho que los llame, solo me preguntaban como era Texas, si extrañaba alli, y todas esas tipicas cosas.
2 horas más tarde
Me encontraba en mi cuarto terminando de acomodar mis cosas. Habia traido todas mis cosas y me llevó más de una hora terminar de guardar todo.
Una vez que terminé, bajé las escaleras y fui hacia el comedor. Wow, es gigante. Tiene una mesa para doce personas en el centro, 2 ventanales bastante grandes, un lindo candelero de cristal colgaba del techo y habia una puerta corrediza que dirigia a la cocina.
Vi que en la mesa habia una nota y la tomé, decìa: Tiffany, he salido de urgencia porque me llamaron de la agencia de modelos por unos problemas, vuelvo a media noche, hagan lo que quieran, ya saben, ahora esta también es su casa. Los quiero, la tia K.
Bien. Ahora buscaré a Dylan, quizá podamos hacer algo juntos. Iba a poner un pie en las escaleras, cuando el timbre de la casa suena. Supongo que Malcom irá a abrir. Asi que empece a subir las escaleras tranquilamente, estaba cansada. Si, de hacer nada.
Tocaron el timbre nuevamente. ¿Donde esta Malcom cuando se lo necesita? ¡No le pago para que se la pase haciendo nada! Ya, ok, yo no le pago, solo quería animarme un poco.
Bajé las escaleras y fui hacia la puera. Del otro lado de la puerta apareció una chica de mi edad. Muy bonita.
No más que yo.
Vaya, que ego.
Es la emoción.
Era un poco más alta que yo, pero supongo que era porque tenia plataformas, mientras que yo tenia mis pantuflas de oso panda. Ok.. No era necesario decirlo. Tenía el pelo rubio, más bien en mechas. Ojos marron oscuros (pero aun asi tenia una mirada profunda), y tenia muy buen sentido de la moda.
-Hola, no quiero ser inoportuna, pero... Mi tía no está, supongo que la buscas a ella. ¿Por qué no vuelves mañana?.- pregunté con mi mejor sonrisa
-Tif... ¿de verdad eres tu?.- me dijo pero.. ¿de donde mierda me conocía? esto es incómodo.
-Si, supongo. Perdón pero, ¿Quien eres?. pregunté avergonzada. Todos aqui me recuerdan, y yo no recuerdo a nadie mas que a mi tia. Ironico.
-¿No me recuerdas?.- Se le nublaron los ojos.- Soy Alison.
OH DIOS.
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Los Amigos No Se Besan
Fiksi RemajaSoy Tiffany Duff, 17 años. Extrovertida, simpatica, amante de los libros, tengo un hermano mellizo y.. Bueno, más adelante me van a seguir conociendo. Luego de vivir varios años en Texas, me mudo a California, mi hogar. Alli hay reencuentros, recuer...