La Verdadera Amistad Nunca Termina

Capítulo 1: Desperdicio

Freddy Fazbear's Pizza había cambiado desde que los viejos animatrónicos se fueron. Ahora la gente piensa que es mejor con los nuevos. También hay nuevos animatrónicos que podemos llamarles como Toys. Los conocidos animatrónicos estaban permaneciendo en otro lugar: Freddy, Bonnie, Chica y Foxy son viejos y antiguos, no pueden trabajar más, entonces fueron movidos a Partes & Servicio, donde las cosas decaen cada día. Estos cuatro animatrónicos son animales, pero al mismo tiempo, son robots.
Bonnie es un conejo azul, que parece morado, con un brazo faltante y una cara faltante. Uno de sus pies no estaba en perfecta condición, y también tenía algunas partes faltantes en su cuerpo. Era el animatrónico más dañado de todos los animatrónicos allí. Chica es una gallina amarilla. Ella era la segunda más dañada, tenía sus manos faltantes y no podía mover sus brazos. Tenía algunas partes faltantes en su cuerpo. Foxy es un zorro rojo, que es un pirata. Es el tercer animatrónico más dañado, tenía una oreja faltante, casi un ojo y partes faltantes. Freddy es un oso marrón. Freddy era el más sano de ahí. Sólo tenía partes faltantes. Permanecieron allí por mucho tiempo. Lo único que podían hacer es estar sentados esperando a que se decayesen.
Una noche, estos cuatro animatrónicos estaban en Partes & Servicio: Freddy y Foxy estaban durmiendo. Chica estaba sentada, haciendo nada. Bonnie tenía algo con él. Habían tres fotos en el suelo a su costado. De repente cogió una y la miró. La miró con toda la atención que tenía. Entonces tristemente suspiró. Chica vio a Bonnie con la foto. Curiosa, preguntó:
–¿Qué es eso que tienes ahí?—
–Viejas fotos.—dijo Bonnie mientras todavía miraba esas viejas fotos. Cuando ella oyó eso, ella preguntó ansiosamente:
–¿Puedo ver?—
Bonnie dio vuelta la foto para que Chica la vea.
Ella se sorprendió cuando la vio y dijo:
–¡Eh, somos nosotros!—exclamó.–Eh... ¿Realmente me parecía a eso?—
De repente Bonnie exclamó:
–¡No es justo! ¡Todo era perfecto en aquel entonces! Pero ese hombre lo arruinó todo, se llevaron todo lo que le daba sentido a nuestras vidas. Ahora estoy aquí... Solo, abandonado, decayendo. Con un brazo amputado y el rostro roto.—dijo mientras se estaba chequeando.
–Bonnie...—dijo Chica.
–Nadie me quiere...—dijo Bonnie tristemente.
Chica se puso de pie, se acercó a él, en frente de él y dijo:
–Yo sí.—dijo y lo miró.–Y todos también.—
Bonnie miró a Chica confundido y dijo:
–¡Pero Chica, estoy bien feo!—
–¿Tú piensas que somos mejores?—dijo alguien que se estaba acercando a Chica y Bonnie. Era Foxy, quien estaba escuchando su conversación.–Seas lo que seas, lo que importa es tu interior.—dijo mientras Freddy se estaba despertando y levantando de dormir.
Bonnie abrazó a Chica, pero ella no pudo devolverle el abrazo porque sus brazos no le pudieron dejar. No funcionaban. Pero Chica sólo sintió el abrazo hermoso de su amigo. Freddy, ya que se levantó, se acercó a ellos y preguntó:
–¿De qué me he perdido?—dijo y vio las viejas fotos que estaban en el suelo de la habitación. Las cogió y preguntó:
–¿Qué es eso?—dijo mientras el resto de los animatrónicos lo estaban viendo. Él miró las fotos. Su feliz cara se convirtió un poco triste cuando vio las fotos y recordó todos esos hermosos momentos:
–Qué tiempos aquellos...—dijo.
Chica, Bonnie y Foxy lo miraron. Pensaron que estaba triste. Bonnie preguntó:
–Freddy... ¿Te sientes bien?
Freddy cambió su cara en una cara seria. Entonces dijo:
–Tenemos que hacerlo de nuevo.
–¡¿Qué?!—exclamó Chica y estaba confundida.
–Freddy, estamos viejos y rotos. No estamos en condiciones para trabajar.—dijo Foxy con una cara seria, un poco enojado, cogiendo razón de lo que estaba diciendo.–Terminamos.—
–No. Necesitamos esto.—replicó Freddy, con una cara seria.
–Pero, Freddy...—dijo Foxy con una cara un poco triste. Entonces el oso se dio la vuelta muy rápidamente mirándolo con una cara enojada. Foxy se calló por un segundo.–No puedo. No desde que el hombre malvado apareció.—¡Oh, venga! ¡Como si eso fuese a pasar de nuevo!
–Freddy, ve la realidad. ¡Yo no puedo ser visto en el escenario ASÍ!—dijo Bonnie.–Ni siquiera puedo sostener la guitarra.—agregó.
Freddy los miró y su cara serio empezó a convertirse en una cara triste. Intentando ver la realidad, dijo:
–Quizás tengas razón...—
–¡Eh, tíos!—una voz dijo. Era alguien quien no estaba en la habitación, sino fuera de la habitación.