Levantarse, comer, ducharse, vestirse, subirse al bus, bajarse del bus, entrar a clase. Siempre es la misma rutina desde que salí de ese maldito hospital.La vida sigue ¿saben? Aunque uno no lo quiera y prefiera quedarse todo el día en la cama comiendo Nutella, la vida no te lo permite, ella continua y tu tienes dos opciones; quedarte atrás y ser arrastrado o seguirle el paso, que fue exactamente lo que yo hice.
Le seguí el paso.Todo había estado muy calmado desde que salí del hospital, creo que se dieron cuenta que era yo era frágil. Lila y su séquito había estado muy calmado desde que regresé, deben estar tramando algo, no me fío un pelo de ellas.
Con Matt hemos estado más unidos que nunca. No volvimos a hablar sobre el "accidente", pero se que en el fondo él aún se siente mal por eso. Le pregunté si se sentía culpable pero evitó el tema. Creo que ahora la culpable soy yo, no soporto la idea de estar haciéndole algún tipo de daño a Matthew, eso me pudre el alma.Alguien me interrumpió de mis pensamientos, era una de las del séquito de Lila, se notaba por su ropa extremadamente ajustada y su cara pintada como un autentico payaso.
-Maya, podemos hablar?- Esa perra sabe mi nombre?!
-Claro, ¿Qué quieres?-
-No, tontita aquí no- Me sorprendió lo vacía que sonaba su voz.
-Entonces en dónde?- Pregunté impaciente.
-Sígueme- Ella tomó mi mano torpemente y me arrastró por en salón de clase. Solo hay una persona que sigue teniendo tanta confianza conmigo para tomar mi mano tan descaradamente y no es nadie más ni nadie menos que la legítima Marian.
Esperé a que estuviéramos afuera.-Marian eres tú?- pregunté aún indecisa.
-Claro tontita ¿Quién más va a ser?- No la había reconocido por los kilos de maquillaje que llevaba en la cara.
-Ve al grano- Insistí.
-Ya a eso iba.... quiero que me perdones por todo lo que te he hecho- Su voz tenía un tono de seriedad que asustaba.
-Y..yo no se que decirte-
Ella tomó mis dos manos y me obligó a mirarla a los ojos.
-May te extraño- Sus ojos se habían cristalizado, iba a llorar en cualquier momento.
-Y.....yo- Una mano nos separó.
-QUÉ ESTÁ PASANDO AQUÍ?!- Era Matt y por su expresión pude notar que no estaba nada feliz.
-Maya te hizo daño!?- Me tomó cuidadosa mente la cara mientras revisaba mi cuerpo (Para ver si tenía una herida, malpensadas...).
-Emm, Yo..- Intenté decir pero Matthew me dejó con la palabra en la boca.
-Mejor vámonos- Dijo dominantemente Matt.
-Espera grandulón- Dijo Marian tomando a Hew del brazo.
-Antes de que te vayas... Amigas?- Marian estiró su mano en señal de paz.
-Amigas- confirmé apretándole la mano.
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La Verdad Detrás De La Felicidad
RomanceUna chica perdida y desalentada por su enfermedad, leucemia. Para ella nunca fue fácil aceptarlo y menos con un grupo de personas molestandola e insultándola. Un día un misterioso chico llega y le enseña lo que es vivir.