Te metes con ella, te metes conmigo.

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Mi mirada se quedó en ese chico, pero él no me miraba a mi.

-Hey, ¿me estas escuchando?.- volvi mi mirada al frente, ya que Alison me estaba hablando.

-Lo siento, yo...-no pude serguir hablando porque alguien me interrumpe.

-Querida Alison.. Veo que ya conseguiste una amiga. ¿Cuanto le pagas por fingir que le agradas?.- dijo y sus amigos rieron.

Mire a Alison y ella solo bajo la mirada. ¿Que se creia para hablarle asi a una chica? Es hora de sacar el tigre que llevas dentro, Tiffany.

Me di vuelta para ver quien era el desgraciado que habia dicho eso. Y me sorprendo al ver que era el chico lindo... Aunque se ve que lo que tiene de lindo lo tiene de idiota.

-Escucha, idiota. No se quien te crees que eres, pero no tienes por que hablarle asi a Alison.- dije apuntandolo con el dedo. Él solo me miraba con una sonrisa en la cara. Engreido.- La proxima vez que escuche que le dices algo asi otra vez, despídete de tu estúpida cara. Te metes con ella, te metes conmigo.- dicho esto me di vuelta para seguir caminando.

Pero luego lo mire otra vez.- y para tu informacion, yo soy amiga de Alison porque asi lo quiero.

Continue caminando con Alison en silencio, y una vez que llegamos a mi casillero, ella me abraza. Le correspondo rápidamente.

-Muchas gracias Tiffany, eres la primera que me defiende.- dijo y nos separamos. Ambas sonreiamos.

-No tienes que agradecerme, es un idiota.- le dije

-¿De verdad quieres ser mi amiga?.- me preguntó. Tenía miedo a mi respuesta, lo sabia.

-Por supuesto que si. Quiza no te recuerde, pero siento que lo hago.- le dije y ella sonrió.

-Esta bien, tiempo al tiempo, ¿no?.- asentí y fuimos juntas al salon de Ciencias. A las dos nos tocaba esa clase.

La verdad se pasó bastante aburrido, porque el primer día es para presentarnos y bla bla bla.

A la hora del almuerzo, Alison y yo nos sentamos en una mesa solas y hablamos de mi vida en Texas, de su familia, entre otras cosas. Luego de unos minutos siento una mirada, busco por toda la cafetería y me encuentro con su mirada. El idiota.

Matt 

No puedo olvidarme de cómo me enfrentó. Era la primera vez que una chica lo hacía y estaba impresionado. Seguro lo hizo porque es nueva aqui. Nadie se atreve a enfrentar al capitan del equipo de futbol americano.

Mis amigos se estuvieron burlando de mi todas estas horas por no haberle contestado y quedarme quieto como un idiota.

-Mira quién está allí, Matt. ¿Por qué no vas a darle su merecido?.. o acaso tienes ¿miedo?.- preguntó Connor, uno de mis amigos.

-Cállate Connor, claro que no tengo miedo. Iré ahora mismo.- dije y me paré del banco para ir caminando hacia esa chica. No dejaba d emirarla y creo que se dio cuenta porque volteó a mirarme.

Una vez que estuve en frente de ella, me senté a su lado.

-Hola, preciosa.- le guiñé un ojo, y ella solo los volteó. 

Oh, vamos. Nadie se resiste a Matthew Kennedy.

-¿Que quieres, sopenco?.- dijo sin mirarme. Yo solo reí.

Chica dificil. Me gusta.

Miré quien estaba sentada con ella. Claro, Alison. Ella me miró mientras negaba con la cabeza mirándome preocupadamente. ¿Y a esta que le picó? La ignoré y me concentré en la chica dificil.

Los Amigos No Se BesanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora