la mujer del vestido de rosas

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El suicidio un acto de valentía o cobardía, algunos dirán valentía por el simple hecho de cometer tal acto, pensando en que encontrarían la eterna serenidad. Otros dirán por cobardía, abandonando el mayor éxtasis de la vida, un ruin ignorante. Ella, una mujer esplendida en todo el sentido de la palabra, con su largo vestido de rosas, al caminar desprendía su maravilloso olor a primavera, la dulce primavera. Sus ojos, sus grandes ojos brillantes, no había que mirar el cielo para contemplar las estrellas en la noche, tan sólo necesitas ver sus grandiosos ojos para contemplar un verdadero destello. Su piel, su encantadora piel por la cual, cualquier hombre desearía tocar, más suave que un melocotón, el templo del morbo. Su cuerpo era el sueño de cada hombre en silencio, sus labios un dulce venenoso, eso eran sus labios la mayor atracción del dulce pecado.

Ella, una mujer sin rumbo fin pensaba que todo estaba arruinado, ya no hay sentido para seguir respirando, fingiendo una vida monótona que ofrece la falsa sociedad. Lo único que le faltaba, era algo que todos en el mundo buscan sin fin, sabiendo que lo tienen en frente de si, la felicidad todo por saber quién soy, todo por saber quién fui, todo por saber quién seré, todo por saber que amo, que odio, sencillamente quien soy. Pero lo único para lograr eso, es ser diferente rompiendo las cadenas que nos tiene prisioneros del infierno, el falso "paraíso" proclamado por el pueblo, leyes que rigen nuestro camino y en vez de ser nosotros quienes volemos sin rumbo fin hacia lo desconocido, ahora ella esplendida y gloriosa, en su mundo ella gobierna y tiene sus propias leyes, en el mundo exterior ella luce su hermoso vestido de rosas, ¡LAS ROSAS! Algo que no la identificaba pero quiso tomar un rumbo diferente, ahora cumple los sueños de su alma, los deseos de su corazón y la satisfacción de lo que logró. Su nombre, una dulce tentación, nadie sabe cuál es su nombre por eso es la provocación y aspiración de todos los hombres, pero para las mujeres era el verdadero existir, dos suaves labios son más perfectos que dos simples labios sin querer. ¡MUJER!, lo más grandioso que ofrece la naturaleza y ella lo demostraba, vuela sin rumbo mi dulce mujer, rompe todas las cadenas que oprimen tu alma del buen vivir, navega por todas las olas de tus amantes, explora tu mundo y el de los demás, vive el éxtasis de la tristeza y de la gloria, el perdón y el amor, sé luz y sé oscuridad, con tu dulce caminar lo vas a lograr, mi soñadora sin final.



flores marchitasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora