Calladitos Mas Bonitos #2

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Narra Chi




 Al terminar las clases me monte en mi deportivo tan bonito, y acelere. Debía de llegar al trabajo de medio tiempo, y el camino era lo que se podía decir "Largo". Para cuando llegue y aparque, entre por la puerta trasera del edificio, donde el cartel de "Solo empleados" le dio la bienvenida. Caminando por el pasillo privado hacia los vestidores del personal, me cambie de inmediato al supuesto uniforme que trata de un short negro ( algo corto ) pero levanta mi culo, una remera negra con letras en rosa "Shaderick"con un tiburón ubicado bajo el busto. Es el nombre del bar, que descubrí que no solo es un bar, si no que también es para comer con familiares ( como esa serie llamada...Mhm....creo que era True Blood ) pero no llegue ni ver el primer capitulo de la serie, porque mi madre me apago  la computadora, interviniendo en el momento.

Con normalidad pase dejando los pedidos y tomando ordenes de las mesas ( que guay me siento ). Al final no tuve ningún inconveniente con borrachos y me hice amiga de las únicas dos camareras que aún quedaban, y del cocinero musculoso. Mis amigas dicen que si no lo quiero que son de ellas, yo encantada se los di, pero he visto como me mira siempre ( aveces me da escalofríos ) y pensando en como se siente estar rodeado de humanos con una sed descontrolada. Si. Ese chico es un vampiro pálido, pero musculoso.

Pude olerlo nada mas entrar la primera vez. El choque de bebidas alcohólicas. Sudores. Y el inconfundible aroma de un muerto. ¿Como no reconocer a mi propia raza?

 Entre como cualquier chica para pedir el trabajo, lo bueno es que nadie me encontrara, gracias a mis trucos y habilidades he tenido todo planeado siempre. 


Saliendo del vestidor, luego de pasar de llevar el uniforme de vuelta a la ropa cotidiana, sali, el Jefe se despidió con un leve "Hasta mañana". Cuando cruce la puerta principal, estaba por subirme a mi auto cuando escucho ruidos fuertes que provenían del callejón, y como soy una curiosa y ya estoy muerta, pues no me aria daño mirar un poco. 

Me asome para encontrarme con ese musculoso vampiro, solo que reteniendo a una de mis compañeras de trabajo 



- Eres un idiota lo sabias - Pronuncie mientras dirigía mi mirada ha mi amiga


 desvió su vista a ella, con ese rayo de esperanza en sus ojos - Amiga...A-Ayúdame - suplico una totalmente asustada, Samanta.


El no volteo ni a verla, solo procediendo a dirigirle unas palabras - Te recomiendo que te vayas - Pronunció el vampiro musculoso


- ¿Y si no quiero colmillitos?  - Le desafié. Observando la evidente molestia que le había provocado, sin poder evitar pensar ( Lo siento por ti Colmilludo. Soy demaciado infantil como para seguir las ordenes de un adulto )




 Este suelta a Samanta. Ella claramente mostraba su sorpresa, y a la vez su alivio.Mas aun asi no tuvo oportunidad.

Los ojos de ambos se encontraron, y una de las características magias de los vampiros, se llevo acabo. La memoria de lo que hace segundos o minutos había registrado, ahora se perdía en la nada. Ahora que su tarea estaba terminada, el cuerpo inconsciente de la pelirroja se deslizaba, terminando en el frió suelo del callejón. Solo habiendo perdido la inconsciencia. De un pestañeo al otro me encontraba con la espalda contra la pared,  y un enfadado vampiro reteniendome contra esa misma pared.
No me sorprendí. Esos ojos rojos que indicaban sed de sangre. Matanza. Siempre  sacándote de quicio, sacando tu peor lado. Sus colmillos asomaban fuera, esperando ansiosos a morder la suave piel para llegar al elixir de la vida, inclino mi cabeza a la fuerza para lamer mi cuello. Y aun con todo eso, lo miro sin ningún temor a los ojos, lo que llama su atención por completo.

Bajo La Luz LunarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora