El anime también necesita héroes.

¿Por qué estoy aquí?

¿Qué estoy haciendo a mitad de calle acostado? ¿Dónde estoy? ¿Por qué todos se ven tan geniales y estúpidamente sensuales? 

Recapitulemos: Estaba sentado frente a mi computador viendo anime...

-¡Víctor!- Escuché gritar a mi hermana desde su cuarto -¡Dame mi cargador! 

-¡No, ven tú!- Dije un poco fastidiado. ¿¡Qué acaso nadie puede ver tranquilamente anime en esta casa!?

Tenía tarea que hacer y mañana tenía escuela. ¿Qué haré? ¿Hago mi tarea y me convierto en buen estudiante o veo anime y me convierto en vagabundo?

Prefiero la segunda opción.

Estaba viendo mi anime cuando apareció un anuncio muy extraño sobre un nuevo anime. Decidí ver el nuevo anime.

El transcurso de la historia era un poco extraño, veía un pueblo llamado Wordel. Que nombre tan extraño, aunque he de admitir que me gusta ese nombre. Inmediatamente me apareció un mensaje en una pestaña nueva diciendo "Todo esta por cambiar. Todo lo que amas se irá. Te necesito."

-¡Kim! ¿Has estado jugando con mi computador?- Grité debido al extraño mensaje.

-¡No, aborto de mono!

-Justo en el kokoro- Dije mientras ponía mi mano en mi pecho.

Después de que mi hermana hirió mi corazón fuertemente me percaté de que el mensaje aún seguía ahí.

-¿Quién eres? ¿Acaso eres un pedófilo que planea raptarme y vender mis sesos en el mercado negro?- Le escribí apresuradamente.

-Que específico, pero no. Quiero tu ayuda en este momento.

-No se quien eres, no puedo ayudarte.- Escribí confundido.

-Pronto lo sabrás- Escribió inmediatamente.

-No se dónde estás, no puedo ir allá- Le contesté un poco fastidiado. 

-Oh, claro que puedes.

Con ese último mensaje sentí como mis sesos se revolvían y vomité. Cerré los ojos porque el vómito era rosita y me dio asquito. 

Cuando abrí mis ojos yo ya no estaba en mi casa, estaba en la calle, en otro mundo.