Dolor...

Parte única

Luces... Después de que Gray-sama me empujara ví unas luces atravesar todo su cuerpo... Su sangre empieza a cubrir el suelo a su alrededor... Me acerco a él temblorosa y acaricio su mejilla... Normalmente, su cuerpo es algo frío, pero al mismo tiempo cálido... Ahora, solo es frío. Las lágrimas no dejan de caer y chocar contra su cuerpo inerte. Derrotada, estallo en llanto y me apoyo sobre su pecho. Sus latidos han dejado de sonar... Su pecho ya no sube y baja al ritmo de su respiración...

Está muerto.

-Gray-sama...- digo entre sollozos- ¡No, Gray-sama! ¿¡Por qué!? ¿¡Por qué tuviste que salvar a Juvia!?- apreto los puños, levanto la cabeza con los ojos cerrados y grito con desesperación- ¡GRAY-SAMA!

De repente, otro de esos rayos que me arrebataron a la persona que amo se dirige hacia mi. Lyon-sama me grita que lo esquive, pero yo no me muevo. No tengo por qué hacerlo, no ahora que he perdido a Gray-sama...

Siento como el rayo atraviesa mi pecho, pero no me duele... Mi cuerpo cae al suelo sin vida, al lado del hombre dueño de mi corazón... A medida que mi vista se hace borrosa, puedo ver a Lyon-sama y a Meredy acercarse, ambos llamándome para que aguante. Cierro los ojos y me dejo guiar por las garras de la muerte...

Todo se vuelve oscuro.

-Juvia...- me remuevo incomoda- Juvia... Despierta...- abro los ojos lentamente y veo una figura oscura delante de mi- Vamos dormilona- parpadeo un par de veces y, cuando consigo aclarar la vista, veo como me sonríe y me mira con ternura-. Hola.

-¿Gray-sama...?- asiente, siento como se me empiezan a llenar los ojos de lágrimas y lo abrazo, consiguiendo tirarlo hacia atrás- ¡Gray-sama!

-Hey, cuidado- lo apreto más fuerte, empiezo a llorar, él se sienta y me devuelve el abrazo-. Tranquila... ya ha pasado todo...

-Pe-Pero Juvia vio como...- me acaricia el pelo.

-Lo sé, y te pido disculpas por dejar que vieras eso... pero ahora estamos a salvo, aquí no nos pasará nada malo- me separo un poco de él, lo miro a los ojos y el me seca las lágrimas con una sonrisa-. Aquí podremos estar juntos...- asiento, nos levantamos y empezamos a caminar cogidos de la mano.

-Ne, Gray-sama...- me mira- ¿Vamos a estar aquí para siempre?

-No, solo será un rato- lo miro confundida, él se frena y me abraza por la cintura, pegándome a él-. Verás, parece que aún no es la hora de que nosotros estemos aquí, por eso volveremos al mundo de los vivos dentro de poco. Tómatelo como si estuviéramos durmiendo y esto fuera un sueño.

-Pero... ¿recordaremos lo que pasó aquí?

-Eso ya no lo sé... pero de lo que sí estoy seguro es de que no podemos desperdiciar esta segunda oportunidad. Cuando despertemos todo estará bien, ya lo verás- asiento y bajo la mirada.

-Gray-sama... ¿Por qué hiciste eso...?

-¿Acaso no está claro?- me coge por la barbilla y nos miramos a los ojos- No podía verte morir y quedarme de brazos cruzados cuando podía impedirlo. Nunca me perdonaría el dejarte morir.

Intento contestar pero todo se vuelve blanco y ahora estoy sola. Él dijo que todo estaría bien y sé que es cierto. Podré volver a ver a Gray-sama...

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Abro los ojos y lo veo detener los rayos con su magia. En cuanto acaba, veo como esos mismos rayos lo atraviesan por varios lugares, acabando con su vida... pero es solo una especie de recuerdo, algo que pasó pero que, al mismo tiempo, no lo hizo.

Mi corazón empieza a latir cada vez mas rápido. Siento como si hubiera recuperado algo muy valioso...

Veo como se acerca y, sin pensármelo dos veces, corro para abrazarlo.

-¡Gray-sama!- se sorprende durante unos segundos pero acaba devolviéndome el abrazo.

-Juvia...- su respiración se agita un poco, suspira aliviado y me abraza un poco más fuerte- Tranquila... Estoy aquí...

-Sí...- escondo la cara en su pecho y dejo caer unas lágrimas- No vuelvas a asustarme así...

-No lo haré, te lo prometo.