Nunca te olvides de mi (NIALL HORAN) |TERMINADA|

Capitulo 19.

Mientras Niall manejaba y ninguno de los dos hablaba, tomé mi celular y comencé a buscar un poco más sobre él.

Me intrigó saber si últimamente estuvo saliendo con alguien, o simplemente saber un poco más de él.

En Google me había saltado algo sobre una tal Zoe Whelan, una modelo. No tenía ni la mínima intención de criticar ni juzgar a nadie... Pero... no era una chica linda de cara... aunque el cuerpo que tenía era muy lindo. Sabía que a Niall no le gustaban las modelos, por lo que entendí según Rebb.

— ¿Por qué no dejas el celular a un lado y me hablas? —murmuró Niall, mientras me miraba de reojo.

— ¿Por qué no me hablas tú? —comencé a desafiarlo.

— ¿Me estas desafiando, para ver quien habla primero? —preguntó con un tono juguetón. Luego sonrió, y no puede evitar sonreírle.

— ¡Claro que no! —dije, dejando mi celular sobre mi regazo, para poder recogerme el cabello en una coleta.

Inesperadamente, Niall aprovechó el momento y sacó el celular de mis piernas mientras que yo tenía mis manos ocupada en mi cabello.

— ¡Niall! —chillé como una niña. — ¡Dame eso aquí! —continué mientras dejaba mi cabello a un lado e intenté sacarle el celular de sus manos lo más antes posible. ¡Se iba a enterar que estaba buscando cosas sobre él! ¡Por Dios! ¿¡Con qué cara lo miraría luego!?

Se avivó y puso mi celular en su otra mano para que no pudiera quitárselo tan fácilmente.

—A ver... —dijo, y comenzó a mirar mi celular.

Enseguida sentí como las mejillas ya comenzaban a arderme.

Deseaba que la tierra me trague.

— ¡Niall! —volví a gritar.

— ¿Buscando sobre Niall Horan?... —preguntó en un tono malicioso.

— ¡Dame eso! —chillé, y por fin pude quitarle el celular de las manos.

— ¡Oye! ¡Estuvimos a punto de chocar! —exclamó como un niño.

—Y bueno... eso te pasa por quitarme las cosas —Me hundí en el asiento, y me crucé de brazos.

Hubo un silencio por unos minutos... Pero Niall me miró y de la nada dijo...

—Zoe es una amiga...

— ¿Qué? —lo miré sorprendida.

« ¿Acaso debía darme explicaciones?

—Que Zoe nada más es una amiga... —musitó, mirándome de reojo.

—No te lo he preguntado.

El rió.

—Pues lo has buscado en Google, así que te interesa. —agregó, mientras tomaba el volante con una sola mano, y con la otra mano, tomó sus lentes de sol.

—Nunca dije que no me interesaba, solamente dije que no te había preguntado quien es la perra de Zoe.

No me había dado cuenta, pero inconscientemente insulté a su amiga.

«Mierda, mierda, mierda. Mil veces mierda»

Mi inconsciente acababa de traicionarme.

— ¿La quién? —dijo, haciéndose el desentendido, y me regaló una de sus hermosas sonrisas.

—Zoe —respondí, secamente.

—Claro... La perra de Zoe has dicho —replicó.

—Entonces si entendiste lo que dije, para que me lo preguntas —Intenté enmarcar una de mis cejas y Niall lo notó.

—No te sale.

— ¿No me sale qué? —Niall realmente quería pelear conmigo.

—Levantar una sola ceja —enfocó su mirada en mi, e hizo aquel gesto que supuestamente él, a mi no me salía.

—Oh, disculpa, chico perfecto. —dije, en un tono de burla.

—No soy perfecto, pero te gusto. —murmuró, guiñándome un ojo.

En esos momentos la palabra "tomate" me describía.

— ¿Qué? —dije rápidamente.

No podía creer lo que me estaba diciendo Niall.

—Claro que no me gustas... —me atajé, sin darle tiempo a responder la pregunta que le había hecho hacía unos segundos.

— ¡Emily! Solo es una broma... —dijo, con una breve carcajada.

—Que lindas bromas haces Niall.

Él hizo un extraño gesto que provocó una risa en mí, y luego se volvió a enfocar en el volante.

Después de unos minutos de camino, llegamos a la casa. Niall estacionó el coche detrás del otro, y bajamos. Harry y Liam comenzaron a desempacar las bolsas.

Era una hermosa y gigante casa de río. Me reencontré con mis amigas, y les conté lo que me había pasado hace unos segundos con Niall.