Capítulo 1

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Actualidad

Cinco cuarenta cinco de la mañana.

Cuando "Dios" había creado las mañanas, las hizo para dormir durante estas horas.

Pero mi nuevo empleo real luego de haber salido del segundo año de la universidad empezaba hoy, ya que los demás (incluso en los ratos libres cuando estudiaba) consistía en ser camarera o cuidar niños, y debía llegar presentable. Mi prima siempre cuestionaba que yo trabajaba demasiado, y lo decía porque ella había acabado la universidad con una beca y con dinero de sus padres. Yo siempre le repetía, el dinero no crece de los árboles y los departamentos no se pagan solo con desearlo.

Y aun me faltaba un año más de estudios...

Caminé arrastrando los pies fuera de mi habitación y me metí dentro del baño. Pensé en ese sueño que acababa de tener, con mi padre. Sabía muy bien que eso podía ser uno de mis recuerdos perdidos, uno de tantos. Prefería ignorarlo, porque no quería torturarme con recuerdos viejos que nunca tendría por completo.

Una cálida y larga ducha después, me encontraba en albornoz, cepillándome los dientes y viéndome en el espejo. Ahora, más despiertas, todos los recuerdos de días atrás y de la pequeña entrevista telefónica que me hicieron regresaron a mi mente: ¿Sabes utilizar computadoras? ¿Cuales son tus referencias? Tu tía es una organizadora muy conocida, ¿Por qué crees que te recomendó? ¿Te consideras apta para este empleo? Te oyes muy educada y sabes muy bien lo que dices, te esperamos mañana a las siete de la mañana, ven presentable por favor.

"Presentable" para ella, era una falda, camisa y tacones, como toda zorra secretaria de empresas como esas. Encendí la cafetera y volví a ese pensamiento, ¿Cómo es que yo me estaba "convirtiendo" en una zorra secretaria? Claro que no iba a hacer nada más que mi trabajo, claro que no iba a acostarme con nadie pero cuando me vieran posiblemente dirían "Oh, mira esa chica es secretaria y se viste como una zorra, de seguro todos en su oficina ya la 'conocen'."

Al diablo, como Ashton diría: "¿Qué importa lo que piensen los demás? Es suficiente con que tú sepas la verdad."

Ashton...

Solo habían pasado tres semanas desde que terminamos, luego de haber estado juntos durante nueve meses, mi relación más larga. Al menos había sido un corte por lo bueno porque "Las relaciones a distancia no funcionaban". Observé la foto del refrigerador en la que estábamos ambos y la quité rápidamente.

Ashton había escogido su trabajo, como cantante, y se había ido a Londres para aprovechar esa oportunidad. Yo no quería detenerlo, era la oportunidad de su vida, una que no podía perder y no quería arruinar sus sueños. Lo quería demasiado como para arruinarlo.

Serví una taza de café y la bebí lentamente, esa sería mi nueva amiga de ahora en adelante: La cafetera. Tenía que quitar esa fatiga por moverme a pesar de que ningún tipo de cafeína, vitaminas o choques eléctricos lo lograría. Era depresión mi problema, y eso no se calmaba tan fácilmente.

Me vestí con la única camisa limpia y seca que tenía, que por desgracia me ajustaba un poco. Medias finas negra, una especie de requisito de zorra, al igual que zapatos de tacón y una chaqueta tejida de igual color, del mismo tono que mi falda, una falda de tubo que comenzaba en mi cintura y acababa un poco arriba de las rodillas.

Mi cabello estaba más largo que de costumbre, pasaba mis hombros y llegaba a mi pecho, ahora las pequeñas ondas que se creaban porque el cabello se me estaba secando parecía a tono de las dos horquillas a cada lado de mi rostro. Me maquillé muy poco, remarqué mis ojos, un poco de máscara de pestañas, rubor, y algo de color rosa pálido a mis labios que tenían el mismo color.

Crazy Little Things In My Head (Crazy Little Things #1) [TERMINADO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora