Era un día como cualquier otro, me asomaba por mi ventana para apreciar como ese aura gris y blanco que bañaba la ciudad, dándole un distintivo de las demás .La verdad ya no me impresionaba nada, lo único que me logró cautivar por un momento fue la lluvia que me regalaba un pequeño sentimiento de esperanza, pero que al final , al igual que cada una de las gotas de lluvia al llegar al suelo, moría de manera silenciosa sin que a nadie le molestase, pero esa es una historia para otro momento. Cerré las persianas de mi habitación, me dirigí a la puerta y tomé mi abrigo para poder cubrirme de la lluvia Mientras salía de mi departamento, cada escalón me daba la sensación de que me acercaba a ese infierno que estaba esperando por mí al otro lado de la puerta, no importaba que estuviera a un par de escalones de distancia, cuando yo habría esa puerta, sabía que estaba entrando a un mundo nuevo.
Un mundo en donde los débiles mueren y los fuertes ganan, un mundo en que los hombres con valores cuelgan de sus cuellos su sentencia de muerte, en otras palabras, un mundo donde la gente como yo sobrevive. . . creo que ya no puedo recordar cómo era antes esta ciudad, me pregunto si era feliz. Mientras me sumergía en mis pensamientos, escuché un grito desgarrador que venía de un callejón unas cuadras más adelante .Me puse en marcha, asimilando que lo que vería sería a alguien a quien le habían robado o hubiese sido golpeado. En el peor de los casos, simplemente una persona asesinada.
Al llegar, vi entre las sombras una extraña silueta... era un hombre que reía demencialmente. La imagen me había dejado pasmado, de pronto vi un lugar en que las sombras me servirían para esconderme y analizar lo que sucedía, entonces, en esa oscuridad, lo único que pude ver bien fueron unos dientes blancos que danzaban acorde a la macabra risa de ese hombre.
Me decidí a acercarme para ver la escena más detalladamente y golpeé una lata vacía de cerveza con el pie, lo cual hizo que el hombre mirara por un segundo y se diera a la fuga. Al confirmar que se había ido, cogí un cigarrillo del bolsillo de mi chaqueta y me dispuse a contemplar la escena, pero en el momento que encendí el cerillo y logré crear un pequeño destello, el cigarro cayó súbitamente de mi boca .la escena era escalofriante, ahí estaba el cuerpo de una joven de no más de 14 años, la cual tenía un par de puñaladas en su cuerpo y en su boca un gran corte que formaba una sonrisa en su cara.
Quedé por un segundo congelado, después reaccioné y en el mismo instante sentí un tirón de mi pantalón. Al darme la vuelta, vi a la chica que estaba agonizando, no me dijo nada, pero su mirada expresaba un gran repudio hacia mí. Luego de eso, solo cerró sus ojos llorosos.
Quedé congelado, lo único en lo que podía pensar era en su mirada, esos ojos que me dijeron más de mil palabras en menos de un segundo, solo logré volver en mí, cuando sentí que el cerillo se consumió y me quemó el dedo. Cuando pensé lo que había sucedido, me di cuenta que si hubiera encarado desde el inicio al hombre, tal vez ella estaría viva, no es que hubiera esperado un "gracias" ni algo por el estilo, sino que hubiera evitado el verla morir.
Volví a hacer lo del cerillo, pero esta vez no para prender mi cigarrillo, sino que para poder ver el cadáver de la joven, entonces me di cuenta que en el pecho de la chica había un mensaje, el cual estaba escrito con la sangre de la joven. Al final, tú siempre tuviste la última sonrisa". Mi mente se nubló al leer esto, sabía que la ciudad era mala todos los días ocurrían asaltos, golpizas entre muchas otras cosas y yo nunca lograba llegar para detenerlas pero esta vez yo estaba presente mire todo y pude detenerlo pero no lo hice estaba aburrido de ver el miedo reflejado en las caras de las personas, estaba cansado de los cadáveres, pero esta vez me decidí. Sé que solo soy un hombre normal, pero me prometí atrapar a quien hizo esto y terminar con su mísera existencia. Tomé la mano de la muchacha e hice esta promesa ¨ No sé si apruebes lo que voy a ser, ni siquiera, puedo prometerte que esto te traerá la redención solo te puedo prometer una cosa. . . Te prometo venganza¨