Un día decidimos hacer algo diferente. Nos fuimos de fiesta juntos. No recuerdo que excusa pusimos para justificar nuestra salida. Vaya tontería. Queríamos estar juntos y ya está.
Nada más verme me susurraste en los labios: '¡Que guapa! Y me encanta que te hayas puesto los tacones azules porque así eres más alta'.
Como no... ¿Por qué te encantaba meterte con mi altura? Si yo tengo la estatura perfecta. Ni muy alta ni muy bajita. PERFECTA.
Yo creo que te gustaba picarme.Una vez en la discoteca fui a pedir unas copas y me di cuenta de que tú no bebías alcohol. Claro, se me olvidaba que eras un chico sano. Bueno, pero yo sí me cogí una para mí. Nunca he sido tan sana como tú.
Estuvimos bailando toda la noche como si no hubiera un mañana.
No sé qué hora sería cuando salimos a tomar el aire.
Nos pusimos a caminar para irnos a casa y llegamos a un callejón bastante desierto.
Me acuerdo que, en un momento, acerqué mi espalda a una pared, pusiste tus manos en mis caderas y comenzaste a besarme el cuello. ¡Madre mía! Me gustabas demasiado de eso no había duda.Cuando fue la hora en la que tenía que irme a casa porque ya era muy tarde, recuerdo que me rogaste 'no te vayas. ¡Quédate un ratito más!' Créeme, deseaba quedarme. Sin embargo, finalmente, me acompañaste hasta mi casa.
Fue una de las mejores noches de mi vida.
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¡Quédate! Y ya veremos...
Short StorySentía que a mi vida le faltaban colores, todo era blanco y negro, y de vez en cuando, había algún gris. Sin embargo, contigo fue como si me hubiese puesto esos tacones azules. Como, si de repente, algo dentro de mí comenzara a brillar. Comencé a ve...