Sonanbulismo

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Desperté y no sabia donde me encontraba, era tarde, se estaba poniendo el sol a mi derecha y lo único que tenia claro era que estaba lejos de casa. Pero ¿que había pasado? ¿Donde estaba?. No tenia idea. Lo último que recordaba era la dulce voz de mi madre la noche anterior diciéndome que descansara, pero eso no me ayudaba mucho para descifrar el porque estaba aquí en... En medio de la nada y aun en pijamas.

Tenia que controlarme, pero no podía, estaba desesperado.

Comencé a andar en el bosque hasta que anocheció quería parar y descansar un momento pero, tenia demasiada hambre y la preocupación y el desespero no me dejaban pensar con claridad. ¿Que había pasado? ¿Estuve solo una noche dormido en el bosque? ¿Que día era? Necesitaba saberlo, estaba enloqueciendo. Comencé a correr sin motivos y sin dirección alguna, tenía que escapar de la espesura del bosque que me estaba consumiendo, la verdad muy dentro de mi sabía que no llegaría a ningún lado y estaba cansado pero, no podía parar, mis nervios estaban colmados y sensibles, necesitaba tener un punto de referencia que no fuese un árbol con una de mis medias para saber si sólo estaba dando vueltas en el bosque. En esos momentos me odie por no dormir con mi celular en los bolsillos del pijama. Tenia que comunicarme con mis padres pero solo seguía corriendo sin parar, no sabía como había pasado tanto tiempo corriendo, debían ser los nervios jamás había sido bueno en deportes. Y he ahí un dolor en el estómago el primero de varios consecutivos y otro, y otro. Un momento después me desplome escuchando a lo lejos un perro ladrar mientras dos hombres de rostro borroso se acercaban a mi. Después de eso mi vista se nublo por completo aunque no estaba inconsciente, escuchaba todo lo que decían.

-Esta muy pálido y desmejorado hay que ayudarlo además , nuestro perro casi lo mata Jeff -Decía uno de los hombres - Sólo hasta que esté bien.

- ¿Como piensas meter un completo extraño a nuestra casa Charles?. Hasta podría pensar que es un indigente ¿no lo ves? - Decía severo y firme el otro hombre - ¿ Qué pasa si nos roba todas nuestras cosas?

- Te prometo que no pasará nada además me encargaré yo mismo de el, lo prometo.

- Está bien, pero luego no vengas a decirme que no encuentras tus cosas.

- Gracias papá.

- Ya te lo advertí.

Cuando pude coordinar todos mis sentidos me encontraba en la habitación de lo que parecía ser un duque o un príncipe, amplias y largas ventanas con cortinas color crema de tela casi transparente para dar la iluminación perfecta a la habitación, puertas de doble acceso hechas de madera de pino con una gran letra M tallada, nunca había visto algo así, intente levantar me de la cama pero mi vista dio un giro como la de un niño jugando a ser trompo, ciertamente aun me encontraba débil y el dolor en mi estomago permanecía, traté de incorporar me entonces note que estaba aseado y ya no tenia la misma pijamas sucia con la que parecía haber dormido en el bosque por una semana, en cambio esta nueva ropa se sentía cálida y suave como si vistiera con las plumas de un cisne y por lo visto era muy costosa.

-Veo que ya estás mejor - Dijo un joven, el cuál no pude distinguir bien por causa de mi vértigo y visión nublada, estaba sentado en un mueble de pino al fondo de la habitación en la que yo me encontraba mi vista estaba fallando, traté de enfocarme en él y pude deducir que tenía mi misma edad, era alto, delgado, cabello castaño opaco como el tronco de un árbol antiguo, piel pálida y con un perfil romano.

No sabia que sentir, podía escuchar mi corazón latir claramente en mis oídos, mis manos sudar de los nervios y la preocupación, no debía estar despertando en casa de un extraño, debería estar en mi habitación. El chico de piel pálida se acercó hasta mi ya que noto que yo me encontraba muy débil para levantarme de la cama.

- ¿Te sientes bien?. Lo siento no debería estar aquí solo quería asegurarme de que

- ¿De que no me robara nada? - Dije en el tono mas calmado que pude adoptar - No estaba inconsciente, sólo estaba débil.

- ¡No! Jamas dije eso. Lo siento no quiero comenzar con el pie izquierdo por que creo que pasarás un tiempo aquí en la casa mientras te recuperas, quiero que sepas que eso lo dijo mi padre y me disculpo en su nombre él suele ser un poco descortés con todo el mundo no te ofendas. Soy Charles un placer amigo.

-Soy Caleb, podrías decirme donde estoy y que día es hoy.

- Oh, claro lo siento, estás en la casa de campo de mi familia los Matfí en el condado de Weston y hoy es 15 de octubre del 2013- Dijo el muchacho con la mayor amabilidad posible- Disculpa si te presiono amigo pero ¿Que hacías a mitad del bosque a las 6 de la tarde?

No pude concentrarme en responder a su pregunta, era imposible hacerlo sabiendo que estaba tan lejos de casa y desde hace cuatro días, pero ¿como? Como había pasado tanto tiempo dormido en el bosque o aquí en esta casa, sin comida, sin agua. Era imposible.

Mire a mi alrededor tratando de recordar alguna otra cosa que no fuese a mi madre dándome las buenas noches pero, al parecer

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⏰ Última actualización: Mar 05, 2016 ⏰

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