Capítulo 22: Es hora de decir la verdad.

53 4 0
                                    


Clea POV:

-Hola Clea -susurró alguien en mi oído y me sobresalté, tirando todos los libros que había sacado de mi casillero.

-Me asustaste Noah -dije intentando recuperar el aire y comencé a juntar mis libros. -Y hola -levanté apenas mi mirada e intenté sonreír.

-Estás un poco distraída hoy. ¿Ha pasado algo? -preguntó ayudándome a juntar el último libro y levantándose conmigo.

-No, solo cosas de familia. Nada importante.

-Oh, espero que todo esté bien -mordió su labio inferior y miró el suelo.

¿Acaso estaba nervioso?

-Lamento lo de Butler el otro día. Él es...

-¿Tu novio? -terminó la frase por mí y yo solté una carcajada, pero no había nada de diversión en ella.

-No... es... mi amigo nada más -contesté fallando en mi intento por no tartamudear.

-Oh, entonces él no lo sabe.

-Claro que lo sé. Tú también lo sabes, ¿cierto? -preguntó Butler rodando su brazo a mi alrededor y sentí que mis piernas se hacían gelatina.

Noah le dio apenas una mirada de soslayo y volvió a mí, ignorándolo por completo.

-Oye Clea, ¿cuándo podemos seguir con el proyecto? -preguntó Noah.

-Uhmm mañana -conntesté mirando fijamente mi libro.

-No preciosa, mañana tenemos tutoría. Al igual que pasado, y pasado, y después de ese día y cada día por el resto del año -contestó mirando a Noah con una sonrisa burlona.

Yo luchaba con todas mis fuerzas por no partirle una costilla con mi codo, porque lo tenía muy cerca mío.

-Creo que tu amigo no opina lo mismo -Noah sonrió divertido por la situación.

Genial que te diviertas, a mí me encantaría esconderme bajo una roca gigante.

Butler me acercó más a él y pude sentir como sus músculos se tensaban.

-Butler no decide nada en mi vida -lo empujé finalmente, para alejarlo un poco. -Y sí, mañana podemos juntarnos a hacer el proyecto -concluí con una sonrisa, que pronto se reflejó en su rostro.

-Bueno, nos vemos mañana Clea -me dio una de sus sonrisas de oh que lindo y dulce que soy y se fue.

-No puedo creer que te guste esa cosa -susurró Butler con un tono amargo en su voz y yo reí.

-Creíste que me gustabas tú -me volteé para mirarlo y quedamos demasiado cerca.

-Primero, sí te gusto. Y segundo, no puedes compararme con él. Lo supero en varios aspectos preciosa.

-Él por lo menos usa mi nombre para hablar conmigo.

-Tu nombre es extraño y preciosa te sienta mejor, porque eres jodidamente hermosa.

Odiaba que dijera esas cosas, haciendo que perdiera mis latidos en algún lugar a mi alrededor.

-Tú eres jodidamente idiota -grité y lo alejé de mí para volver a ordenar mis libros.

-Pero te gusto -susurró en mi oído y bajó hasta mi cuello, presionando un pequeño beso.

Y creo que me derretí.

-No... -susurré apenas.

-¿No qué? -preguntó y volvió a besar mi cuello.

-No me gustas... aléjate -grité, cerrando con fuerza mi casillero.

Apostando a tu amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora