Doble Identidad #Wattys2019

Capítulo #12 / Secuestro.

Llegamos rápido a casa,entramos a pasos rápidos. Busco en el armario de disfraces algunas pelucas y ropa negra. Les doy a cada uno lo que deben ser mientras Lissy lee nuestro nuevos nombres y papeles,el mio encaja, seré la líder, mandona y la que siempre habla, sé que Darío me ha dado ese papel para protegerlos. Busco mis botas negras y mi chaqueta de cuero negra. Luego saco un bolso café con Muchas armas adentro, Ángel y Tony me ayudan ya que es algo pesado. Mientras los chicos llevan a la sala las armas yo saco varios bolsos negros de cuero para cada uno así dividiremos las armas. Debemos estar tranquilos y creernos nuestro papel ya que para el secuestrador nosotros somos los mejores y no nos gustan que nos hagan preguntas ni hablar mucho. Cada uno elige sus armas y balas, llevamos tanto pistolas como navajas, hasta metralleta. Todos estamos vestidos y listos. Salimos a la cochera en busca de un auto impecable que está al fondo del estacionamiento,es negro,deportivo, como me gustan. Debe estar impecable en el sistema porque se supone que un sicario jamás usa el mismo transporte por las cámaras de vigilancia, antecedentes o multas que puedan hacer que nos delaten o bien ir a la cárcel. Ya una vez en el auto yo subo al volante. Salimos no muy lejos de la ciudad. La dirección indica una bodega abandonada. Eso me trae recuerdos pero debo ser dura ahora más que nunca, ya que un chico corre peligro y necesita que le salvemos. Todos llevamos cámaras diminutas y auriculares que solo nosotros podemos ver porque son muy pequeños y son fabricados en la empresa de mi padre a si que nadie sabe que existen. Nuestra ropa es aprueba de balas, es mejor ser precavido.

Llegamos a la bodega, ya todos saben sus papeles, deben ser serios, rudos y sin gritos, si alguien no hace lo que yo ordene ya que mi papel también es una chica sin asco, lo cual no es mentira. Estoy dispuesta a matar a quien se lo merezca, mi padre siempre me enseñó que si alguien es malo sea hombre o mujer debe pagar si el dañado es un chico sin poder defenderse o si realmente es muy malo. Así que este secuestrador se ría en una bolsa negra de acá.

Al bajarnos del auto hay unos gorilas en la puerta, son tipos que con solo ver es pura apariencia, sonrió al ver lo estúpidos que se ven.

Yo no les miro sólo camino firme con mis compañeros detrás mío, uno de los tipos me detiene poniendo una mano en mi pecho, yo le miro la mano y luego lo miro a él, le sujeto la mono con fuerza provocando que suene fracturada, el tipo se queja pero el otro habla.

- Su nombre señorita.

- Rosa. - le digo seria.

- Qué rosa más ruda. - se queja el otro tipo.

- Eso me han dicho. - respondo seria mientras los quitó de mi paso y continuó mi camino mientras mis compañeros me siguen, al entrar miramos al secuestrador, lo sé por las fotos y documentos que me envió Dario.

- Valla, valla. Rosa. O prefieres que te llame Tarántula? - pregunta el sujeto sonando arrogante.

- Da igual. - le respondo seria.

- Ya veo que tus datos son ciertos al igual que tus reglas. Me gusta...-dice el pervertido mirándome de arriba abajo.

Yo agarro mi arma y le apunto a la distancia.

- Me vuelves a ver así y te vuelo los putos sesos idiota. - le digo molesta, el tipo levanta las manos y riendo, luego me hace señas de que le sigamos.

Por el trayecto miro chicas en cuartos, las chicas han sido maltratadas, se nota que aquí las explotan sexualmente. Las pobres me miran temblando, yo continúo, no deben darse cuenta que soy infiltrada. Lissy me hace señas pidiendo que le salvemos yo le hago señas que se calme y le respondo con el pulgar arriba como respuesta de que si las salvaremos.