¿Por que mi padre tenia siempre que obligarme a mirar la Mona Lisa? ¿Y por que siempre me hacia escuchar música clásica? Supongo que sencillamente era mi destino, por decirlos de alguna manera. tenia veintisiete años cuando por fin tuve la valentía de hacerle a mi padre esas preguntas, hasta entonces ni siquiera había tenido fuerzas para pronunciar el nombre de esa mujer, tanto miedo me daba.
Mi padre me contesto que Chopin era buen músico, por lo que cuando estaba llorando a moco tendido, el me encerraba completamente sola en una habitación y me hacia escucharlo. Por aquel entonces ninguno de nuestros vecinos tenia tocadiscos ni televisión, que no era nuestro caso y, para colmo, muchos de ellos estaban obligados a subsistir a base de los restos de verduras que conseguían de gorra en el mercado, dado que la carne, los tejidos, el aceite y otros productos básicos continuaban racionándose. mi padre pensaba que, como miembro de la única familia <intelectual> o educada de nuestro bloque de apartamentos, debía sentirme afortunada.
Decía ademas que nunca había pensado que yo pudiera tenerle miedo a ese grabado que colgaba de la pared. ¿Por que sencillamente no miraba al mapamundi que estaba colgado justo a su lado? ¿O al mapa de China? ¿O a mis propios dibujos? ¿Por que tenia que mirar dichoso cuadro? Por fin, me pregunto: Bueno, ¿por que te daba tanto miedo?
Muchas otras personas me han hecho la misma pregunta, pero cada vez que esto ocurre, me siento mucho menos aterrorizada, aunque continua siendo un interrogante al que no puedo contestar, de la misma forma que no puedo explicar por que, cuando era una niña muy pequeña que apenas podía hablar, mi padre opto por actuar de esa forma cada vez que me ponía a llorar.
En realidad, nunca he mirado de cerca a esa mujer (me da demasiado miedo como para intentarlo). No obstante, los recuerdos mas vivos de mi niñez son los de su retrato.
A medida que me fui haciendo mayor, determinadas ideas consolidaron en mi mente. Sus ojos eran como un accidente de coche en el momento del impacto; su nariz un edicto promulgado por las tinieblas, como una escalera de mano erguida; y las comisuras de sus labios eran destructivos remolinos. Parecia no tener huesos , a excepcion de los de la frente, y esas cejas poco pobladas eran una burla constante. Su ropa era como un paraguas tan enorme que amenazaba con secuestrarme, y luego estaban sus mejillas y dedos, que no se podian negar que recordaban a los fragmentos en descomposicion de un cadaver mas que a ninguna otra cosa.
Se trataba de una mujer peligrosa, y yo a menudo me encontraba frente a esa peligrosa presencia. Tenia muy pocos temores, pero ella era uno de esos. En clase de historia de la escuela primaria, una vez me quede espantada al levantar la vista y encontrarme frente a frente con la proyeccion de una diapositiva de ese cuadro. Se me tenso el cuello, y di un grito ante aquella conmosion . Mi profesor reacciono concluyendo que era una mala estudiante e hizo que me pusiera en pie como castigo. Luego me llevo al subdirector, quien me solto un severo sermon. En un momento dado, llegaron hasta el punto de acusarme de leer <pornografia> , como el entonces popular libro clandestino El Corazon de una Joven.
Fue entonces cuando arranco mi odio por el hombre que la habia pintado, y cuando empece tambien a despreciar profundamente a todos los que se autodenominaban >intelectuales<. Mi odio tenia algo de pureza: abri mi corazon y sentia una rabia convulsiva que latia en mis venas. A esta sensacion la denomine >repugnancia<.
Mi absoluto terror ante este cuadro hizo desaparecer toda sensacion de cercania que pudiera haber sentido hacia mis padres, y me convencio, demasiado pronto, de que el mundo era algo incomprensible que nunca podia llegar a conocerse.
Mas tarde, encontre las fuerzas necesarias para enfrentarme a mi miedo, la encontre en la luna y en su luz; en ocasiones era en forma de rayos luminosos que recordaban la luz de la luna, y otras veces en forma de ojos y labios que se asemejaban a la luz de la luna. Incluso a veces se encontraba en la luz de luna de la espalda de un hombre.
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CARAMELOS
RomanceCaramelos es un relato desgarrador en primera persona acerca del riesgo y el deseo; la historia de una joven china que trata de forjarse una vida en un mundo aparentemente desprovisto de pautas. Hong se ve obligada a abandonar el instituto y huye co...