CAPITULO XXXVI

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POV KLAUS

Algunos días habían pasado desde aquel desastroso encuentro con Caroline. En todos los jodidos lugares de la ciudad donde pude haberla topado, justamente tenía que ser en el maldito hospital con Camille a mi lado. Fui un completo idiota, me daba rabia aceptar que todos tenían razón. ¡Maldito ingenuo! Creyendo que Caroline iba a perdonarme algo como esto. ¡Embarace a otra mujer! ¿Cómo se supone que iba a recibirme? ¿Con los brazos abiertos, felicitándome? ¡Joder, no! ¡Imbécil! ¡Imbécil! Se repetía en mi mente, recriminándome a mí mismo.

Fueron unos días de infierno, completo infierno. Caroline no quería verme, todos los intentos por tratar de hablar con ella. Fallidos. En el momento en que ponía un pie en la acera de su casa, Alaric estaba corriéndome a patadas. ¿Pero era lo que me merecía, no? ¡Por mi gran cagada!

Los paparazzi no habían dejado de seguirme desde ese día en que me vieron salir con Camille del hospital. La noticia se extendió rápidamente, era el chisme del momento. Y me enfurecía más, en estos momentos odiaba no tener una vida normal. No tenía privacidad, en cuanto salía del edificio millones de reporteros y medios de comunicación estaban ahí, haciendo preguntas sobre mi "infidelidad". Sabía que a Caroline también la perseguían, lo había visto en los periódicos, televisión e internet. Lo que más me molestaba era que se burlaban de ella, tachándola como una cornuda. ¡Y todo por mi jodida culpa!

Las ansias por verla, crecían y creían conforme las horas de cada día pasaban. Cada día intentaba ir a buscarla, sin éxito. Y cuando regresaba me encerraba en mi despacho a beber, justo como en este momento. No tenía cabeza para nada, más que Caroline. No tengo palabras para explicar lo putamente mal que me siento. No quería aceptar el hecho de que he perdido a la mujer que amo, ¡porque no, no es así! ¡No puede ser así! ¡Me niego a renunciar a ella!

Mi mirada se queda fija en una foto sobre el escritorio, Caroline y yo en nuestras primeras vacaciones juntos en la playa. Sentados sobre la arena, una foto que recuerdo tomo mi hermana. Le doy un sorbo a mi copa mientras los recuerdos me golpean, no soy consciente de haber apretado tanto la copa de vidrio entre mi mano hasta que siento un pequeño punzón y veo sangre escurrir sobre el escritorio. ¡Joder! Me paso la otra mano por el pelo, y poco después me levanto para salir de la habitación y buscar algo con que curarme. Todo el lugar está a oscuras, ni si quiera me había percatado que la noche había caído. Camino por el pasillo en dirección a la cocina, prendo las luces y todo el departamento se ilumina. Camille no está por ningún lado, lo cual agradezco.

Enjuago la sangre de mi mano mientras reviso la profundidad de la herida. De pronto escucho el timbrado del ascensor anunciando que alguien ha llegado. Katerina aparece frente a mí. ¡Genial! Lo que faltaba.

¿Qué haces aquí? –Le pregunto en tono amargo.

Elijah me envió para saber cómo estaban tú y la falsa rubia –Responde dejando su bolsa sobre la barra de la cocina. Ruedo los ojos y cierro el agua del fregadero. - ¿Qué te paso? –Pregunta en cuanto ve la herida en mi mano.

Nada que te importe – Digo buscando entre los cajones algo con cual vendarme. La escucho venir hasta mí y toma mi mano revisando la herida. Va hacía el otro extremo y saca unas vendas que ni siquiera sabía que estaban ahí. Comienza a vendar mi mano, y esta es la primera vez que la tengo tan cerca en años. En cuanto termina se aparta sentándose sobre el taburete. La miro con el ceño fruncido. – Gracias.

No es nada – Contesta mirándose las uñas. Las cuales tiene perfectamente arregladas. - ¿Y bien qué tal todo por aquí? ¿No has horcado a la arpía aun, por lo que provocó?

¿Por lo que provocó? –Pregunto no comprendiendo a que se refería. ¿Había algo que yo no sabía?

Ya sabes, su falso dolor en el vientre para que no pudieras ver a Caroline. – Dice golpeando sus dedos sobre la barra de la cocina de manera despreocupada. Arrugo la frente, y ella rueda los ojos. - ¡Ay demonios! ¡Te creía más inteligente!. ¿De verdad crees que se sentía mal?

The Sound Of Your Hearbeat(Pausada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora