Capítulo 10:

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Tan pronto como el avión comenzó a volar. Recosté mi cabeza hacia atrás. Pensé y pensé. No se me ocurría nada para decirle a Justin. El era muy cariñoso conmigo, pero desde que lo conocí fue así. Ahora les deje el paso libre a Jeryl para que pueda estar con Justin. Es raro ya que ella me dijo que estaba con Harry pero esas miradas que se dan.. es difícil de aceptar. Se me hace difícil poder vivir eso. Me siento que los estorbo. El, por otro lado no deja de hacerme caso incluso cuando esta Jeryl cerca. El siempre busca hacerme reír o dice algo para que lo mire. Salimos y eso pero cada vez pienso más y más en el. Es imposible no mirarlo cuando esta cerca de mi. Lo quiero tanto. No ?se imagina que es lo que estoy sintiendo.

Dormí la mitad del camino y la otra estuve pensando y analizando. Comí algo pero no tenía mucha hambre.

-Señorita Collins, su padre esta en la pista esperándolo. -dijo un chico como de mi edad avisándome que ya aterrizaríamos. Acomode mis cosas y mi pelo.

-Gracias. -sonreí y el me devolvió la sonrisa.

Comenzamos a aterrizar y baje las escaleras del avión para encontrarme con mi padre.

-¡Papa! -grite al verlo.

-¡Hija! -dijo abrazándome. Eran como las 4 de la madrugada.

-Te he extrañado tanto. -sonreí.

-Y yo a ti, querida. Vamos. -guardo mi maleta y entramos en su camioneta.

-¿Qué ha pasado? -sonreí entrando a su camioneta.

-Han habido noticias de ti. -dijo sonriendo. Ah, que en Canadá fuéramos famosos y la gente quiera tomarnos fotos no significa que aquí también lo seamos.

-¿Por qué? -pregunte frunciendo el ceño.

-Recuerda que somos empresarios y siempre el hijo de cada empresario es famoso también. -maldeci en mis adentros.

-No quiero esta vida. -suspire.

-Lo se. -contesto.

-¿Qué clase de noticias? -pregunte.

-Sobre ti y el hijo del Señor Bieber. -dijo y me atragante con mi propia saliva.

-¡¿Qué?! Si el sólo es mi mejor amigo. -dije.

-El es un buen chico, ustedes dos tienen una foto cuando pequeños. -sonrió y yo aún no podía creerlo.

-¿Por qué?

-Por que su padre es uno de mis socios y estábamos en una fiesta familiar y ustedes dos se llevaban muy bien.

-Osea, déjalo estoy muy confundida.

-En casa esta la foto. -sonrió.

-Tan pronto que lleguemos me la enseñas. -sonrió y logro hacerme sonreír. Justin y yo nos conocíamos de antes.

-Ya mi amor. -dijo y corrí hacia dentro de la casa como una niña pequeña.

-Tu madre debe de estar durmiendo querida. -dijo el al entrar a la casa.

-Eso pensé. Me había olvidado la hora que es. -dije cogiendo mi maleta.

-Ven, te mostrare la foto. -sonrió hiendo a la gran sala que esta casa tenía.

-No han echo remodelaciones. -dije mirándolo todo.

-Tu madre no quería, ella te recuerda tirada en los muebles viendo televisión. -dijo y reí.

-Allá es tan diferente y me gusta. -sonreí.

-Toma. La foto. -sonrió y me la entrego. Justin era hermoso. La foto estaba Justin dándome un dulce beso en la frente, como siempre y yo cerraba los ojos. Como siempre. No podía creerlo. Era la mejor foto que podía haberme tomado con el. Justin y yo teníamos miles de fotos juntos.

-Mira. -sonreí al mostrarle la última foto que me había tirado con el.

-Ustedes se ven muy bien juntos. -sonrió.

-¿Puedo hablar contigo?

-Claro siéntate. -sonrió el sentándome a su lado.

-Creo.. creo que me enamore de el. -suspire frustrada.

-¿Y eso que tiene de malo? -dijo el.

-Que no creo que ese amor me corresponda. -dije.

-¿Por qué?

-Por que no creo que el sienta lo mismo. Ademas, creo que Jeryl también siente algo por el.

-Habla con el.

-Dañe la amistad una vez, no quiero hacerlo otra vez.

-Haz lo que tu corazón dice. -dijo y le enseñe otra foto de el y yo juntos. -No me había percatado de que tienen el mismo color. Sólo hay muy escasas probabilidades en el mundo que una persona tenga ese color y ustedes dos lo tienen. -dijo sorprendido.

-Aún no entiendo por que tuve que tener este color de ojos.

-Tu abuelo si me contó por qué. -sonrió.

-¿Por que? -pregunte.

-Sólo 2 personas tienen el mismo color, tu color.. el de Justin en el mundo. Y hay una leyenda. La leyenda dice que una vez que se conozcan, el destino siempre hará que estén juntos, quieran o no lo harán. Tu abuelo no me mentiría con algo así. Yo creo que el también esta enamorado a ti, tienen ese lazo unido desde pequeños.

Acepta que nos enamoramos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora