Capítulo 8

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Eliot

La noche pasada había sido difícil lidiar con Kim. Primero se quedo para lavar los platos y después se quedo mirando televisión hasta tarde en el sofá, cuando fui a verla estaba durmiendo así que la levante para traerla a la habitación pero se despertó antes de que llegara a la cama.

- ¿Que diablos haces? - se retorció hasta que la deje en el suelo - ¿Ibas a manosearme mientras dormía?

- No haría eso.

- Por supuesto - dice y se da la vuelta para irse - No me jodas, rubio.

- ¿A donde vas? - le pregunto.

- Al sofá - contesta pero se detiene -. Te robare una almohada.

Ella camina hacia la cama y yo paso junto a ella para cerrar la puerta.

- Abre ahora mismo esa jodida puerta - gruñe furiosa. Kimberly esta enfadada pero ni así hará un escándalo ni levantara la voz

- No te dejare dormir en el sofá, duerme aquí y yo dormiré allí.

- Deja tus encantos para alguna otra, conmigo no funcionan -. Intenta apartarme pero no me muevo.

- Kim, si vas a la sala me quedare toda la noche junto a ti - la amenazo.

- Te odio, rubio. No debí venir - bufa. Rendida se deja caer en la cama.

De verdad odio hacer esto, pero no podría dormir sabiendo que ella esta en el incomodo sofá mientras su cama esta aquí. Ahora que esta acostada me doy la vuelta y abro la puerta para irme a la sala.

- Rubio - llama ella -, quédate si quieres.

Sonrió, aunque sé que no puede verme.

- Lo sé, solo apagare la televisión y las luces - digo con tono burlón y gruñe irritada.

Ahora estamos en mi habitación a solas una vez mas. Ella esta despeinada por la guerra de almohadas que acaba de terminar, se estaba riendo hace un momento, ahora esta seria.

- Kim, deberías ir esta noche con todos, si te molesto me quedare.

- ¿No entiendes cual es el problema? - me enfrenta.

Recuerdo lo que Travis y Stephen me dijeron hace un momento pero antes de apresurarme la oigo.

- No quiero ir y verte coquetear con todas las chicas para luego venir y tratarme todo malditamente encantador. Me hace sentir ordinaria y que lo niegues es peor.

- No eres ordinaria, eres especial para mi ¿O crees que le pido matrimonio a todas?

- Ya no estoy segura de nada - su labio inferior tiembla y me odio por hacerla sentir mal.

- Yo estoy seguro de que no quiero perderte. Dame una oportunidad mas y te lo demostrare.

- Ya veremos - dice. - Me voy con las chicas a la playa.

Asiento y la dejo sola para que pueda cambiarse y encuentro a Travis junto a la parrilla preparando la carne, le echo una mano.

- ¿Vas a ir esta noche para mantener a los chicos lejos de tu preciada Alice? - pregunto.

- No soy su guardaespaldas - contesta indiferente.

- Lo harás de todos modos.

- No sabes cuando detenerte, ¿cierto? - gruñe él y sonrió satisfecho.

- ¿Quieren una cerveza? - pregunta Stephen, y ambos negamos con la cabeza.

Stephen deja su cerveza sobre la mesa de afuera y trae los platos, luego los cubiertos y vasos, entonces puede tomar su cerveza mientras ordena todo.

- Pensé que al ser tantos nos repartiríamos las tareas y no estaríamos los chicos aquí de esclavos mientras las chicas juegan en la playa.

Los tres miramos al mismo tiempo hacia la playa donde Alice, Joy y Kimberly corren con una pelota de playa.

- Nos dominaron - digo con una media sonrisa. Es cierto, ellas solo dijeron "voy a la playa" y se fueron dejándonos el almuerzo a nosotros sin mas elección.

- Alerta vecino irritante - señala Stephen y observamos a Link acercarse a las chicas.

- Debe creer que es una enorme coincidencia encontrárselas de nuevo aquí - bromeo, pero la expresión sombría de Travis no se va. Asesinara a ese chico si nadie hace nada.

- Iré a controlar - Stephen camina hacia la playa y Travis intenta concentrarse en la carne.

- No te preocupes tanto, amigo - le sonrió pero no me mira.



[5] Summer Paradise (Saga: Out Of The Woods)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora