MI Estrella Fugaz

Oh si, iba a matar a ese condenado idiota.

Día 24 de diciembre del 2015, 01:32 Pm.
Bill y Mabel habían salido a pasear al parque. Bill planeaba declararse.
Ya habían pasado 5 años desde que sucedió el Weirdmaggedon. Bill perdió la mitad de sus poderes al ser vencido. Aunque claro, aprendió un truco nuevo, inconscientemente. Se volvió un humano con MUY pocos poderes mágicos. Pero, "meh", repetía el chico rubio siempre que le preguntaban, "algún día me vengaré", amenazaba.

Obviamente Cipher tenía que vivir con alguien, ¿y quién mejor que los Pines?
Ahora que era un chico de 19 años, daba igual. Sobretodo ahora que Mabel tenía 18 años.

Si, el demonio había caído enamorado por la chica peli café. No sabía por qué. Si, Bill sabía muchas cosas, pero nunca supo sentir. Ahora era un humano, tenía mente humana, cuerpo humano, y alma demoníaca. Si, era algo extraño. ¿Qué más daba? Llevaba 3 años enamorado de la menor.
Adoraba esperar tanto tiempo a que ella viniera. Eso hacía cada una de las vacaciones de Semana Santa, Verano, y Navidad especiales. Amanecer un día y tener en la mente la llegada de la alegre chica y su hermano gemelo era extremadamente genial.

Ahora eran vacaciones de invierno.
Y como eh dicho antes, Bill planeaba declararse.
Lamentablemente, no era el único que tenía esa idea.

-¡mi dulce Mabel!- chillo la voz de Gideon y de un chico cualquiera. Bueno, cualquiera a los ojos de Bill.
-¿Gideon? ¿Christ?- Dijo la melodiosa voz de Mabel.
-acepta esto como una ofrenda de mi amor- se apresuró Gideon tendiendo en sus manos un regalo.
-¡No!- gritó el otro chico, alguien peli negro con ojos marrones. -¡acepta el mío!- dijo mostrando otra cajita, más decorada, pero más chica.
Mabel se sintió aturdida -uh, chicos-.
Bill se apresuró a abrazar por los hombros a la chica, mientras la otra mano -que estaba oculta en la bolsa de su chamarra, apretaba con poca fuerza una cajita amarilla con un listón que tenía la forma de la estrella fugaz del suéter de Mabel. ¿Cómo hacer un moño así? ¡No me pregunten! Magia de demonios. -¡hey! No se apresuren. Además, ¿qué importan SUS regalos?-.
La castaña codeó al rubio -no seas grosero- dijo tomando ambos regalos y separándose de su amigo, para luego abrazar a ambos chicos. -gracias a los dos, pero no era necesario-.
Gideon sonrió enérgicamente y salió corriendo, y gritando.
Mabel se separó riendo de Christ, cuando sintió que la tomo de la muñeca.
-aún no termino mi regalo- dijo, posando sus labios con dulzura en los de la chica.

"Oh, sí" comenzó Bill a pensar molesto, con un tic nervioso en su ojo izquierdo /el único visible, gracias a su cabello, que tapaba el otro/ "voy a matar a ese condenado idiota", terminó, encendiendo su mano en llamas azules, cuando sorprendido vio como Mabel se alejaba del contrario casi furiosa, logrando atemorizar al medio demonio, y haciéndole apagar el fuego azul.

-¡¿En qué estabas pensando?! ¡¿Por qué hiciste eso?!-
-p-pero Mabs-
-¡nada! ¡No tienes derecho a hacer algo así!-

Wow. Mabel había madurado, y mucho.

Christ, avergonzado, salió corriendo de ahí.
Bill decidió que más tarde se lo diría. Sabía cómo era Mabel, y si decía algo, quizá lo golpearía diciendo que era un insensible y saldría corriendo. No quería eso.

Cabaña del Misterio, Afueras de Gravity Falls, Oregón. 24 de diciembre del 2015, 08:57 Pm.

Mabel ya estaba tranquila. En la cabaña del misterio había una pequeña fiesta.
Todos platicaban animadamente. Incluso Ford parecía menos paranoico de lo normal. Bill se sentía decepcionado. "Todo un día, y no le pude decir". Suspiro.

-Hey, Bill- llamó una voz femenina. -¿por qué no le has dicho a Mabel?
-no es tan fácil, niña-.
-oh, vamos, ¿es por culpa de Christ?-
-¿cómo sabes?-
Ella rió -vamos, me desharé de el. Ve de una vez con Mabel, tonto-. En ese momento la menor fue corriendo con Dipper y le dijo algo. El mayor asintió, y con una sonrisa, ambos fueron a hacer maldades.
Bill río.
Esa niña era la prima menor de los Pines. Había desarrollado la actitud de Dipper por tanto convivir con el, pero era tan alegre y creativa como Mabel. Se había unido más tarde a las aventuras de los gemelos. Actualmente tenía trece años. Conoció a todos 2 años después del Weirdmaggedon. Ella vivía más cerca de Gravity Falls, así que visitaba la Cabaña del Misterio más seguido, y se había convertido en la confidente de Bill. Todos le llamaban Lina, por que así le gustaba a ella. Aunque nadie más que Stan sabía su nombre real. Al menos nadie en Gravity Falls

Bill hizo caso a lo que la menor le dijo, y fue con Mabel.
-¿Mabs?-
Ella se volteó, -¿Si Billy?-.
Los colores subieron a su cara, y sus palabras desaparecieron. -yo..uh...esto...-

Oh oh. Christ llegó. -Mabel, quería disculparme po-- fue interrumpido.
-¡Mabs!- gritó Lina. -¡mira! ¡Arriba! ¡Con Bill!-.
La castaña hizo caso. Un muérdago. Colgado notablemente de última hora por la menor. La chica rió y volteo al rubio.
Alguien jalo a Christ. Pine tree, dedujo el mayor.

No supo que más paso. Solo sintió a Mabel besándolo. El regreso el beso.

Le declaró lo que sentía mientras le daba la cajita.
Mabel se sorprendía y lo abrazaba, encantada.
Se volvieron novios en unos minutos.
Llegaron amenazas de muerte de los tíos y del hermano de su ahora novia.
Una felicitación de la prima de los gemelos.

Oh, una hermosa noche. Al final, Mabel y Dipper despedían a algunos, mientras el daba un pequeño obsequio a todo el que salía.
Entonces vio a Christ frente a él. Y Sonrío.

-Merry CHRISTmas, Christ- dijo, riéndose levemente de su broma. El menor le culminó con la mirada. Lina, quien estaba al lado del rubio, atinó a reír con ganas.
-Nunca me cansare de tus ridículas juegos de palabras, Cipher-.

Solo esperaba que esa pequeña maldad no lo pusiera en la lista de los traviesos, este año.
Aunque, ¿qué importaba? Ya tenía una bella estrella fugaz. Su perfecto regalo de Navidad.