Un día solos.

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(la música es random, si quieres escuchar ahí está)

Narra Samuel:

S: Ya verás que tan gracioso será cuando te meta mi polla en tu culo.- dije lo más serio posible, caro que era una broma. No haría algo que él no quisiera.

G: ¿Y si nos vamos? Frank debe de estar preocupado.-decía nervioso evadiendo el tema, mientras se levantaba de la cama para recojer su ropa e ir al baño, supongo, que a bañarse.

S: ¡Claro, y yo me quedo con el calentón! -le grité para que me escuchara.

G: Si quieres puedes venir... -le miré sorprendido, pero no dudé en levantarme y salir corriendo hacia el baño cerrando la puerta tras de mi.

Por desgracia no pasó nada, solo nos besábamos y tocábamos. Cuando quise pasar a más Guillermo me dijo que no era momento. Así que solo terminamos de bañarnos para apagar la ducha y vestirnos. Cuando ya estábamos listos, salimos por la puerta y yo la cerré mientras Guillermo llamaba a Frank. Pude escuchar todo, pues Guillermo puso en altavoz. Era muy gracioso escuchar a Frank, no paraba de tartamudear y decir estupideces. Aunque cuando dijo "¿Y ustedes qué? ¿Ya terminaron de "jugar"? " pude ver como Guiller gritaba un "No pasó nada" y se sonrojaba, mientras que yo y Frank nos reíamos. Guille me miró mal y me dijo "pero di algo pringao' " yo solo seguí riendo, cuando me calmé le expliqué a Frank que no había pasado nada y que estábamos saliendo para dónde se encontraba, claro está que le pedí indicaciones. Aproveché que tenía mi moto y un casco extra para poder ir. Cuando llegamos a mi moto le di el casco extra a Guille y me subí a la moto, la encendí y le hice una señal para que se montara conmigo en la moto.

S: ¿Vienes o te quedas? -dije mirándolo extrañado, ya que no se subió a la moto.

G: Si pero... hay un problema...

S: ¿Qué pasa? ¿Quieres ir al baño? -dije chistoso, como si Guille fuera un niño pequeño que necesita ir al baño antes de salir y yo su madre regañándolo en plan "ubieras ido antes de salir".

G: Ja, ja, ja. Muy gracioso. Simplemente que... me dan miedo las motos... -lo dijo tan bajito que no logré escucharlo, así que apagué la moto e hice que repitiera.

S: ¿Qué dijiste? No te escuchaba por el ruido de la moto.

G: Decía que -hizo una pausa para continuar.- me asustan las motos... - lo volvió a decir en un susurro... ¿Acaso le comió la lengua el gato?

S: Tu tío, pero habla bien, que no se te escucha nada.

G: ¡Me asusta montarme en la moto! - Esta vez lo dijo fuerte y claro. Sonrreí un poco y me saqué el casco saliendo de la moto.

S: Guille... no tienes porqué tener miedo... no te pasará nada si estás conmigo. -le dije tranquilo para que no se preocupara y que no tenga miedo.

G: Pero... ¿Si nos pasa algo? ¿Si nos caemos y morimos?

S: Tranquilo... eso no pasará. Anda, confía en mi. Si quieres te puedes agarrar fuerte de mi para no caerte... -dije acercándome a él y agarrándolo de la cintura, a la vez que pegaba nuestras frentes.

G: Está bien... - dice para luego besarme.

S: Entonces vámonos. - dije para darle un beso rápido y volver a subirme a la moto y ponerme el casco, pero esta vez, Guillermo venía conmigo. Cuando arranqué la moto, Guillermo se aferró a mi cintura muy fuerte, tanto que casi me asfixia, pero no importa, con que se sienta seguro me da igual morirme sin aire... bueno... a lo mejor esté exagerando un poco... da igual. Dejé pasar esa acción y me dispuse a conducir rumbo al local que me indicó Frank.

Un Sueño Sin RelidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora