One direction: Las entradas

Capitulo 4: final

CAPÍTULO 4: esperanza y desesperanza.

Llego el dia, Sofía compraría las entradas. La noche anterior le di un millón de consejos a Sofi en caso de emergencia y le avise que Martina no nos acompañaría. Les demostrare mi conversación con ella:

1ra:

- Viernes 21:40 -

Yo:

Bueno so me voy a comer.. Cualquier inconveniente con las entradas ( ojalá que ninguno ) me llamas a casa o al celu .jajaja besoos y SUERTEEEEEEEE OJALAA QUE LAS PUEDAS COMPRAAAARR.. Y

Acordate que platea es tres secciones y asientos con letras y POR FAVOR , LLAMA PARA COMPRAR LA ENTRADAS osea, llama y hace todo por telefono, por las dudas!

2da:

- Sábado 09:16 -

Yo:

Sofi para ventas por telefono tenes que llamar a : tel:011-5355-0867 . Es mejor porque te atiende una persona y no tenes que estar preocupada de que se satura la pagina ni nada. Entonces le pasas todos los datos por telefono, el lugar , y listo! Jajajajja besos.

Y deci que las retiramos por la plata ,porque hay un lugar que se llama jason rock que queda en plaza italia y a mi mama le queda cerca del trabajo.

Ya eran las 10:13 AM Y Sofía me había comunicado que hasta ese momento no las había podido comprar. La página se habría, podías introducir tu usuario, pero luego, chau. Página en mantenimiento. Suena absurdo pero esas tres palabras te hacían agua en tus ojos.

Yo estaba desesperada, y ni me imagino Sofía. Yo trataba y trataba, en tres computadoras distintas, también me fijaba, si esos 5 tonos consecutivos, cambiaban a 5 tonos lentos y una voz que este a través del teléfono. Mi papa estaba en el living con una amigo, justo donde esta el Wi-Fi, y yo estaba en la escalera, yendo de punta a punta de la casa a ver donde había más señal, ya que no podía estar al lado de ese simple aparato. Gritaba en mi interior. Mi mama me decía que le pida ayuda a mi hermano ( el tecnológico de la familia ) y era absurdo a menos que el sea un súper mega hacker profesional y no me halla enterado. Mis nervios eran infinitos. Ya quería que inmediatamente sea 2014 aún cuando faltaban un poco menos de 365 días.

Ya eran las 13:00 y yo estaba desayunando. Mis manos estaban demasiado ocupadas. En realidad había dejado la bandeja en mi pieza y yo, repito, estaba en la escalera. Yo ya me estaba decepcionando de esa inútil página web. Así qué decidí ir a comer algo de lo que me había preparado. Cuando entro a mi cuarto veo a mi perro (Jack) comiéndose todas las galletas. Mi reacción fue abrir el cajón de los zapatos, agarrar el mas duro y pegarle mientras gritaba su nombre. Todo me estaba saliendo mal. No supe nada de mi amiga en esos momentos. Ya todos mis pensamientos eran negativos, sólo quería encerrarme en mi pieza y encender la televisión sin que nadie entrara, estar en otro mundo. Me fui a la cocina, me prepare de vuelta el desayuno/almuerzo y al fin lo pude terminar. Volví a la escalera y seguí intentando lo imposible, ya que la página estaba saturada. Lo que más me molestaba, era algo que dijo una amiga y tenía razón, el 40% de la página saturada eran pendej*s que no se saben ni la mitad de LWWY.

Fui a dejar la taza a la cocina, ya estaba completamente superada. Ya había pasado la cocina, el living, el baño; había llegado a la escalera. Y escuché ese sonido que me alegró y provocó que vaya corriendo lo más rápido que podía hacia el teléfono. Mi papa ya estaba junto a él y me dijo:

- 472 o...

- ATENDEEEEE - le grité con pura desesperación.

Y las respuestas de el hacía la mama de Sofía eran:

- hola

- jajajaj

- nooooooooo

- jajajAjajajajajaj

- si acá están pendientes de vos.

- uuuuu.

- si che?

Todo me sonaba negativo y mi sonrisa se transformó en un garabato.

Y seguía...

- Bueno te paso con Lula que esta pendiente de la llamada.

Yo agarré el teléfono y dije ¿Hola?

- Hola Lula. Ya tenemos las entradas.

Todo ya era el mundo perfecto. Quería gritar como nunca lo había hecho, pero estaba el amigo de mi papa y me daba vergüenza. Yo hablaba y hablaba con ella, mientras mi papa se despedía de su compañía. Cuando cerró la puerta, y a la misma vez corté, empecé saltar mientras sacudía mis brazos y abrazaba a mi mama. Amaba todo, y ese se convirtió en uno de los días más difíciles, complicados y felices de toda mi vida.

Básicamente, esta es la historia. Fin.