La hija de la sirvienta.

Capítulo 46.

  Logan POV:

Está era la charla más aburrida del mundo, hablaban solo de negocios, como si a mi me interesara eso, y de por si ___(Tn) estaba en el baño hace siglos. El rubio no dejaba de mirarme, ni de fulminarme con la mirada. Tenía mucho tiempo haciéndolo, hasta que estalle.

—¿Tienes algún problema, rubio?

—No, para nada —Paso la lengua por sus dientes—

—Entonces, deja de mirarme

—Claro, como tu rostro es espantoso —Río—

—Oh, cierra la boca —Dije—

—Ciérrala tú.

—No me provoques. —Dije—

—¿A qué? —Río?

—Te golpearé

—No te tengo miedo, grandote —El se acerco a mi—

El me tiro un puño por suerte no me lo pego, yo le lance otro en plena cara, el seguía lanzando golpes yo igual, le di el la nariz, se la quebré porque la sangre broto, el me lanzo un golpe y lo pego en mi mandíbula. Me lancé encima de él y empecé a darle golpes.

—¿Qué hacen? —Grito ___(Tn) desesperada—

—Nada —Dijo el rubio avergonzado—

—¿Qué sucede?

Tú POV:

Salí del baño, fui hasta el living pero vi a papá y Alfredo estaban en la cocina, de seguro estaría aburrida cuando volvieran a hablar. Cuando llegue en el suelo había sangre, Logan estaba sentado a horcajadas sobre Niall, y le daba golpes, mientras Niall le daba patadas.

—¿Qué hacen? —Grito ___(Tn) desesperada—

—Nada —Dijo Niall avergonzado—

—¿Qué sucede?

Agarre a Logan por un brazo y lo jale conmigo, mientras le pedía disculpas a Niall. Subimos a la habitación, lo senté en la cama y busque el botiquín, me senté a su lado y comencé a limpiar, tenía varias heridas en su cara, le coloque unas cuantas benditas, y su mandíbula creo que estaba fuera de su lugar. La tome entre mis manos —Esto dolerá—Le susurre, la moví acompañada de un gran grito de Logan, le puse un hielo, lo mande a recostarse y descansar, fui a la cocina.

Subí de nuevo a la habitación y cuando iba subiendo vi a Niall discutir con Alfredo mientras tenía la cara sangrando con un hielo en la cabeza. Cerré la puerta detrás de mi, le puse la bandeja de comida a Logan a un lado y el comenzó a comer, masajee sus piernas, era su mejor amiga tenía que estar para el.

—Date la vuelta

El obedeció, suavemente se volteo, le quite la camisa y comencé a masajear su espalda que tenía muchos golpes, el fue cerrando los ojos.