Maratón2/2 (preparense para llorar)
Niall acariciaba mi cabello, jugaba con los mechones y luego deslizaba su dedo por mi cara. Su expresión era triste y desanimada, me dolía verlo así. Había terminando de contarle todo lo que había hecho, todo desde su ausencia, y el repetirlo me hizo sentirme la persona más estupida del mundo.
-Estoy arrepentido de todo lo que hice, Niall - dije con un hilo de voz - Lo siento.
-También yo...tengo la culpa - suspiró y se recostó en la cama, a mi lado. Tomó mi mano -No debí de irme, necesitabas apoyo en tu estado y... - comencé a negar.
-Yo exageré, hice caso a rumores sin sentido - murmuré - Pero no habías llamado y pensé que ya no me amabas - sollocé.
Niall limpió mis lágrimas, pasando sus manos con suavidad por mi rostro.
-Lo eché todo a perder - susurré.
-No es cierto - dijo él acercando su cara a la mía, para quedar a solo unos centímetros de distancia, podía sentir su aliento combinándose con el mío - Todo va arreglarse.
Aunque él no admitía que estaba herido por mis acciones, podía notarlo, y eso me rompía el corazón. Lo había lastimado y se había decepcionado de mí.
-Lo importante ahora es que ya estás aquí, y vamos a seguir luchando por que te recuperes - dibujó una media sonrisa en su rostro - Esto fue una caída, nos vamos a levantar y seguir a delante. Voy a estar contigo.
Sentía que no merecía esa atención de Niall, que no merecía ese gran esfuerzo que hacía por mantenerme a salvo pero no pude evitar que mi corazón se emocionara al escuchar las últimas palabras que había dicho. Iba a quedarse conmigo.
-Te amo - dije con la voz rota.
-Y yo a vos - se acercó y con delicadeza posó sus labios sobre los míos.
Siempre iba a amar esa sensación de sus labios contra los míos, siempre. Se separó un poco y dirigió sus labios a mi frente, luego comenzó a levantarse. Yo ladeé mi cabeza, curioso y él me miró sonriente. Volvió a tomar mi mano y me besó el dorso, con cariño.
-Vas a estar bien - me dijo.
La puerta se abrió causándome un pequeño susto; Mila estaba parada frente a la cama y su expresión parecía de desconcierto. Llevaba unas hojas en su mano. Posó la mirada en Niall y luego en mí. Soltó todo el aire y miró el piso.
-Hay algo que debo decirles -dijo abatida.
Niall me lanzó una mirada curiosa y yo solo me encogí de hombros. No entendía que estaba pasando, y tenía el presentimiento que no era nada bueno.
-Tengo los resultados de tus exámenes, ________ - anunció.
Al volver a internarme en la clínica Mila insistió en que volvieran a hacerme pruebas de toxicología, así como la de enfermedades venéreas. Apreté la mano de Niall con fuerza, no sé porque sentí que el miedo se apoderó de mí.
-Ya sabemos que consumió drogas - murmuró Niall -¿hay... algo más porque alarmarse?
-Si - siseó Mila.
Ahora la mano de Niall apretó con fuerza la mía, el corazón comenzó a latirme más fuerte y un escalofrió recorrió mi espalda.
-¿Qué pasa? - dije alarmado, casi con desesperación.
-________... - Mila vaciló, parecía no encontrar las palabras - no... no puedo creer que esté pasando... _________ se
contagio con VIH...
En ese instante sentí que me apretaban el pecho con fuerza, que el aire se me iba y no me dejaba respirar. No podía ser cierto, no podía estar pasando. Solté la mano que agarraba con fuerza a Niall y me quedé estático, estaba conmocionado. ¿Yo? ¿Enfermo? Las lágrimas comenzaron a caer por mi rostro y solté un sollozo desgarrador ,Comencé a temblar, preso del pánico. Entonces sentí que los brazos de Niall me rodearon y fue ahí cuando lo vi, vi a Niall, empapado en lágrimas. Me abrazó con fuerza y lloraba al igual que yo. Escondí cara en su cuello y él me acariciaba la espalda.No puede ser - susurré.-No... no puede... no ______ - lo oí sollozar y mi corazón se encogió de pura tristeza.
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Nunca me había puesto a pensar en la forma en que iba a morir, tal vez si en él día en que muriera pero no la forma. Y ahora que lo sabía no podía dejar de pensar en los riesgos que siempre tuve, viviendo en la calle, trabajando como un chico de programa y consumiendo drogas. Me daba cuenta que la vida era demasiado frágil y que me había equivocado al no cuidarla como se debe.
Antes sabía que el día de mi muerte estaría solo, que a nadie le importaría. Ahora las cosas habían cambiado, en mi vida habían entrado personas maravillosas; eso era lo que más dolía, despedirme de ellas.
El VIH/SIDA es una enfermedad incurable, pero que podía ser controlada. De igual manera no había esperanza, iba a morir, pero podía alargarse mi estancia en el mundo por unos cuantos años.
En cuanto supimos de la noticia de mi enfermedad, Niall buscó a un doctor especialista, que no fue muy fácil de
encontrar. Este me dió un tratamiento para poder controlarme, así que podía seguir con mi vida como si no pasara nada.
Mi rehabilitación no había terminado, y mi estancia en la clínica se alargaría un poco más. Yo ya no quería seguir con eso, de igual manera iba a morir. Niall se había enfadado cuando le dije lo que pensaba con respecto a eso.
-¿Esas son tus ganas de vivir? - me dijo mirándome con los ojos entrecerrados y cruzándose de brazos.
Yo ladeé la cabeza y lo miré, tratando de no enfadarme.
-¿Para qué perder el tiempo encerrado aquí? de todas formas cuando salga de aquí me quedaran unos... ¿cinco o seis años?
-________ - Niall se subió a la cama y comenzó a gatear hasta ponerse frente a mí, hasta quedar solo a una corta distancia - que esos cinco o seis años valgan la pena.
Sonreí de lado y él sonrió entonces acortó la distancia para poderme dar un beso en los labios.
El poder de convencimiento que tenía Niall sobre mi era enorme, así que accedí a quedarme y terminar mi rehabilitación. No me gustaba la idea de tan solo ver a Niall un día a la semana, pero era mejor que nada. Cuando ese día llegaba no cabía de felicidad, él tan solo tenerlo a mi lado, apoyándome y motivándome, me hacía sentirme mucho mejor.
Debía admitir que había días malos, en los que solo se me venía la mente mi enfermedad y en todos los cuidados que debía de tener. Niall y yo debíamos ser muy cuidadosos, incluso al darnos un beso, ya que cualquier pequeña herida en mi boca podría contagiarlo. Deseaba a Niall más de lo que imaginaba y él me había confesado que también, pero era demasiado peligroso. "Nuestra relación no se basa solo en sexo, ________, hay cosas más importantes y no me importa no tener esa intimidad contigo. Te amo y quiero estar contigo apoyándote y dándote mi amor" me había dicho cuando le dije que podía encontrarse a alguien más, que no estuviera enfermo y poder disfrutar cada momento sin preocuparse.
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The A Team ||Gay Niall Horan y tú
Roman pour AdolescentsSiempre he pensado que cuando yo muera nadie lo sabra , nadie derramaria siquiera una lagrima por mi.