Let's Pretend It's Love | h.s.

Capítulo 56.

  Harry: Hola amor...

Se escuchaba cansado, más no molesto.

Tu: Ah... ¿Cómo estás?
Harry: Bien, ¿y tú?
Tu: Bien... am... quería hablarte de algo.
Harry: Dime, ¿Qué pasa? ¿todo está bien?
Tu: Bueno no sé. Una vez dijiste que estarías envuelto en miles de rumores... y los he leído y no he creído en ninguno... y bueno, me hay uno sobre mí. Y no sé, pero siento culpabilidad, ¿sabes? –Interrumpió
Harry: Ayer te vi en televisión con ese chico, realmente yo confío en ti, y sé que estás conmigo.
Tu: -Suspiraste- uf... me alegra saber eso.
Harry: Aparte es feo. –Estaba celoso.
Tu: No lo es...
Harry: ¡Si lo es! Es como... iug... -Rio- feo.
Tu: No –reíste-
Harry: Para mí todo chico que quiera estar a solas contigo es feo. Menos yo, yo soy tu novio y ellos feos.
Tu: ¿Estarás celoso de nuevo?
Harry: ¡Sí! Si te parece guapo sí.
Tu: Ah entonces es feo...
Harry: -Rio- te quiero mucho.
Tu: Yo te quiero más... ¿Te desperté? Suenas... cansado.
Harry: Si, pero está bien. Son las ocho de la mañana de acá... supongo que en Londres es madrugada, ¿no?
Tu: Sí, y lo siento.
Harry: No, está bien. Tenía que levantarme para ir a una presentación en un programa estadounidense. ¿Qué haces tú despierta a esta hora?
Tu: No podía quedarme con el... sentimiento este... de culpa.
Harry: ¿Culpa por qué?
Tu: Por lo de este chico, yo sólo te quiero a ti, y todos ponen palabras en mi boca, y no quiero que creas todo eso...
Harry: Amor, tranquila. Si en un principio te dije que confiaba en ti, y te pregunté si tú en mí. Con eso tengo suficiente, confío en ti... créeme.
Tu: Gracias... -Suspiraste aliviada.
Harry: te dejo amor, los chicos ya se han despertado, y no quiero ser el último.
Tu: Está bien...
Harry: Descansa, y tranquila corazón. Confío en ti, y sé que tú en mí. Adiós, te quiero.
Tu: Te quiero...

*colgaron*

Te sentías más tranquila, pero no podías estarlo por completo. Él estaría confiando en ti, ¿Pero tú en él? Eras de creer casi todo lo que leías, algo que debías cambiar.
Harry llegaba pronto, y debías pensar en algo para pasar tiempo con él. El día que él llegaba tu tía y Gustav viajarían a España a una entrevista de trabajo para tu tía, que cada vez tenía más puertas abiertas en su carrera. Tendrías casa sola, y podrías invitar a Harry oh irte tú a su casa.
Estabas en el café esperando atender a alguien cuando Harry te mandó un mensaje de texto:

"Llegaré en la noche, ¿te veré? Xx"

A lo que respondiste:

"Claro, estaré en el aeropuerto esperándote."

Y respondió:

"Hay una puerta en el aeropuerto donde siempre hay seguridad. Es de los vuelos privados, de ahí saldré, si no encuentras esa puerta o no te dejan estar ahí, me esperas a fuera, ¿Sí? Oh mejor espérame en casa de Gustav, como desees. Te quiero!"

No le respondiste. Pero te pusiste a pensar qué sería mejor...
Le pediste a Lyla permiso para ir a arreglar algunos asuntos para ver a Harry, ella dijo que cubriría tu puesto sin problema, pero que ella debía ser la primera en saber cómo "estuvo". No entendiste, pero seguro era sobre la noche.
Caminaste a casa de Gustav lo más rápido posible, y esta vez no te desubicaste. Buscaste en internet alguna receta para regalarte un pastelillo. La encontraste, por suerte tu tía ya estaba con Gustav en el aeropuerto, si no, te hubiera encontrado en casa de Gustav, faltando a tu deber. Por suerte Gustav tenía todas las cosas necesarias para éste presente. Cuando terminaste, esperaste una hora exacta para poderte duchar y arreglar para Harry.

"Avísame cuando llegues, estaré en casa de Gustav. Te quiero!"

Y al minuto respondió:
"Ya estoy en el aeropuerto, Nick G. vendrá por mí, me llevará a casa. ¿Paso por ti? Xx"

Y respondiste:
"Si, por favor. Quiero mostrarte algo."

Él ya no respondió, pero seguro estaba demasiado emocionado por ver lo que le mostraría.

Cuando ya estabas lista, viste tu pastelillo, nada que ver a lo que venía en la fotografía, pero seguro sabía delicioso. No tenías tanta mano para hacer manualidades, pero seguro le entendería a la letra de crema pastelera, que tenía sus iniciales solamente.
Escuchaste la puerta, abriste y era Harry. Al verlo le abrazaste, y le regalaste algunos besos. Llevaba una camiseta blanca, y un chaleco negro. Al parecer venía de un evento importante.

Harry: Que bonita estás, ¿Quieres ir a algún lado en especial?

Notaste que tenía ojeras, y que estaba pálido. Así lucía siempre que no había dormido bien, oh que realmente estaba fatigado.

Tu: No, realmente no. ¿vamos a tu casa? ¿oh te quedas aquí?
Harry: -Sonrió- vamos a la mía.

Iban saliendo y por poco olvidabas el pastelillo.

Tu: Espera, he hecho algo para ti. –Dijiste al entrar a la cocina y sacar el pastelillo.

Cuando Harry lo vio sonrió, creíste por un momento que lloraría. Sus ojos estaban tan cristalizados que creíste que lo haría, pero seguro tuvo una mala semana. Te besó, y te agradeció por el presente. Te ayudó a subir al automóvil con el pastelillo en la mano y tomaron camino a su casa.

Tu: ¿Cómo te fue?
Harry: -Suspiró- Bien. ¿A ti cómo te ha ido en el café?
Tu: bien... -Sonreíste- Me alegra que ya estés aquí, ¿Sabes? No sé qué haré cuando te vayas por meses...
Harry: Tal vez no nos veamos en esos meses, pero sé que cuando nos veamos nos desquitamos. ¿No? –Sonrió
Tu: ¿Nos desquitaremos de esta semana?
Harry: Básicamente esta semana y la próxima, que estaré visitando con los chicos algunos programas e iremos al estudio. Pero... antes de eso tengo que pasar tiempo contigo.

Le sonreíste y siguieron platicando. Él comenzaba a notarse más tranquilo y menos fatigado, pero aun así veías que su rostro se veía lastimado con algunas imperfecciones, él ya había dicho que eran por estrés, y a lo mejor no estuvo tan bien su viaje. Cuando llegaron a casa, te ayudó a bajar el pastelillo, y te abrió las puertas de su "humilde" hogar. Refrigeró al pastelillo, mientras tomaba algo de agua. Prendiste la televisión mientras él regresaba de la cocina, y fue el momento menos oportuno