Di que me recordarás - Justin Bieber y Tu. [2nda Temporada]

Capítulo 41- Fin

Capítulo 41

Todos mis familiares nos rodeaban, mis amigos, los amigos de Justin y algunos de sus familiares. Me entristecía que su madre y su padrastro -el cual le dio el apellido de Bieber- no hicieran acto de presencia, sabía que su madre había puesto el grito en el cielo al saber que yo me iba a casar con su hijo y que encima le íbamos a dar el placer de ser abuela en breves, pero no me podía creer que fuera tan ruin como para no querer asistir a la boda de su hijo.

-¿Estás bien?- me preguntó Justin.

-Si, solo estaba pensando- dije sonriéndole- ¿Y tú?

-Todo perfecto, si estuviéramos tu y yo aquí solos sería igual de perfecto. No quiero que pienses más sobre ello, ya lo hablamos ayer, toda esta gente está aquí por ti ya que a mi solo me haces falta tu.

-Deja de ser cursi que me han hecho un maquillaje muy bueno y no va a durar ni a la noche de bodas, hoy estoy llorando demasiado- le dije dandole un codazo.

-Mientras llores de emoción, todo bien- dijo bensádome en la cabeza.

Podía admitir que el bals que bailé en brazos de mi padre fue la mejor parte de la boda, estaba disfrutando del mejor día de mi vida con los dos hombres a los que más podría amar en el mundo.

-¿Estás contenta?- me preguntó papá.

-Mucho ¿y tú?- le pregunté yo a él.

-Yo estoy contento si mi nenita está contenta- dijo él sonriendo.

Así era de simple mi padre, mientras sus mujeres estuvieran contentas, él estaría contento y amaba esa simplicidad, siempre lo hacía todo demasiado fácil.

-Le amo- dije en un susurró.

-Lo sé desde el primer día que cenamos en su casa, estuviste toda la cena asintiendo como una tonta a todo lo que decía ese estúpido adolescente- dijo riendo.

-Ni siquiera recuerdo de que hablaba, recuerdo que me pareció demasiado guapo e inalcanzable- dije sonriéndole.

-Pues ahora mismo es el marido y el padre de mi futura nieta, la cual debe estar dando saltitos de alegría.

-Ha estado algo revuelta en la ceremonia pero ahora parece tranquila.

-Anda, ves con Justin que te está esperando.

-Si, el señor gruñón dice que está durando demasiado en terminar la ceremonia- dije riendo.

-Yo dije lo mismo el día de mi boda y así naciste tú así que corre hacia él.

-Papá eso es asqueroso- dije alejándome, ni siquiera quería pensarlo.

Parecía ser que mis amigas le habían encontrado el gusto a los americanos que habían venido a la ceremonia por parte de Justin, pues muchas de ellas estaban bailando y bebiendo con ellos o con sus parejas, Brad y Biel estaban sentados en una mesa charlando y Karen había encontrado atractivo a uno de los primos de Justin, el cual estaba agarrando su cintura mientras acercaba su boca a ella. Parecía que la fiesta iba viento en popa, si todo iba bien podría irme pronto con mi marido a celebrar nuestra propia fiesta privada.

-He dejado a tu madre ocupada con tu abuela y tu padre me ha asegurado que no al dejará subir ¿puedo llevarme ya a mi mujer?- me preguntó Justin con ojos achispados.

-Puedes llevarte a tu mujer- le dije con una sonrisa.

Ahora si que definitivamente podría cerrar esta historia, pues hasta aquí llega la historia de mi vida con Justin Bieber.