Cuando volvió puso la manta utilizada para cubrir a Yuta a lavar y fue a la cocina de donde llevó dos platos de comida y una pequeña mesa desplegable hacia el baño, para poder disfrutar y celebrar el traslado con éxito de su invitado. Cosa que alegró mucho al otro muchacho.
-Uah¿Lo preparaste tu Akira?-
-Si, solía ayudar mucho a mi madre en la cocina cuando era pequeño. Me hace feliz saber que te gusta-Puso una expresión amable y pacífica en su rostro, aunque estaba algo nervioso y ruborizado debido al elogio.
Terminada la cena, retiró los platos y los lavó. Para luego volver con Yuta.-Diablos, después de tanto ajetreo he terminado todo sucio y sudado- Miró su bañera y se dio cuenta de algo.
-Un momento, si tu estas en mi bañera, entonces¡¿Cómo se supone que tomaré un baño?!-
-Tengo una idea, ¿Que tal si nos bañamos juntos? Después de todo suena agotador el tener que moverme cada vez que necesites bañarte-
-Es cierto, aunque preferiría tomarlo solo-
Parecía bastante avergonzado, pero aún así aceptó. Entonces procedió a quitarse cada una de las prendas que vestía hasta que quedó completamente desnudo.
Mientras Akira se desnudaba, Yuta lo observaba con mucha atención.
Pronto el chico entró al agua donde se encontraba su peculiar compañero.-Akira, hay algo que me da curiosidad.-
-¿Qué cosa?-
-Esto, ¿Qué es?-Dirigió su mano al miembro viril del chico y lo agarro.
Akira estaba realmente nervioso y casi como por reflejo tomó la mano del muchacho y la alejó de ese lugar--¡I-idiota!¡No debes tocar este tipo de cosas!-
Su cara parecía un tomate y su mano temblaba un poco.
-¡Eh!¡¿Por qué no?!-
-Porque no y listo, es algo muy sensible e importante para los hombres, así que ¡no debes tocarlo!- Dijo en un tono muy serio, lo cuál hizo aumentar la curiosidad del individuo.
-¿En serio es tan importante? Entonces dime, ¿para qué sirve?-
-Eh, para cosas como orinar y otras cosas-
-¿Qué otras cosas?
-N-no importa-
-Vamos, dímelo.-
-Nada serio, bueno, me tengo que ir-Y salió de la bañera lo más rápido que pudo.
-Está bien si no quieres decírmelo, de todas formas ya lo averiguaré tarde o temprano- Se recostó sobre uno de los bordes, cerró los ojos y pronto cayó en un profundo sueño.
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El otro curioso, pero hermoso extremo de mi hilo rojo
RomanceLa historia comienza con Akira Yuuma, un chico de 18 años estudiante de economía. Que como era costumbre caminaba por la costa de la playa en la noche, deleitándose con el bello espectáculo que le brindaban las olas de mar a la luz de la luna. Fue e...