4 Idiotas Y Una Mexicana

Cap 4: "un dia algo raro"

Me levante de inmediato y corrí hacia el garaje, abrí la puerta y el auto seguía ahí. Me asomé por las ventanas y ahí estaban los 2 acostados y dormidos en el auto mientras unas cobijas los cubrían.

Toqué la ventana un par de veces hasta que Ashton se despertó, me miro medio menso y después abrió los ojos de repente, se acomodó en el asiento y movió a Calum para que se despertara. Ambos se arreglaron y salieron del auto.

—lo siento, se nos olvidó—dijo tímidamente, me entrego las cobijas y las almohadas y me dio un pequeño abrazo.

—gracias por ayudarnos

Se separo se mí, me sonrió y se metió al auto. Ashton desde el auto me sonrió y me guiño un ojo. Abrí el portón y se fueron, agite mi mano al aire en despedida. Ya que se fueron Cerré el portón rápidamente antes de que mis padres se den cuenta, pero al cruzar la puerta escuche los pasos de mi madre. La puerta de garaje estaba cerca de la cocina.

Rápidamente me puse a actuar y tome una botella de maple

—aquí estas chamaca, te estuve buscando. Ya esta el desayuno, ¿que andas haciendo aquí?—dijo, le iba a responder pero me interrumpió—no, no me lo digas. Ya que estas aquí tráete esa botella por que hice jot queiks

Uff, por poco y me descubre. Salió del garaje y yo la seguí, cerré la puerta y me dirigí al comedor.
Fui a desayunar, me comí los ricos jot queiks que mi gfa me preparó.

—mija, si quieres puedes irte a cualquier lugar, yo que se al parque, ándale—me dijo mi papá. Un poco mensa me levanté y asentí, tome 50 pesos y salí. El parque mas cercas de mi casa estaba mas o menos a 3 cuadras, suerte para mi que practico un poco de deportes. Al cabo de unos minutos llego, me acerco al pequeño quiosco que se encuentra ahí y me compro una coca-cola y unos Doritos, le doy el dinero a la doña y luego voy a caminar un rato. Pero al pasar por una banca me encuentro con dos personas que se me hacen conocidas.

Ah, canijo.

ESPEREN

¿ESOS NO SON...

ASHTONIO Y EL NEGRO QUE SE CREE CHINO.

ESPEREN

me fije en lo que traían puesto, traen los gorritos que les regalé.

PERO..

¿QUIEN CARAJOS SE LE OCURRE TRAER PASAMONTAÑAS A UN PARQUE?

Ah, ya sé por qué, esque se creen que son los ayudantes del chapo, por eso. Reí en mi interior. Me regresé lentamente y me puse detrás. Quiero darles un pinche susto aver que cara ponen.

Me acerqué lentamente al oído del chinegro y le grité con todas mis fuerzas. Este se asusto tan feo que casi tira al Ashton de un manotazo. No aguanté más y me reí como pendeja con pulmonía.

–¿¡pero qué te pasa!?– se quejó poniendo una mano es su oído.

–nada

Me miró feo y frotó su oreja.

–¿estás loca o que? Pudiste dejarme sordo. Además, casi mato a Ashton por tu culpa– dijo este apuntando a Ashton el greñas que me miraba como si quisiera matarme.

—ya pues, lo siento— me disculpé

—esta bien, pero que no se vuelva a repetir...—se calló al instante al no saber mi nombre. Ah cierto, nunca se los dije.

—Camila, me llamo Camila Gonzales espinosa—dije, ambos me miraron acusadora mente y yo levante los brazos en señal de inocencia.

—y bueno, cambiando de tema. ¿Que hacen aquí en el parque?

—nah, solo queríamos pasar el rato, estar en el hotel todo el día no es divertido—me respondió el shaggy (osea ashtonio). Ahora que lo pienso, Ashton se parece tanto al güey ese del Luis Miguel cuando tenía sus años de juventud en los 80's.

—te entiendo, estar encerrada todo el día en un solo lugar sin hacer nada no es muy divertido

Los tres reímos un ratito.

Ya me aburrí.

—oigan chicos, estoy aburrida—me quejé mientras hacia movimientos raros en cámara lenta.

—¿y que quieres que hagamos?—me respondió el negro encogiéndose de hombros.

Ja, mira que grosero.

—mira klum, primero apréndete a limpiar la cola y después me rezongas

Lo miré achinando los ojos y este asintió algo temeroso.

Asi me gusta, que me tengan miedo.

—y tu, ¿también me rezongaras?—pregunté mirando a Ashton, este negó rápidamente.

Esperen.

Ya se a donde ir

—oigan chicos, ¿les gusta la adrenalina al 100?—pregunté, ambos se encogieron de hombros algo indecisos. Sonreí como el gato ese raro de la película de la niña que va a esa tierra de mierda, ¿ah como se llama? Malis en el pais de las mierdillas...oh no espera....

ALICIA EN EL PAIS DE LAS MARAVILLAS

Ese gato, no se por que pero me daba miedo.

Pero es que su sonrisa parece del mismo pinche diablo.

Oh, chamacos, lo que están por sentir.