COBRA© | H.S| [ ACTUALIZACIONES LENTAS ]

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Miraba de forma nerviosa todo lo que estaba a mi alrededor, volver después de cinco años me hacía sentir nostálgica, todo lo que miraba se veía tan diferente de lo que recordaba, limpié mis gafas en mi vestido y solté un suspiro mientras me encaminaba a la salida del aeropuerto.

Las maletas que llevaban se hacían pesadas y molestas para caminar pero no podía llamar a mi tía para que me viniese a recoger cuando tan siquiera la había avisado de mi llegada, agarre mi móvil y llame a un taxi para que me llevara hasta la casa de mi tía.

(...)

Una vez que llegue a la casa de mi tía, abrí la puerta con la llave que aún conservaba y nada mas entrar solté las maletas y me arregle el vestido que llevaba puesto, tome nuevamente las maletas y subí como pude las escaleras hasta la que alguna vez fue mi habitación. Abrí la puerta de esta y deje mis maletas en la cama, todo se encontraba tal y como yo lo había dejado cuando me fui, mientras observaba la habitación mi vista callo en una fotografía que reposaba en la mesita de dormir.

Tome la foto y una sonrisa se extendió por mi rostro, en ella se podía ver a mi mejor amigo abrazándome con fuerza, dos grandes sonrisas adornaban nuestros rostros y las ganas de llorar se apoderaron de mi, había echado tanto de menos a Harry, los años habían pasado, pero aún conservaba esos recuerdos de niñez, las mil y una travesura que hicimos.

Abrace con suma fuerza la fotografía contra mi pecho, sabía que a él le alegraría verme.

Camine hasta la ventana que se encontraba delante de mi y mire a la casa se encontraba delante, en esa casa vivía o solía vivir Harry pero ahora que la veía podía notar que la casa se encontraba vacía, un sentimiento agridulce se instalo en mi pecho y las ganas de llorar se apoderaron de mi, ¿por que él ya no vivía ahí?

Suspiré con resignación y cerré las cortinas, miré la hora en mi reloj y ya eran las nueve de la noche y aún no me podía creer que hubiera regresado, después de que mi tía me mandara a estudiar lejos de aquí solo para olvidar los problemas que alguna vez me atormentaron.

Me desvestí de forma rápida y me puse mi pijama, me recosté en la cama y miles de recuerdos llegaron a mi me memoria. Harry y yo tumbados en el suelo de esta misma habitación, sudados y con sonrisas pícaras. Éramos tan solo unos niños, que crecieron juntos. Hasta que yo tuve que irme a estudiar lejos.

Cerré mis ojos dejándome llevar por esos bonitos recuerdos y con un sentimiento de emoción. ¿Cuál sería la reacción de mi mejor amigo de la infancia al verme después de unos años?

Con ese pensamiento me fui dejando llevar por el sueño que me iba consumiendo poco a poco.

(...)

Unos golpes constantes en la puerta me hicieron abrir los ojos y despertarme de forma rápida, camine hasta esta y aún media dormida la abrí, mi tía al verme me abrazo tan fuerte que por un momento me quito el oxigeno. No me dio mucho tiempo de reaccionar.

— Te eche tanto de menos Emily... — susurro mi tía con la voz entrecortada, yo solo aún aturdida le devolví el abrazo. — Jamás tuve que mandarte tan lejos pequeña—. Hablo; mirándome con ojos llorosos, mi corazón se estrujo por su confesión, yo también odie con toda mi alma que me mandara tan lejos pero después de un tiempo pude aceptarlo y comprenderlo.

— Yo también te he extrañado tía.– hable con toda la sinceridad que tenía, mi tía me miro asombrada y me abrazo mas fuerte.

Después de explicarles mis motivos a ella por los cuales no le avise de mi llegada ella al fin me dejo sola en la habitación para que me vistiera.

Media hora mas tarde ya me había puesto uno de los tantos vestidos que tenía, me mire por ultima vez en el espejo y di mi visto bueno, después de todo en Alemania me había acostumbrado a ponerme vestidos largos y abrigos de lana o punto, de forma rápida me hice una trenza de lado y salí de mi habitación.

Una vez que entre en la cocina me encontré con mi tía sirviendo el desayuno, me senté en la mesa y me dedique a tomar el desayuno en silencio y cuando termine me despedí de mi tía con un beso en la mejilla y salí de casa.

Caminaba de forma rápida hasta el instituto quería llegar lo antes posible. Antes de que se llenara de mas alumnos.

De repente un coche paso por mi lado y los que estaban dentro de el se burlaron de mi atuendo y lo único que pude hacer yo era fruncir el ceño, ¿Que había de malo en mi vestido?

Sin darle mucha importancia al asunto seguí mi camino, cuando mi vista capto el instituto sonreí ya faltaba tan poco para ver a Harry que no podía estar mas nerviosa.

Cuando entre al instituto miles de miradas negativas se posaron en mi, un grupo de chicos que estaban al fondo del pasillo con un grupo de chicas posaron su mirada en mí y  mi vista se capto en uno en particular, era él.

Con pasos apresurados camine hasta Harry el cual tan siquiera sonreía algo que me extraño, por un momento pensé que se alegraría de verme. Cuando iba a seguir caminado alguien me puso el pie haciéndome caer de rodillas contra el suelo, las risas no tardaron en hacerse presente algo que me hizo apretar los puños a mi lado. Pude sentir como el rubor teñía mis mejillas.

Alce la vista para ver a Harry pero no lo vi por ningún lado.

Solté un suspiro me levante del suelo, sacudí la parte de mis rodillas y me acomodé un poco mi vestimenta. No entendía muy bien lo que había pasado en cuestión de minutos, todas esas personas mirándome con superioridad, burla. No lograba comprender nada.

Retome mi camino a la primera clase que me tocaba, ahora los nervios me estaban carcomiendo por dentro. Después de todo lo que había pasado algo me decía que este no iba a ser un buen día para mí.

(...)

Y como lo había previsto.

Mi primer día en este instituto resulto ser un completo infierno, burlas, bromas y miles de rumores que me tenían totalmente desconcertada, rumores sobre Harry algo que no podía ser verdad, simplemente él no podía haber cambiado tanto.

Había gente diciendo miles de cosas.

Que le gustaba acostarse con cualquier chica que se lo pusiera fácil.

Que solía drogarse y beber cada fin de semana.

Que su debilidad eran las mujeres morenas y con grandes curvas.

Que se juntaba con gente bastante sospechosa.

Y los rumores que más predominaban por todos lados es que él había asesinado a un chico. Este último, era algo que todo el mundo sabía por lo visto en este instituto y jamás Harry había salido a desmentir dicho rumor.

A mi mente solo llegaban a nosotros dos juntos, corriendo bajo la lluvia.

Merendando en mi casa o aveces en la suya.

Las noches que él se venía a dormir a mi casa.

Cuando nos amanecíamos jugando videojuegos. Todos esos recuerdos eran los que yo aún conservaba, se me hacía imposible asimilar que él hubiese cambiado tanto en apenas unos años.

Tenía que encontrarlo y hablarlo con él directamente. No podía creer que mi mejor amigo se haya convertido en esa clase de persona. Al que todos temían en este instituto.

Al cual le habían apodado Harry la Cobra Styles.

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EDICIÓN DE CAPÍTULO EN SU MAYORÍA.

—Scarlett.