Capítulo 12

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Harry's POV

-Harry -dice asustada.

En el instante mi curiosidad despierta y enseguida me dirijo hacia Jul.

-¿Qué ocurre?

-¿Te bañaste ayer? -Me ve más que preocupada.

-Sí ¿Por qué? -Dirijo mi vista al baño para buscar algo raro pero todo está perfecto.

-No hay vapor, parece que nadie ha usado este baño.

Tiene razón.

Entro al baño y comienzo a ver cada rincón de él.

-Es imposible, no hay ninguna ventana, nada.

-¿Es posible esto?

-Pues no son magos -volteo a verla- deben de tener una clase de ventilación casi invisible.

-¿Y si no hay en el cuarto?

-¿De qué hablas? -Cada vez me confunden más sus preguntas.

-Puede que no haya en el cuarto, nos podríamos acabar el aire y morir en unos días -dice recargándose al marco de la pared.

-No no, tranquila -tomo su cabeza y la dirijo a mi hombro para abrazarla- si se tomaron la molestia de poner en el baño yo creo que igual en el cuarto -me separo un poco para observarla- ¿No lo crees?

-Supongo, espero.

Noto como una lágrima quiere salir de sus grandes ojos marrones pero al sentirla Jul se voltea rápidamente.

-Oye -digo con ella dándome la espalda- No tienes que ocultar nada, está bien llorar un poco.

-Voy a bañarme -abre la puerta de la regadera.

-Claro.

Salgo y voy hacia el vestidor, me cambio de ropa y... ¿Qué más puedo hacer?

Tomo la silla de madera y la coloco en una esquina, luego en otra, otra y otra buscando alguna cámara, algún micrófono, algo.
Fue en vano, no encuentro nada.

Jul sale y me encuentra arriba de la silla.

-¿Qué diablos estás haciendo? -Levanta las cejas.

-Buscando una pista -me bajo.

-Y ¿Qué tal?

-Nada.

Pongo la silla en su lugar y ambos nos sentamos en nuestras respectivas camas, intercambiando miradas pero reservando nuestros pensamientos.

Aún no confío en ella, pero es muy poco probable que Jul trabaje con ellos, es muy joven. Pero no descarto nada. Hay algo que me esconde, lo sé.

-¿Cómo matar el tiempo aquí? -Digo.

Jul sólo me observa con un rostro demasiado pensativo y supongo que ella también tiene dudas sobre mí y mi posible complicidad.

Estos próximos días se convertirán en una eternidad.

Pasan horas y Jul desde entonces está acostada en el suelo, frente a la puerta. Está escribiendo en su diario así que no le pregunto nada, supongo que ya se hartó de su cama.

Después de un rato oigo la puerta abrirse, tal vez para entregar la comida.
Seguido de eso escucho una pequeña descarga eléctrica y un grito, es un grito de Jul.

-¡Jul! ¡Jul!

Corro hacia ella y la veo tirada en el suelo, cerrando fuertemente los ojos.

-¿Qué hiciste Jul? -ella dirige sus ojos hacia mí- ¿Jul? -cierra poco a poco sus ojos- Jul no cierres tus ojos, por favor no lo hagas ¡Juliette! Por favor.

La tomo con ambos brazos y la levanto, la dejo en su cama.

-Jul aguanta, no te duermas. No lo hagas.

Me levanto y voy hacia el baño para tomar una toalla y mojarla.
Regreso con Jul y coloco la toalla en su frente, pero ella ya está inconsciente.

Después de unos minutos Jul logra abrir los ojos y me acerco más a ella, yo estoy sentado en el suelo.

-Jul, ¿Estas bien?

-Eso creo -dice incómoda.

-Me preocupaste demasiado ¿Qué fue lo que hiciste? -me siento junto a ella.

-Esperé a que abrieran la puerta -esto no suena bien- jalé las manos de un hombre y otro me electrocutó -dice riendo débilmente.

-No puedo creer que lo hayas hecho -río igual.

-Tenía que intentarlo, no creas que me voy a quedar con las manos cruzadas esperando a que esa puerta se abra y nos dejen salir.

Después de pensar un poco hablo.

-Escucha, vamos a hacer un trato ¿De acuerdo? -Acaricio su mejilla con sólo un dedo y ella asiente lentamente- cada vez que se te ocurra algo para salir de aquí o que se me ocurra a mí, lo hablaremos y nos apoyaremos en lo que se nos ocurra ¿Trato?

-Trato.

Levanta un poco su mano y yo extiendo la mía para estrecharlas.

Tal vez pueda confiar un poco más en ella. Después de lo que hizo tal vez si está de mi lado.

Guardamos un poco de silencio mientras intercambiamos sonrisas y de pronto escuchamos la voz que tal vez más odiamos en el mundo.

-Buenas tardes a ambos.

Encerrados | Harry StylesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora