Era una noche fría y nevada donde el silencio reinaba y los únicos sonidos que se escuchaban eran el bailar de las hojas de los árboles que indicaban la entreda al bosque donde nadie se atrevía a cruzar a excepción de tres niños curiosos de no mas de doce años,los mayores les habían prohibido ir mas allá del bosque por que todo aquel que lo cruzaba no volvía jamas.
Ellos ignorando las advertencias de sus superiores decidieron investigar acordando que lo arian al anochecer cuando sus padres se encontrarán dormidos,ahora caminaban a pasó lento por la nieve del interior del bosque temerosos de lo que les pueda ocurrir además de que el viento ayudaba a dar una atmósfera mas terrorífica ya que hacia sonidos raros al chocar con troncos huecos y rotos.Lograron salir sanos y salvos suspirando de alivió mientras relajaban su respiración la cual se estaba acelerada por la tensión,uno de los infantes volteó encontrando un gran castillo oscuro frente a sus ojos,lo miraron asombrados pero antes que pudieran dar un paso mas la única niña del grupo tomó la manga del chico que tenía mas cerca deteniendo el pasó de esté y por ende el de otro también al tiempo que la miraban esperando una respuesta que justifique su acción.
— Por favor...no sigamos ese lugar da m-miedo... — . Balbuceo con un temblor en la voz.
— Pero si no lo hacemos jamas descubriremos que es lo que hace desaparecer a la gente.
— Cierto,ya estamos aquí debemos continuar...no tengas miedo te protegeremos —. Le aseguró.
Ella los miró un poco mas tranquila sonriendoles para que ellos no se preocuparan y así poder seguir caminando en dirección del gran castillo de aspecto sombrío,pero ellos no contaron con que un par de orbes bicolor estuviera vigilando sus pasos desde una de las ventanas que daban a la entrada del lugar.
Uno de los niños apoyo la palma de su mano en el pomo de la gran puerta delante de ellos y esta se abrió lentamente tomando desprevenidos a los menores los cuales gritaron para después taparse la boca ahogando parte de estos,se adentraron al interior del extenso salón el cual culminaba con dos tronos exactamente iguales,uno de los chicos se acercó a intentar tocarlo pero una voz lo detuvo en secó inrumpiendo el silencio del lugar."¿No les enseñaron a no tocar lo ajeno?"
Sobresaltados miraron al origen de la voz encontrando a una chica de dieciséis años aproximadamente con una belleza excepcional y única,cabello castaño largo y liso con un flequillo que ocultaba su ojo izquierdo y una silueta que bien podría pertenecerle a un demonio.
La muchacha se acercó con un andar elegante a sus contrarios y estos retrocedieron con temor lo que ocasionó una sonrisa divertida en la mayor.— Ustedes niños,no deberian estar aqui...¿acaso no escucharon las advertencias de sus padres? —. Preguntó con una sonrisa inquietante.
— Emm...yo...es decir,nosotros...
Dijo uno de los varones completamente lleno de miedo y al ver la sonrisa un escalofrío recorrió su espalda para después salir corriendo en dirección a la puerta pero esta se cerró antes,la castaña tomó desprevenido a uno de los chicos alzandolo mientras una sonrisa sádica se formaba en sus labios a la vez que el ojo que estaba ocultó se tornaba rojo sangre junto con un par de colmillos finos y filosos.
— Pobrecitos entraron a la boca del lobo~ ¡hahaha! —. Río de descontroladamente.
Los infantes estaban petrificados del miedo y mas aun el que tenía la castaña,ella sin perder el tiempo atravesó su mano por el pecho del chico arrancandole el corazón y tirando el cuerpo sin vida al suelo,siguió el otro chico el cual murió decapitado por sus garras.
Quedó solamente la niña traumatizada de ver morir frente a sus ojos a sus amigos,la mayor vio en sus ojos el temor escrito decidiendo que la dejaría libre,se alejó de ella sentándose en uno de los tronos sonriendo de lado.— Tu te puedes ir,pero vivirás cargando con la muerte de tus amigos.
No dijo palabra alguna solamente salió corriendo lejos del castillo y perdiéndose entre la oscuridad del bosque,mientras una risa psicópata se escuchaba atrás de ella.
— Eso les enseñará a no meterse en mi territorio,el territorio de la princesa vampiro ¡Kuran Ayaka! —. Exclamó.
Con esas palabras se levantó dirigiéndose al interior del castillo,desapareciendo en la silenciosa oscuridad del lugar.
Continuará...
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Unfortunately Princess
Vampire"Las personas que te lleguen a amar y aceptar tal y como eres,morirán a causa tuya" Esas fueron las palabras que desde antes de nacer marcaron el destino de una princesa y también el final de sus seres mas amados.