NE ZHA: TERCER PRÍNCIPE DEL LOTO

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Nacido con inocencia y obligado a luchar, destinado a ser un héroe, el joven dios, Ne Zha, defiende a aquellos que no pueden defenderse a sí mismos, especialmente en contra de los dioses tiranos.

Por tres años y medio, la madre de Ne Zha lo llevó en su vientre. Durante este tiempo, los dioses dragones, liderados por Ao Kuang, aterrorizaron a las personas, enviaron inundaciones y las tormentas, y no exigían sólo la comida, también sacrificios de niños para deleitarse.

 En este mundo nació Ne Zha, un muchacho que creció lleno de risa en sus ojos, entrenado por el sabio inmortal Taiyi Zhenren, quien le dio el poderoso Anillo del universo y un lazo mágico.

Juvenil y desenfadado, Ne Zha también era testarudo, a menudo discutiendo con su padre lo que era correcto e incorrecto. Pero la juventud no dura para siempre, y la vida de Ne Zha cambió tras la defensa de dos amigos contra un capitán del ejército de Ao Kuang. 

Insultado, el Dios Dragón ordenó a su tercer hijo, Ao Bing, derrotar al chico, pero al final, Ne Zha mató a su oponente. Furioso por la pena, Ao Kuang exigió el padre de Ne Zha hacer reparaciones por el delito cometido por su hijo, o enviaría a las inundaciones y tormentas para devastar la tierra.

 Ne Zha, humildemente, se sacrificó para apaciguar al dios dragón, pero el maligno Ao Kuang envió tormentas de todos modos. Taiyi Zhenren trabajó en su sabiduría, y de los pétalos de una planta de Loto, Ne Zha renació. El sabio inmortal le dio nuevas armas, una lanza con punta de fuego así como ruedas de viento y fuego, armas con que desafió al Dios Dragón y lo derroto de una vez por todas.

En defensa de los oprimidos Nezha hará a un lado su juventud y estará siempre en contra de la marea, pues ya ni siquiera la muerte puede detenerlo.


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