Dejó de escribir, dándole al botón con forma de disquete por precaución, una manía que había adoptado tras malas experiencias que no quería que volvieran a pasar. A veces lo hacía de manera inconsciente, cuando aún todavía no había terminado de escribir lo que acudía a tropel a su mente, pero le daba a guardar de todos modos. Otras veces, como en ese momento, sabía a la perfección qué estaba haciendo.
Se frotó las sienes con cansancio, tratando de recuperar de su mente aquella idea tan buena que se había desvanecido en el aire con el timbrazo de su iPhone, al cual estaba ignorando a pesar de que no dejaba de sonar. Entrecerró los ojos, mirando el cursor parpadear con un ritmo inalterable, forzando a su cerebro, paseando los dedos por encima de las teclas, sin tocarlas.
Pero el insistente ruido de su móvil no le dejaba concentrarse. Dejó escapar un gruñido de enfado y volvió a darle a guardar aunque no había escrito nada. Cerró de un golpe la tapa de su portátil, refunfuñando en voz baja.
- ¿Se puede saber quién es tan pesado? - preguntó, hablando con el aire enrarecido de su despacho.
Sabía que no era la detective Beckett ya que habían hablado el día anterior y Castle le había avisado de que no iría a ayudarla porque tenía que entregar varios capítulos en una semana a Gina. Se congeló, con la mano encima del iPhone, ¿sería su editora? Realmente no tenía ganas de escuchar una reprimenda...
Desbloqueó la pantalla con el pulgar, pulsando el botón verde con rapidez.
- Richard Castle al habla - contestó mientras daba vueltas en su silla.
- ¡Por fin! - Exclamó un hombre al otro lado con alivio - Comenzaba a preocuparme.
- Ah, hola, Alex. Perdona es que estaba escribiendo.
- Entonces te disculpo, sé lo que es eso - su "discípulo" se río al otro lado de la línea.
- ¿Necesitas algo? ¿Una recomendación? ¿Una crítica? - Inquirió Castle, mirándose las uñas con súbito interés. Seguía algo resentido con él...
- No, la verdad solo quería ver si estabas libre esta noche. Pensé que podríamos ir a cenar y así podría pedirte perdón como Dios manda.
- ¿Hoy? ¿Pedirme perdón?
- Aja.
- Verás, Alex, tengo que entregarle a Gina varios capítulos y sabes lo pesados que pueden ser los editores...
- Venga, Castle. Solo cenar, unas horas tampoco te van a trastornar tanto.
El escritor sacudió la cabeza, parando la silla bruscamente y mirando por la ventana. Dejó escapar un suspiro de rendición y se pasó una mano por el pelo, alborotándolo.
- Está bien, tú ganas.
- ¡Genial! - exclamó el joven con alegría.
- Dime dónde y quedamos allí.
- Realmente sería más fácil si te llevara yo, el sitio acaba de abrir y no es muy conocido.
- Mmmm... ¿A las ocho pues?
- Perfecto.
Castle colgó el iPhone con la sombra de una sonrisa en los labios. En el fondo, Alex Conrad era un buen tipo.
------------------------- Beckett - contestó la detective sin apartar la mirada del informe que estaba rellenando, frunciendo el ceño mientras apuntaba unos datos.
- ¡Becks! - Gritó su amiga del instituto.
- ¡Maddie! - No pudo evitarlo, una ancha sonrisa se extendió por la cara de Kate, como siempre.
- ¿Qué tal te va todo? Dios, hace tanto tiempo que no nos vemos...
ESTÁS LEYENDO
Dans le noir?
FanfictionAlex Conrad contacta con Castle para invitarle a cenar. Maddie llama a su vieja amiga Beckett para sacarla de la comisaria un rato. Ambos, por casualidades de la vida, van a un restaurante con unas características únicas. ¿Qué ocurrirá? (Situado en...