Cortos

vida

Sólo una vez, sólo una vez en mi vida quería hacer algo bueno, lograr que todos se sintieran felices por mi y por lo que había logrado, pero como siempre sólo empeoré la visión que tenían de mi.
A mis 18 años había cometido tantos problemas como un rebelde de 30, según la señorita Wilson la psicóloga escolar eran debido a que quería llamar la atención de mis padres y amigos, pero no era así.
Cuando me arranque de casa por dos semanas sin nada de dinero, cuando decidí saltar en un paracaídas, cuando tome el auto de mis padres y lo estrelle en un árbol y rompí mi brazo, cuando me colé en un recital y me llevaron a la cárcel, entre otras cosas fueron con un sólo propósito, saber que seguía con vida, no es que sintiera que estaba muerta, pero prácticamente todos pasaban de mi, yo no existía, pero yo sabía que estaba ahí, aveces lo olvidaba y tenía que hacer cosas para recordarlo.
Mis padres nunca fueron padres, ni se preocupaban de mi, hasta que un dia casi pierden su trabajo porque su hija había entrado en el edificio donde trabajan, de noche mientras estaba cerrado, allanamiento dijeron los guardias, no es mi culpa que desde el piso final puedas ver toda la ciudad y observar lo maravillosa que es, pero bueno, eso a mis padres no les gusto para nada y fue cuando decidieron "prestarme atencion".
Intente cambiar, alguien ya se estaba preocupando de mi, haré todo lo posible y hare que estén orgullosos de mi.
Pero volví a cagarla.