Books

1.2K 119 26
                                    

¿Y cuál es tu tipo de chica ideal, Mingyu?— juro y perjuro que estoy cansado de esa pregunta. Todas las tardes que estoy con ellos son iguales, insisten una y otra vez en conocer cuál se supone que es mi chica ideal e incluso, a veces, se meten conmigo e insinúan que seguramente sea la fan de Jeonghan con la que tuve un pequeño desliz que fue fruto de la emoción del momento más que otra cosa; quiero decir, era el tramo final de aquella especie de programa/proyecto sobre nosotros, es de esperar que estuviera eufórico y no pensara muy bien en lo que hacía.

Además, a mí no me gustan las chicas, o, mejor dicho, no les veo ningún atractivo especial. Y, no, no es que las odie, de hecho, me encanta estar rodeado de ellas a veces; pero no las veo como una especie de atractivo o algo a alcanzar con tal de saciar los deseos que tienen los críos pubertos estos, las veo más como confidentes, como posibles amigas, como personas en sí. Quizás sea por la influencia de mi hermana, lo mucho que he querido protegerla siempre y lo muy asqueado que sé que se puede sentir uno cuando un individuo "interesado" se le acerca babeando.

Ya os he dicho que no tengo chica ideal... Soy más de lo que surja en el momento— intento explicar de alguna manera, mirando a Seungcheol, el que había hecho la pregunta, con algo de desapruebo. Mira que le aprecio, de hecho, es uno de los miembros con los que mejor me llevo aparte de Wonwoo, pero me enerva cuando hace estas cosas, sobretodo porque sabe que me pican y luego viene riéndose y diciendo cosas como "¿Te acuerdas de cuando pusiste esa cara de pedo porque inserte vacilada aquí?". Menos mal que soy optimista y me anima el simple hecho de que moleste más a Jeonghan que a mí. Te fastidias, JeongQuinn, eso es por querer quitarme el puesto de visual.

¿A lo fan de Jeonghan?— ya está, ya lo ha vuelto a decir. Te odio, sucia ardilla inmunda. —No. Eso fue un pequeño desliz. Y. Ya. Está— carraspeo, conteniendo las ganas de soltarle un guantazo al ahora pelinegro. Si tengo que ser sincero, incluso me dolió el coquetear un poco con ella, me hizo sentir poco profesional, algo sucio. 

Echo una mirada a los otros miembros del grupo que, a pesar de estar en la misma habitación, ni escuchaban la conversación ni se molestaban en defenderme. Como es habitual, y no sé exactamente por qué, quizás por alguna clase de conexión mágica y absurda que se da entre nosotros dos, como dicen siempre en todas las películas empalagosas que me obligan a veces a ver, Wonwoo y yo cruzamos miradas. Y encima es como si mi corazón se parara. Algo en esos ojos afilados me mata, me devuelve la vida con su brillo tan atractivo, y me vuelve a matar. Me quedo mirándole, y él se queda mirándome a mí; parece que batallemos por ver quién aparta la vista primero.

Lo hace Wonwoo, y lo hace con una de las sonrisas más atractivas que se ha marcado en toda su vida. Juro que, por un momento, me hizo sentir como una fangirl. Tengo suerte de ser parte de esa fingida Meanie Couple que montamos hace un tiempo y que enloquece a todo seguidor habido y por haber. Aunque a veces me trago esa pareja, y luego me da miedo creérmela demasiado. Tampoco considero que me guste Wonwoo del todo, pero siento una especie de acercamiento especial a él. Quizás ese tipo sea la razón de que no tenga chica ideal. Quizás él sea...

No, ¿qué mierda estoy diciendo?.

El caso, al final Coups y yo nos cansamos de discutir sobre lo mismo y él se va a fastidiar a Jeonghan y yo a mi habitación escaleras arriba. Allí guardo todos los libros que me encuentro por la casa, ya que a ninguno parece interesarle eso de leérselos excepto a mí. Tengo de todo, y, cuando digo de todo, es de todo. Clásicos, los más nuevos, juveniles, adultos, demasiado adultos, pornografía en libro. Me gusta sentarme en el alféizar y leérmelos, al menos los que me parece que tienen algo de calidad. Es como mi afición secreta; nadie sabe de esto, ni siquiera lo digo en los programas. Desaparezco de repente del salón, entro a mi pequeño espacio, apoyo la espalda en los barrotes que impiden que me caiga edificio abajo con un libro bajo el brazo y me pongo a leer; eso hasta que llega Wonwoo, que bien viene a fastidiar o a dormir o coger algo que necesita en ese tan oportuno momento, ya que compartimos habitación, y entonces lanzo el libro y me hago el idiota.

Books - Minwoo [Meanie]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora