No me olvides, yo jamás te olvidaré

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En las afueras de la ciudad se alza imponente una casa de un gran tamaño y de aspecto antiguo, con la pintura un poco deteriorada aún conserva su grandeza, con su amplio jardín lleno de pequeños niños jugando y riendo entre las flores y césped.
Esta casa era el hogar de muchos niños que debido a diversas circunstancias habían quedado solos, era un orfanato o como lo llamaban ahora, centro de adopción
Dos niños se encontraban a la sombra de un árbol en el jardín.

-¿Will? ¿Pasó algo hoy porque te llamaron a la oficina de Gabrielle? Dijo Nico
- Necesito contarte algo. ¿Recuerdas a los señores que vinieron a verme ayer?
-Sí, los recuerdo
- Ellos vinieron a hablar conmigo porque quieren que me vaya con ellos. Ellos...
- ¿Quieren adoptarte?-lo interrumpió Nico ahora con un poco de tristeza
- Si Nico. Yo no quiero...
-Tú ¿no quieres que te adopten?, Will no me mientas tu y yo sabemos que siempre soñaste con poder ser parte de una familia
-Si Nico pero yo quería que nos fuéramos juntos no quería algo que nos separara. -Dijo Will, si bien él quería tener una familia el no soportaba la idea de dejar ir a su mejor amigo. Pero se enteró de algo esa mañana...

Gabrielle, la señora encargada de cuidarlos, lo llamo a su oficina.

-Will necesito hablar contigo es muy importante es acerca de Nico. Ven a mi oficina.

No era la primera vez, hace unos meses había conocido la oficina, el mismo día que conoció a Nico.

Él estaba como siempre en el jardín en su árbol favorito, disfrutando del sol, y de pronto vio a varios de los chicos corriendo hacia la casa, entonces, el decidió ir a ver qué pasaba. Entró y se encontró con una pelea, cuatro chicos acorralaron a un muchacho de cabello negro y ojos cafés, él no sabía quién era, nunca antes lo había visto, pero eso no impidió que saliera en su defensa.
Al final ambos terminaron con un castigo pero Nico tenía una sonrisa en sus labios

Luego de ese incidente Nico se mostraba bastante reacio a aceptar a Will como parte de su vida pero poco a poco él se fue ganando su cariño.
Y aquí estaba Will otra vez, en la oficina y no sabía que estaba pasando.

-Toma asiento por favor, Will- le dijo Gabrielle- necesito decirte algo muy importante, he notado que eres muy amigo de Nico, él era bastante cerrado antes de conocerte, ahora parece que se está llevando bien con todos, no tenía antes a ninguna familia interesada en adoptarlo, debido a ese carácter que tiene.

Al ver que Will no prestaba atención a lo que le decía, porque mantenía la vista fija en el horizonte, ella llamo su atención y continuó.

-A lo que quiero llegar es que ayer vino una pareja y se entrevistaron conmigo, y están interesados en adoptar a Nico
-¿Entonces Nico se irá?
-Cuando él hablo con ellos, les dijo que no lo adopten que quería quedarse contigo, ellos le explicaron que no pueden adoptarlos a los dos, y él les dijo que prefería quedarse contigo, Will, Nico no es un niño que cualquier familia querría adoptar por eso quiero pedirte algo.
-¿Que es señora? Si usted piensa que yo le dije a Nico que se quede...
-No es eso Will es solo que quiero que le digas que también te iras y que acepte la adopción.

Will no supo cómo reaccionar se quedó en shock ¿Cómo decirle a tu mejor amigo que te deje?
No sabía qué hacer.

-Will sé que lo que te pido es que lo dejes ir, pero esto es por el piénsalo tú tienes más oportunidades que el de ser adoptado, eres sociable y amable más que cualquier otro niño que tengamos pero él no, solo piensa en eso, yo sé qué harás lo mejor. Puedes retirarte.

Y ahí estaba a punto de decirle que se vaya.

-Nico tú también deberías aceptar la oferta que te hicieron, digo, así nos iríamos los dos, nadie se quedara atrás, ¿Qué dices?
-Si tú te irás yo me quedare aquí solo, entonces yo también me iré - dijo un Nico muy triste, no quería separarse de Will pero no podía culparlo, el seguro quería tener una familia de nuevo.
-Ni pienses que podrás deshacerte de mí, eres mi mejor amigo- dijo Will intentando mostrar una sonrisa, no quería perderlo, pero se convenció a si mismo que era lo mejor para Nico.
-Bien iré a decírselo a Gabrielle, nos vemos luego- y así Nico se alejó corriendo hacia la casa, no noto las lágrimas que se formaban en el rostro de su amigo

Al siguiente día se encontraban ambos en el árbol de siempre disfrutando de la compañía del otro, cuando de pronto Nico sacó algo del bolsillo.

-Will, tú eres mi mejor amigo a pesar de que nos separemos lo seguirás siendo
-Siempre será así Nico somos amigos y siempre lo seremos
-Yo, yo quería regalarte algo, Will toma- le dijo Nico extendiéndole una caja pequeñita y de color azul oscuro.

Will la abrió con mucho cuidado y saco un collar con una cuenta pequeña, con una foto de ambos

-¿Te gusta?- pregunto Nico un tanto inseguro.
-Claro que me gusta Nico, gracias, también había pensado en conseguir algo para que no me olvides -le dijo y saco un brazalete de color negro y se lo puso.
-Ya esta

Nico miro detenidamente la manilla y tenía un pequeño sol en ella,

-¿Y porque escogiste un sol?
-Porque tú eres mi sol, Nico, no lo olvides.
-Will, ya no quiero irme- dijo Nico entre lagrimas
-Debes hacerlo, es lo mejor, podrás tener una familia, además no es como si nunca nos volviéramos a ver.

Y entonces llegó la hora de despedida, en la puerta principal de la casa, esperaban 2 personas un hombre de cabello castaño con aspecto despreocupado, y una mujer pequeña en estatura con el cabello negro con ondas y con una sonrisa amable, eran Marie y Andrew frente a un auto pequeño de color rojo, los dos amigos se miraron y se despidieron

-Adiós Nico nunca olvides lo mucho que te quiero- dijo Will entre lagrimas
-Tu tampoco me olvides yo jamas te olvidaré recuerda que siempre estaré para ti.
-Gracias tu eres lo mejor que me ha pasado

Y se dieron un último abrazo llorando Nico subió al auto y bajo la ventanilla para decirle un último adiós a Will. Su nueva familia los observaba Marie con algunas lágrimas que escapaban de sus ojos.

-Adiós Will te quiero mucho
-Adiós Nico
-Nico cariño puedes escribirle a tu amigo así no perderán contacto en ningún momento dijo Marie
-¿Enserio?
- Claro, Will porque no nos das la dirección de tu nueva casa y así Nico te puede enviar las cartas allá
-Ah, si- dijo Will un poco nervioso, ¿Que podía decir ahora? no sabía dónde iba a ir lo más probable es que se quedaría un tiempo más en la casa hogar.
-Está bien Will si no quieres, no te preocupes- dijo Nico al ver la expresión preocupada de su amigo
-¡No!, no es eso, solo que no se la dirección aun
-Ah, no te preocupes Will, Nico te las mandara aquí hasta que le mandes una nueva dirección, ¿Está bien?
-Claro señora, muchas gracias.
-Adiós Will
-Adiós

Nico dejo así a su amigo, Will saludaba desde la entrada de la casa, llorando desconsoladamente, cuando vio en auto alejarse, y cuando lo perdió de vista cayó al pasto de rodillas, ya lo había perdido todo.

REMEMBER ME WHEN THE DARKNESS COMESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora