Era otro día, uno de esos en los que Phil solo se sentaba en su cama con su MacBook en los regazos, editaba algún vídeo y se encargaba del canal.
Dan estaba en la cocina, o eso pensaba Phil. Pero realmente no quería pararse o incluso hacer cualquier otra cosa que lo distrajera hasta el momento.
Estaba dando los toques finales al video cuando se oyó como la puerta se habría y una segunda voz se escuchaba.
Trató de distraerse y pensar en otra cosa, de seguro era el vecino o alguien con un paquete, pero tras las finas paredes era bastante fácil
escuchar cualquier cosa.Se quitó los cascos y trató de ponerle atención a las voces que provenían de la sala, una era Dan y la otra era una voz femenina que podía jurar nunca haber escuchado.
Se levantó de su cama para ir a ver, al menos saludar y no quedarse con la duda.
El ojiazul se asomó a la sala y ahí se encontraba una chica de estatura media y cabello rojizo de nariz aplastada. Le dio una mirada algo extraña seguido de que Dan notara su presencia.
— Phil, ella es Brittany.— dijo Dan dé repente haciendo que la chica hiciera un gesto en forma de saludo seguido del de Phil.
Se retiró en cuanto pudo y no quizo pensar en nada más. Se puso sus cascos evitando el ruido de la sala. Se sentía incómodo, raro, nunca había tenido que lidiar como algo como eso y no era que alguna vez quisiera.
Horas después Brittany parecía haberse ido, así que aprovecho para ver cómo se encontraba Dan y de paso obtener unas explicaciones.
Dan estaba allí mirando la televisión rara vez sin él y no hizo caso a la presencia de su amigo cuando este se aproximó.
— ¿De dónde rayos salió esa Brittany?— preguntó Phil parado frente a él.
Dan, sin quitar los ojos de la pantalla, sumido en una mente destrozada respondió:
— No lo sé, es asunto mío. Ya te darás cuenta si es me da la gana. — se encogió de hombros descarado.
Phil sintió como su ira crecía ¿Qué diablos le había pasado para que de pronto se comportara como todo una perra?
Se retiró de la sala directo a su cuarto con el corazón lleno de presión y preguntas. Tal vez Shanna lo había ilusionado mucho con la idea de reconstruir algo con Dan que eso lo afectaba aún más o simplemente ya sabía lo que era pasar por esto. Decidió quitar eso de su mente y pensar que nada había pasado.
Las conversaciones eran incómodas, cortas y cada vez parecían estar más distantes.
Phil estaba herido, pero no lo tenía en cuenta.
Parecía como una bomba ya encendida, que cada vez estaba más y más cerca de estallar. Una representación perfecta para el corazón de Phil, tal vez por eso le huía tanto el compromiso.
Uno de los días en que Dan trajo la chica de nuevo a casa para mirar una película, Phil salió de casa a encontrarse con Shanna que al parecer entendería y le ayudaría a liberar todo lo que sentía por unas horas.
Salió de su habitación y pasó por donde se encontraban Dan y la tal Brittany.
Alzó su cabeza y pasó sin siquiera saludar a la chica, saliendo por la puerta.
Sentía un tipo de calor en su rostro, algo que le oprimía suavemente la nariz y que lo hacía sentir su garganta. Creía que era el frío, pero no podía mentirse de esa manera.
Decidió caminar en vez de tomar un taxi, el tiempo era lo menos que le importaba.
Trató de sonreír, nada tenía por qué quitarle una sonrisa de su rostro, tal vez lo incomodaba pero él no era la perra de nadie.
Se encontró con Shanna en la entrada del Starbucks como siempre, levantó su mano con una sonrisa de ángel y dio un saludo adorable.
Shanna devolvió el saludo con una sonrisa, le encantaba que Phil siguiera siendo el mismo aunque ese tipo de cosas ridículas estuvieran pasando.
La chica se acercó hacia Phil para seguir dando su caminata, el chico ya había entrado un poco en calor después de la caminata y la verdad le gusto mantenerse de ese modo.
— ¿Y cómo va eso de Dan?— preguntó refiriéndose a Brittany.
Phil volteó la mirada pensando un poco.
— Pues no lo sé la verdad es que trato de no darle importancia, Dan no aguantaría tanto con alguien en verdad.— se encogió dé hombros.
— Pero de seguro solo es una chica de esas que busca fama, ya sabes...
El chico asintió.
— Pero fue Dan quien dio el paso. — explicó.
La chica pensó un poco su respuesta.
— Pues dile a Dan que se puede comer el pito de mi tío porque no sabe lo que está haciendo. — mencionó un poco irritada.
Phil se rió un poco.
— Pero la verdad tal vez en serio quiera algo con una chica.
— No digas eso frijolín, de seguro solo está confundido.
Después de un rato más caminando se sentaron en unas bancas en el parque lleno de árboles desnudos.
Phil tenía una notificación en su iPhone, de twitter. Al parecer Dan había twitteado algo.
"De la mejor compañía"
Y un autorretrato de sus caras sonrientes.
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Don't Let Me Go | Phan
Fanfic- ¡¿Que diablo estás haciendo Phil?! - gritó el castaño tratando de calmarse mientras veía a lo que parecía antes ser su mejor amigo arrojando ropa a una maleta de viaje. - ¿Que parece que estoy haciendo?- respondió con otra pregunta lleno de amarg...