Pasaron dos semanas en las cuales la muñeca supo sus "Habilidades", aunque ahora era prácticamente un bebé, incluso ni caminar bien sabía, y bueno como negarlo, vaya que costaba en un principio, y Arthur moría por enseñarle, por tomar sus pequeñas y suaves manos y ayudarle a caminar, ayudarle a escribir... Ayudarle a amar, quizá estaba siendo muy apresurado, si, lo estaba... Pero sus padres siempre le inspiraron un sentimiento de felicidad tan inmenso, y entre pensamiento y pensamiento se dijo
"¿Qué se sentirá experimentando lo que ellos viven? , si así ya me siento feliz... No puedo aguantar para ser capaz de sentir, cada vez más y más."
Arthur como un niño, era ingenuo, soñador, alegre y tímido, cada día podía experimentar una nueva emoción, aveces le asustaban, aveces le apenaban y aveces lo derrotaban, siempre se cuestionaba, ¿Por qué la vida es tan compleja?, es decir, en la casa él era el único que se movía.... Eso le hacía sentir solo por las tardes, cuando sus padres dormían no le quedaba más que colarse por el abrigo que colgaba en la silla para asomarse por la ventana y observar el bello atardecer... Diferentes tonos rosas y naranjas mezclados tan perfectmente, dándole al aire un toque de tranquilidad único, aveces subía las escaleras, demorándose una hora en ello y se metía al lavamanos, a limpiar el polvo que aveces quedaba entre aus hombros y sombrero, pero de esa forma su pintura comenzó a salirse asi qué dejó de hacerlo y... Y....
...
Fue abruptamente sacado de sus pensamientos, cuando unas suaves, cálidas , pequeñas y muy acogedoras manos tocaron su rostro, Arthur permaneció inmóvil tras notar quien era la causante de tales sentimientos tan confusos dentro de si... Era ella, la musa perfecta de sus poesías, la chica que tanto añoró, la chica que por tanto observó, ahora estaba frente suyo, tocándole las mejillas con una adorable expresión de timidez y curiosidad, y es que dentro de ella solo estaba la pregunta:
"¿Será él como yo?"
Ya que comenzaba a sentirse sola, y escribir sus pistas de Ballet en soledad, comenzaba a deprimirla, así como cuando Arthur se fue a la caja, más Arthur se quedó inmóvil hasta que ella pareció rendirse y volver a su lugar una vez oyó a sus padres despertar para él té de la tarde.
Así, llegó la noche, dando paso a un silencio interminable y a una oscuridad tenbrosa alumbrada apenas por la luz de la luna, pudo notar que la muñeca estaba acurrucada en el abrigo de papá, así que tomando una pluma y un papel, se coló hasta la ventana directamente mirando a la bella luna y los árboles que adornaban, recordando esa bella mirada plasmada en sus ojos y esa cautivadora sonrisa que sin dudas lo hizo ver el cielo. Ahí, escribió, no una poesía... No una canción, nada más y nada menos que una carta de amor.
"Querida... Señorita bella.
Quiero escribirle esta carta porque mi cobardía me supera, sí, soy nada más que un triste caballero asumiendo su derrota ante tan bella sonrisa que usted me ha regalado... Bella damisela, aquí estoy escondiéndome tras una carta para expresarle mi más puro amor, desde que la vi llegar, no sabía que sentir... Soy uno, como tú, nuevo en esto, curioso en ello, he de admitir que en un principio pensé que papá era la peor persona por traerme a este mundo lleno de agonía y soledad, más el día de hoy me doy cuenta de mi error y no hago más que agradecerle por darme la oportunidad de conocerlea Ud. De ver sus bellos ojos cada día al despertar, de oír sus bellos pasos danzando sin cesar encima del mueble, de sentir sus bellas manos tocar mis mejillas... De enamorarme de esa bella sonrisa.
Ojalá me de la oportunidad de entrar a su vida y compartir lo que nos quede siempre juntos... Ojalá pueda leer mis letras, Ojalá algún dia usted sea mía.
-A.K"
Y tras estar unos minutos pensando, elevó el rostro y rogó a quien pudiera oírlo que se compadezca y le ayude. Arthur, dejó la carta a los pies de la chica. Ahora agradecía haber investigado un poco y saber que los muñecos con cierto pedazo de alma humana, siempre tendrían las habilidades necesarias para el día a día, menos el caminar y hablar.
A la mañana siguiente, Arthur seguía rígido en su lugar, la chica se despertó, leyó y se enamoró, se enamoró de tan bellas palabras, más no de su escritor, a pesar de saber quien era, no podía ser todo tan rápido... Había sacado la inseguridad de RoseMary, más no por eso se contuvo a despertar a Arthur con un suave beso en la mejilla y una expresión adorable siguiéndola.
Arthur, despertó y de la impresión se hizo hacia atrás cayéndose y mirando fijamente a su eterna enamorada, oh que despertar más bello....
Gracias papá...
El rubio se levantó nuevamente y puso una mano en su cabeza dando seguido una suave reverencia... Aveces, le desesperaba no hablar como sus padres así que le hizo señales para que lo esperase y corrió tras la pluma y el papel, escribiendo un delicado.
"Buen día, bella dama"
La rubia sonrió tapándose la boca con la punta de los dedos y tomó la pluma delicadamente y contestó.
"Soy Emily... El gusto es mío "
Arthur si pudiera tragar habría tragado en seco y habría contestado con apenas un poco de aliento. Pero no tenía necesidad de tragar así que solo le sonrió mucho más amplio y volvió a escribir.
"Yo Arthur, ¿gustas una taza de té?"
Preguntó a ella quien asintió curiosa, ¿A caso podían beber?, la verdad no podían, pero sus padres arreglaron el lugar de tal forma que tenían una pequeña mesa con pequeñas tazas hechas a mano, todo de madera y Arthur esperó ansioso a que su damisela se sentase y así pudieran comunicarse con miradas.
Era feliz, ahora sabía su nombre, ahora conocía mejor su mirada, quizá para algunos no era mucho, pero para él era el comienzo a algo que haría historia en su vida, a una de las cuantas historias de amor que sus padres veían en la televisión, a una de las cuantas historias de amor que sus padres vivían día a día... En definitiva no podía sentirse mejor.
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In A Little House. (UK x Nyo!Us)
RomantizmBueno, como no me fue muy bien en mi búsqueda con quien poder realizar esta historia, supongo que la seguiré por mi cuenta aunque NO ME COMPROMETO A NADA Porque mi inspiración ha ido en decadencia debido a algunos problemillas, en fin, cuando se m...