Siempre, antes de llegar al instituto me repito a mi misma "Que no te importen los demás, al cabo algún día nadie recordara que alguna vez exististe"
Como siempre llego 20 minutos temprano para no toparme con nadie en el camino.
Me dirijo primero a mi casillero para tomar los libros para mi primer clase, ya una vez con los libros en mano voy directamente a mi salón, me siento en el ultimo asiento de la última fila que esta pegada a la ventana del aula, siempre me ubico en este lugar porque se que aquí nadie me nota y eso me gusta, no quiero problemas y con eso consigo no tenerlos.Tomo mi iPod y me coloco los audífonos para distraerme de todo este ambiente, en este momento escucho Warrior de Demi Lovato. Lose lose, una canción que habla sobre "salir adelante" y blablabla y yo soy todo lo contrario a lo que dice la letra, pero es una simple canción y me gusta.
Pasa el tiempo y me voy dando cuenta que el aula se va llenando de alumnos, bueno, no me puedo librar de esto así que por ello aumento el volumen de lo que estoy escuchando.
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Las clases ya concluyeron y en este momento me encuentro denuevo en mi casillero para dejar mis pertenencias, al cerrar la puerta metálica un fuerte estruendo en esta me sorprende logrando así que salte en mi lugar.
— ¿te podrías quitar? Estas estorbando en mi juego — se escucha una voz a mis espaldas acompañada de risas, esa voz la reconozco rapido, es James Hills.
El un chico popular, presumido y todo un patán, con patán no quiero decir que sea un mujeriego, créanme que no lo es, ¿cómo lo se? Porque el tuvo una novia llamada Clohe, el la amaba, ella...termino engañandolo con otro porque dijo que James era muy empalagoso.
Eso, según los chismes de todo el instituto, hizo que James se hiciera egocéntrico y patán como ya lo había hecho antes, cayó en una depresión fuertísima, pero bueno, son chismes, la verdad no se sí son del todo ciertos. ¿Pero a mi que me interesa? Con que no se meta conmigo todo en orden.
Bajo mi mirada hacia eso que golpeó mi casillero y que por poco me golpea a mi y de nuevo la regreso para ver la cara de ese idiota.
— ¿disculpa? ¿Que no te das cuenta que por poco me pega tu estúpida pelota? — le digo enojada.
—pero no te pegó, así que si me permites lo volveré a repetir, ¿te podrías quitar?— cuando termino de decirlo los tontos de sus amigos se rieron de su comentario.
Furiosa y sin responderle me voy de el lugar porque no soporto a la gente con ese carácter.
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Doble capítulo por el regreso!🎉👏