-Hola bebé.
-Hola Park. Que casualidad encontrarte tan temprano.- Dice la chica quien va a hacer unos recados.
-Ya ves, después de lo de anoche cualquiera se volvería madrugador.
-Amaneciste muy chistosito hoy... no sabía que estos serían los efectos secundarios después de esa noche.
-No me importaría ser un payaso mientras te doy duro en la cama.
Un leve sonrojo se nota en la chica al escuchar estas palabras.
-No te hagas el pícaro tan temprano. Mejor ve a gastarte tus palabras en alguien más, o, es que no recuerdas que lo nuestro fue sólo de una noche.- Dice borde.
-Vamos Liz, sabes que no será así.- La toma por la cintura.- Tú me quieres y yo a ti también, te aseguro que no será sólo de una noche.- La mira fijamente a los ojos por unos momentos y luego se marcha.
La peliazul queda algo anonada, incluso olvidó lo que tiene que hacer por unos segundos.
"Ahg, maldito Jimin, maldito Park Jimin" Piensa la chica mientras camina a el supermercado que esta a unas calles.
Por otro lado, el chico pelinegro va hacia la casa de sus padres pensando en la chica con la que pasó una noche.
Pensando en lo que fué tenerla así, sólo para él.
Ayer fue a visitar a su "amiga" y termino en algo que no se veían venir.
Park salió de su casa con la excusa de que iría a dormir donde su mejor amigo, obviamente sin antes hacer una parada en casa de Liz. Ya que sus padres estarán fuera durante dos semanas.
El plan era mirar alguna película, escuchar música o jugar algún videojuego pero no, pasó algo totalmente distinto.
Luego de todo lo ocurrido, Park se fue.
Y hoy al salir temprano de la casa de su compañero se encontró con la peliazul. Bendita casualidad para los dos.
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Liz ya de camino a casa, decide invitar a su amiga. Le gusta estar sola, pero son dos semanas y necesita compañía de vez en cuando. Aunque quisiera estar con Park pero no, ella dijo que fue solo de una noche y así se queda. Sabe que si lo invita, terminarán en lo mismo de nuevo.
Al llegar su amiga Meku a casa, se decide por contarle lo que pasó, Pues ellas no se ocultan nada.
Meku es una chica de 17 años menor que Liz, ella tiene 18. Es algo baja de estatura, es delgada y su pelo es castaño oscuro que le llega a la cintura.
Ya en casa, en la habitación mejor dicho. Finalmente le cuenta lo que pasó con Park.
-¿Me estás jodiendo?.- Dice Mek.
-No tonta, de verdad pasó.- Contesta Liz
-Pero...¿Y cómo fue?.
-Pues... ay ¿Para qué quieres saber eso?.
-¿Fuiste la activa o la pasiva?.
-Pinche sucia.- Hace una pausa.- Fui la activa.
Luego de la respuesta de Liz, su amiga no tarda en estallar a carcajadas.
-Eres...una...sucia.- Dice aún riendo.- Degenerada.- continúa en carcajadas.
Todavía no es muy tarde, y como era de esperarse invitó a Mek a dormir en casa. Los padres de Meku aceptan ya que son amigas de hace años y se conocen muy bien.
-Cuentame ¿Lo volverías a hacer?.- Dice Meku agarrando una almohada de corazón que está en la cama de la peliazul.
-Quisiera decir que no pero... claro que lo haría de nuevo.- Responde agarrandose un mechón de pelo.
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