¿Podemos ser felices? ~ Terminada

Me gustas

Decidí que hoy iría a ver a Emily y le diría todo lo que sentía. Esa chica me estaba volviendo loco y tenía que saberlo. Tal vez mis sentimientos no serían correspondidos, pero necesitaba desahogarme.

Dejé el departamento tarde por la noche, vistiendo una gran chaqueta y un tapabocas que cubriera mi rostro. Llegar a la universidad, fue más fácil de lo que pensé y agradecí que las puertas de éstas no cerraran por la noche.

- ¿Quién es? – escuché pánico en el voz de Emily cuando abrí el ventanal de su habitación.

- Shhh, soy yo, Taehyung – dije quitándome el gorro de mi chaqueta y el tapabocas de mí rostro.

- ¿Qué rayos estás haciendo aquí? – me retó enseguida en voz baja mientras encendía la lámpara que tenía en su mesita de noche.

- Sólo quería verte – respondí, sentándome en su cama.

Ella se veía preciosa como siempre, tenía su cabello desordenado y estaba sin maquillaje. Era la primera vez que la veía sin él y sólo me enamoró más verla así.

- ¿Sólo viniste aquí para verme? ¿Por qué eres tan idiota Taehyung? – resopló. Si era un idiota, era por su culpa. Sólo ella me hacía querer hacer cosas sin siquiera pensarlas.

Un mechón de su desordenado cabello caía sobre su rostro y me atreví a ponerlo detrás de su oreja. Emily no me quitaba la mirada de encima, pero no hizo nada ante mi movimiento hasta que posé mi mano sobre su mejilla y la acaricié.

- Me gustas – fui directo y sincero, pero al parecer a Emily no le gustó. Sentí como su quijada se tensó bajo mi mano y esa no fue una buena señal.

- ¿Qué? – su expresión facial fue clara y a ella no le gustó lo que acababa de escuchar.

- Que me gustas – repetí con confianza, pero Emily se apartó de mí una vez que aquellas palabras volvieron a salir de mi boca. Una parte de mí creía que Emily se sentía igual que yo, pero al parecer estaba equivocado, muy equivocado...

- No, no, no, no – Emily empezó a negar con sus manos – no te puedo gustar y tú no me gustas a mí. Esto está mal.

- ¿Por qué estaría mal Emily? Soy una persona como todas las demás, me puedo enamorar también.

- ¿Enamorar? Eso es mucho más que gustar Taehyung. Esto sí que no está bien – Emily ahora negaba con su cabeza – tú eres famoso, imagina las consecuencias, cómo se pondrían de locas tus fans.

- Estás aceptando que yo también te gusto – le dije al imaginarnos a los dos juntos.

- No he dicho eso – Emily me miró enojada.

- ¿Por qué no aceptaste mi rosa de los primeros en la presentación? – dije de la nada.

- Porque no me gustas – volvió a decir Emily.

- ¿Entonces te gusta Jin?

- No – Emily apartó su mirada de mí.

- Mírame – agarré su barbilla y no la dejé ir.

- ¿Qué? – se quejó y me mantuvo la mirada.

- Sé que mientes.

- No, no lo hago – Emily apartó mi mano de su rostro – es hora de que te vayas Taehyung.

- No te creo y no me iré hasta que reconozcas lo que sientes por mí – Emily se acercó a mi rostro y dijo.

- No me gustas – pero su mirada la traicionó. En el momento en que sus ojos se desviaron a mis labios supe que mentía y lo que tenía que hacer.