Es simple, le amo

7. "Todo ha sido culpa mía"✓

Cuando casi estoy llegando a casa recuerdo que mi madre no sabe que me he ido... lo que significa que tengo que entrar sin que me vea. Miro si hay luz en el salón y me asomo a la ventana. Veo que mi madre está viendo la tele así que entrar por la puerta queda descartado. Miro el resto de habitaciones y recuerdo que mi hermana está en casa... Espero que no se haya dado cuenta de que no estoy... De repente se me ocurre una idea, cojo el móvil y marco el número de mi casa poniendo mi número en oculto.

Me asomo de nuevo a la ventana del salón y veo como mi madre se levanta para coger el teléfono.

—¿Sí?—se escucha a través de la línea.

Mientras  que mi madre está junto teléfono aprovecho para entrar por la ventana de la cocina. Sigilosamente subo las escaleras y cuando ya estoy en mi habitación corto la llamada. ¡Sí! ¡Lo he conseguido!

Me pongo el pijama y bajo al salón.

—¿Qué hay de cenar?—pregunto borde.

—Un sándwich mixto con huevo.

—Vale—digo y cojo una botella de agua.

—Dile a tu hermana que se duche.

No contesto y subo las escaleras. Voy a mi habitación y dejo la botella de agua en la mesilla. Después voy a la habitación de mi hermana. Entro sin llamar y me sorprendo al ver lo que está pasando.

—Cierra, tonta—dice mi hermana bajito.

Cierro la puerta y la miro dudosa.

—¿Quién es éste?

—Es el nuevo vecino... Vive enfrente.

—Hola, soy Lucas—dice el niño.

—Hola, yo soy Kate. Su hermana mayor.

—¿Vas a contarle a mamá que ha venido?

—¿No lo sabe?

—No... Se ha colado por la puerta de atrás, bueno en realidad le he abierto yo—suspiro y pongo los ojos en blanco.

—Bueno, creo que ya es hora de que te vayas... Ya os veréis otro día.

—¡Kate! ¿Le has dicho a tu hermana que se meta en la ducha?—grita mi madre mientras sube las escaleras.

—¡Sí, ahora va!

—No se lo digas por favor...—susurra mi hermana mientras esconde a Lucas.

Salgo de su habitación y me acerco a mi madre.

—Está cogiendo el pijama, ahora sale.

—Vale—dice dándose la vuelta.

—Daros prisa...—susurro mientras bajan las escaleras para ir a la puerta trasera.

Poco después mi hermana sube y va al baño. Yo entro detrás de ella con cara de enfado.

—¿Pero tú estás loca? ¿Cómo se te ocurre?

—Te he visto hacer lo mismo miles de veces con Jace. Y por la ventana el otro día también.

—Pero tú eres pequeña, mamá podría haberos pillado. ¿No era mejor pedirle permiso?

—Es que el otro día estuve jugando con él en el jardín y me caí... Ella me escucho gritar y se pensó que me había empujado. Se lo he intentado explicar pero dice que no me acerque a él...

—Mamá está muy rara últimamente, no entiendo sus constantes cambios de humor y el porqué no nos escucha...

—Ya...

—Mira, haremos un trato. Cuando quieras jugar con él me lo dices ¿vale? Tienes que pedirme permiso ¿de acuerdo? Y si algún día mamá se entera no le digas que yo lo sabía... Ya me encargaré yo de encubrirte ¿vale?

—¡¡Vale!! Gracias tata...

—De nada feúcha—digo abrazándola y saliendo del baño.

Voy a mi habitación y empiezo uno de los trabajos que nos han mandado en el instituto. Prefiero hacerlos ahora y así tengo el resto de las vacaciones libre.

¿What do you mean? Uoohh uoohh...—comienza a sonar mi móvil.

—¿Sí?—contesto sin mirar quien es.

—Kate... ¿Dónde estás?

—En mi casa. Siento haber hecho que discutieras con Javi.

—No ha sido tu culpa. Es que es un gilipollas.

—Te equivocas, todo ha sido culpa mía... Pero sinceramente no quiero volver a verle. Todo lo que he dicho era verdad.

—Lo siento, no pensé que fuera a actuar así.

—Da igual...

*Silencio incómodo*

—Creo que será mejor que cuelgue... Adiós...

—Espera Kate. ¿Hemos terminado?—pregunta pero no respondo—¿Kate?

—No tengo una respuesta para eso...—las palabras de aquel imbécil resuenan en mi cabeza.

—¿Yo he hecho algo malo? Si es así lo siento...

—Da igual.

—¿Cómo que da igual?

—Pues que da igual Jace, déjalo estar.

—¿Entonces? ¿Estamos juntos?

—Supongo.

—Vale... Luego te llamo pequeña.

—Ok, adiós...—digo cortando la llamada.