Si existe.

< Capítulo 5 >

...

- Sarah, ¿quieres el café con azúcar o sin azúcar?

- Con azúcar por favor. Le dije dedicándole una sonrisa.

- Señorita, me da dos cafés con azúcar por favor. *En un rato estará su pedido* me dijo la muchacha y se marchó.

- Estás muy hermosa el día de hoy Sarah. Me dijo guiñandome un ojo.

- Ay gracias Steve, tú te ves muy bien en este día. Estás jodidamente sexy! *pensé*

Narra Sarah:

En ese momento suena mi móvil..

- Oh! Disculpa Steve, atenderé una llamada.
Era Anhie.

-Sí? ¿Cómo estás Anhie?
*La escucho llorar al otro lado*
Anhie? Estás bien? Le digo un tanto preocupada.

- No Sarah, no lo estoy, necesito un abrazo, Sarah... Me voy a vivir a otro país, los negocios de mis padres no están funcionando y me tengo que ir...

- *La escucho llorar* Ohh nono, no Anhie, esto tiene que ser una broma! Le digo casi llorando.
Ahora mismo me voy a tu casa, sé que necesitas un abrazo.

*Steve me miraba confundido*

- Está bien Sarah, te espero. Me dijo sollozando mientras cortó la llamada.

- Ay Steve, debo irme, me agradó la salida pero mi amiga está muy mal... y debo ir a verla.

- Oh, lo lamento, si quieres te acompaño...

- Está bien.

Caminamos hasta tomar un taxi para ir a la casa de Anhie, el clima está ves se había puesto nublado. cuando llegamos a la casa de Anhie ella estaba muy triste y habían cajas del trasteo por todas partes.
Apenas me vio Anhie se lanzó sobre mí para darme un fuerte abrazo

- No sabes cuanto te voy a extrañar. Me dijo rompiendo en llanto.

- Lo sé hermosa, también te voy a extrañar. Una lágrima corrió por mi mejilla y la abrazé muy fuerte. -Estaré para ti cuando me necesites, sabes que siempre vas a estar en mi corazón.

- Te quiero mucho Sarah. Antes de irme Anhie me dio un pequeño dibujo que había hecho cuando estabamos en la primaria, habímos sido amigas desde muy pequeñas, sinceramente separarme de ella en estos momentos sería difícil, la quiero demasiado.

Estuve horas hablando con ella y con Steve, por lo menos la hicimos reír, sí que lo necesitaba. Tomamos un taxi y llegamos a mi casa, Steve se fue a su casa y dijo que mañana pasaría por mí para ir a la escuela.

-Hola tía Janne! Grité al entrar a la casa.
Mi tía estaba en la cocina preparando la cena.
- Hola Linda, ¿Como te fue?
- Pues me fue bien tía, excepto por algo que me dejó triste.
-Acaso no le gustas? Dijo mi tía soltando una carcajada.
- No tía, no es eso... Es que Angie se va a otro país, ella es mi mejor amiga y si se va no será lo mismo en la escuela.
- Ohh linda te entiendo, tienes que aceptar las cosas, tal vez puedan verse después.
- Si... Dije casi susurrando. Me voy a dar una ducha.
- Okay, seguro cuando salgas ya estará la cena lista.
-Ohh, si claro haha.

Quería estar tranquila y bien pero verdaderamente no podía, el echo de separarme de Anhie era muy triste para mí, llevábamos años siendo amigas, esto era algo realmente triste...
Bajé al comedor para cenar con mi tía, cuando suena mi teléfono y era Angie.
*Llamada telefónica*
-Si?
- Sarah, no podré salir con Louis. Me dijo un tanto triste.
- Oh, tranquila Anhie. Puedes pedirle disculpas por no asistir a su cita. Él te entenderá.
- Tienes razón, te quiero mucho. Ah! A propósito mañana me voy con mis padres.
- Queeeeee? Tan pronto?? A qué hora??
- Lo sé, es muy pronto. Me voy muy temprano en la mañana, como a las 07:00 a.m. Odio lo que me está pasando Sarah.
- Es realmente triste Anhie, mañana estaré en tu casa a las 06:00 a.m.
- D-De verdad?
- Claro! Allá estaré para despedirme de ti Anhie.
- No sabes cuanto te quiero amiga. Adiós, nos vemos mañana.
- Adiós Anhie, descansa. Te quiero más. Le dije cortando la llamada, te quiero.
Terminé de cenar con mi tía y fui a descansar. Mañana iba a ver a mi mejor amiga quizá por última vez.

06:50 a.m.
Narra Anhie: Ya estaba lista para dejar mi ciudad, mi país y mis amigos, la familia que escogí y que siempre estará en mi corazón. Veo a Sarah acercarse y darme un abrazo gigante el cual respondo por varios segundos.

- Te voy a extrañar Sarah.
- Yo a ti Anhie, espero verte de nuevo algún día.
- Así sera nena.

- Anhie! Anhie! Es hora de irnos. Me dice mi padre desde el auto.
- Claro! Ya voy! En ese momento le doy una pulsera a mi amiga Sarah.
- Quiero que la guardes y la CUIDES mucho.
- Lo haré, adiós amiga, te quiero mucho. Me dijo con lágrimas en sus ojos.
Yo desde el auto miraba hacia donde estaba ella, veía cuan pequeña se hacía a medida que me alejaba. Rompí en llanto, no podía creer que me tenía que alejar de ella.

Narra Sarah:
- Hoy no podré ir a la escuela. Dije soltando un pequeño suspiro.
Al poco tiempo ahí estaba Steve en la puerta de mi casa para ir a la escuela, baje muy rápido las escaleras y abrí la puerta.

- Lo siento Steve, hoy no podré ir a la escuela.
- Q-que? Por qué no? Me dijo un tanto confundido.
- Es que Anhie se va hoy y espero que me entiendas, tengo que ir a verla, en unos minutos estaré en su casa y...
- Sí sí, está bien. Te entiendo. Me dijo dándome un abrazo. - Yo le diré a la profesora que no pudiste asistir porque estabas enferma o lo que sea.
- Haha, gracias Steve. Le dije agarrando su mano, mientras se alejaba un poco.
Cuando llegue a mi casa después de ir a la casa de Anhie veo el auto de mis padres en el garaje, entro rápidamente y ahí están ellos. Los abrazo muy fuerte y ellos a mí. Aunque no sean los mejores padres los amo más que a mi vida.
Mis padres me han dado todo lo que yo necesito en esta vida pero nunca se preocupan por como me siento, en realidad no conocen a Sarah.
Mi padre es una persona que hoy está bien contigo, se ríe y te hace reír, es muy buen padre pero aveces te llega a decir cosas que verdaderamente llegan a destruirte.
Mi madre es una mujer que en fondo de su corazón tiene amor para dar a sus hijos pero... Casi siempre te lástima de una manera que no quisieras vivir más. En fin ellos son mis padres y como dije antes los amo más que a mi vida.
No tengo hermanos y aveces siento que estoy completamente sola... Bueno, no del todo porque sé que Dios nunca me fallará. Todos creen que mi vida es la mejor pero no es así.

- Estoy feliz de que hayan llegado, llegaron muy pronto.
- Oh sí, yo me quedaré aquí pero tu padre estará de viaje por uno días. Me dijo mi madre.
- Por qué no fuiste a la escuela hoy? Me dijo mi padre mientras se quitaba un zapato.
- No fui porque estaba con Anhie, hoy se fueron a mi vivir a otro país. Les dije muy triste.
- Hmm, ya conseguirás otra amiga, ella me caía mal. Me dijo mi madre en tono un poco desinteresado.
- No puedes decir eso! no la conoces bien, ella es una gran chica, es la mejor chica, siempre me escucha y me apoya! Le dije alzando la voz a mi madre, ella siempre que tenía la oportunidad decía que mi amiga Anhie era una mala chica.
- No le grites a tu madre! Largate a habitación. Me dijo mi padre muy molesto.
Subí las escaleras llorando deseando estar muy lejos de todas mis tristezas.*Te necesito Steve, necesito un abrazo tuyo* pensé.