La Quinta Iniciación

4

David paralizado recuerda la moneda que encontró en la roca, mete la mano en su bolsillo y siente el relieve de la inscripción,
"Gam zeh ya avor" piensa. La loba se arroja hambrienta y muerde el tobillo derecho a David al instante que es derribado por la pantera, el viejo sujeta la alforja, siente en su interior el pergamino, el corazon de david palpita al maximo, siente el respirar de la pantera en su rostro al tiempo que abre el hocico y gruñe, David a lo lejos ve una sombra.

- ten piedad de mi quien quiera que seas hombre o sombra -

Grita tal alto como puede.

Un joven se arroja sobre la pantera hiréndola con un corte profundo, y espantó la loba con dos patadas,

- hombre y sombra-

Repondió el joven ofreciéndole la mano a David para alzarlo del suelo.

- Virgilio -

Dice en tono amable el joven, el viejo sonríe a la vez que gesticula una mueca de dolor.

Virgilio enciende una fogata para espantar a los depredadores que pudieran estar cerca y a su vez el frío abrumador dé la madrugada, se escuchan los leños crujir, el joven coge la daga con la que rajo la carne de la pantera y la mira fijamente con el entrecejo fruncido.

- No sangro -

David que miraba al fuego levanta la cabeza y lo mira interrogante.

- El corte fue profundo, aun así la pantera no sangro -

David suspira y mira las llamas de la fogata, escucha la voz del conde Saint Germain resonar en su mente, " en medio del bosque hallarás un lago, allí encontraras el hombre que necesitas " Virgilio mira la herida del tobillo del viejo, toma una alforja de cuero de vaca y camina en dirección al lago, David lo ve alejarse coge su alforja y extrae la daga rosacruz escondiéndola en sus ropas, virgilio regresa con la alforja colmada de agua, se inclina ante el viejo toma el tobillo herido por los colmillos de la loba y empieza a limpiar la herida, mira la alforja de david de reojo y ve una copa dorada, siente un vacío en el estómago y desvía la mirada a un punto inexistente.

El joven lava la herida con exagerada delicadeza, ambos guardan un silencio cómplice como si tuvieran mucho que decir pero no se atrevieran, David ve al joven inclinado ante el, saca la daga escondida, la empuña y la alza sobre la cabeza del joven, David trémulo alberga la duda, frunce el ceño " el complemento de las tres sainte trinosophie" por un momento creyó escuchar la voz del conde, el viejo controla sus emociones, alza la daga tanto como su brazo lo permite y toma fuerzas decidido a dar el golpe.

<<<<<<>>>>><<<<<>>>>><<<>

Quiero agradecer a las personas que han leído mi historia completa hasta este punto, sus comentarios me animan a seguir, si les gusto recuerden pulsar la estrella, su voto es muy importante para mi.