Koangel♡Heart

♡Bajo aquel arbol♡

Mimiko continuo corriendo un buen tramo sin detenerse, excepto cuando el ave se posaba en alguna rama. Como él no dejaba de trinar, lo único que deseaba era seguir oyendo aquel sonido; que cada vez se hacia más precioso a sus oídos.

De pronto, el pajarito se detuvo.

Mimiko se quedó extrañada por el repentino silencio. Él  miró fijamente, batió sus alas; y siguió el vuelo cantando. Esta vez fue tan veloz, que apenas pudo percibir que se metía entre las ramas de un enorme cerezo.
Corrió tras él sin pensarlo.

-¡Se- señor pajarito..!- jadeó- ¿Hacia dónde... hacia dónde va?-.
Alcanzó a rodear apenas el árbol, cuando vio que no estaba sola en aquel lugar.

Era... aquella chica...

Dio media vuelta para huir cuando ella se volteó.
- ¡Espera!- la llamó.
Se giró sorprendida por la petición, y también avergonzada porque aún no podía olvidar el incidente de esa vez...
-Tu nombre... es Kousagi Mimiko, ¿no?

Ella... ¿sabia su nombre?

- S-sí...
- Eres nueva ¿verdad?
Sus verdes ojos iban y venían sin saber que hacer.

¿Por qué sabia su nombre?

Y entonces, lo vio, un cuadernillo de tapas azules en los que pudo distinguir unos bocetos. Repentinamente su timidez desapareció.

-¿Te gusta dibujar? ♡♡♡- preguntó completamente emocionada, con una gran y dulce sonrisa.
Los ojos castaños de la chica se giraron en dirección al cuaderno.
- Bueno... sí- asintió- ¿quieres verlos?
- Me encantaría ♡-sonrió.
Mimiko se sentó a su lado. Ella le extendió su cuadernillo.
-Es... estaba esperando... -susurró apenas.
-¿Uh? -Mimiko dirigió su mirada hacia la chica.
Pero ella desvió la suya.

Entonces abrió las tapas del cuaderno y sus ojos brillaron con admiración.

-¡Que hermoso dibujas! ♡ Um...- vaciló al notar que no sabia su nombre.
- ¡Ah! Aoi, Sawada Aoi.
- De verdad me encantan tus dibujos, Aoi-chan♡- le sonrió.

Aoi la miro con las mejillas algo sonrojadas...
"Aoi-chan " así la había llamado...

- Solo son bosquejos y bocetos...-dijo despacio.
- ¿De verdad? - dijo viéndola sorprendida- ¡Es que así ya son fabulosos! ♡ ¿Cómo serán tus dibujos entonces? ♡
-Bueno tengo...-dijo algo avergonzada- unos dibujos bien hechos en clase...
-Um... ¿estaría bien si los veo...? -preguntó tímidamente.
-Claro -le sonrió.
Mimiko siguió con emoción pasando página y página del cuaderno.

Depronto se detuvo frente a una hoja. Con un precioso árbol de cerezo esbozado en lápiz azul.

-¡Uaah!♡ Este es el árbol bajo el que estamos ahora sentadas, ¿verdad?
-Sí, exactamente este, es mi favorito- respondió alzando la vista hacia las ramas florecidas.

Mimiko hizo lo mismo.
-Entiendo porque -sonrió.
Las flores de cerezo se mecían por el viento y así, los pétalos caían en una suave lluvia rosa.
-Creo que hay pocas cosas tan hermosas en el mundo...-susurró maravillada Mimiko.
-Sí...

Ambas se quedaron contemplando el cielo de flores sobre ellas. Primero fue Mimiko quien cerró los ojos, sonriendo; luego fue Aoi. Tan solo se percibía el eco lejano del viento, atravesando las ramas de los arboles.

Hasta que se oyó un dulce trinar.
Mimiko abrió sus ojos, que brillaban.
-¡Ah! ¡Ese es el señor pajarito de antes!
-¿Señor pajarito?-dijo Aoi confundida.
-¡Sí!-sonrió - Venía siguiendolo cuando te vi; aunque... aún no sé que pajarito sea, voló muy rápido como para verlo...-comentó como para sí.