No lo podía creer estaba en con Ezequiel, en su casa, en cuarto, en su cama, a su lado, no había otra cosa que me emocionara más que estar con el, pero ésta es una oportunidad de oro, no cualquiera tiene un día de estos, Qué debo hacer? intentar hacer algo con él?, aun que todavía estaba la posibilidad de que él no fuera gay, no se que pensar, tampoco puedo esperar que me correspondiera o que por lo menos pasara algo entre nosotros por lo menos esta noche...
No podía dormir, le levanté lentamente de la cama para revisar mi celular, 11:30 no puede ser,se está acabando mi tiempo con este chico, realmente no tenía muchas opciones, pero debía intentar algo.
Lo único que podía hacer era verlo como dormía?, no Alejandro levántate y hazlo que siempre quisiste hacer, besarle. Me levanté lentamente de la cama lo miré a los ojos intentando no despertarlo, se veía tan lindo y sexy, me comencé a acercar a a su rostro, fue cuando por fin sucedió lo que tanto soñaba con desesperación, lo besé en los labios, un beso dulce, suave y tierno, después de eso había logrado lo que tanto deseaba, desde ese momento pude dormir de la mejor manera esperando que el estuviera en mis sueños...
A la mañana siguiente me levanté con una sonrisa, pero había algo raro, algo diferente, me dí la vuelta para confirmar que mi pequeño angelito estuviera ahí, wow entonces era eso que él ya no se encontraba conmigo, sentí un enorme vacío en ese momento, se sentía como si te dieran una puñalada en la espalda, como si te lanzaran un bote de agua con hielos, no mucho peor, pero eso ahora ya no importaba demasiado tenía que levantarme aun que no quisiera.
Me levanté, me puse mis zapatos, pasé a su baño para mirarme al espejo y arreglarme un poco, me acomodé el cabello porque estaba un poco despeinado , salí del baño y me dirigí hacia la sala intentando buscarlo, me senté en el sofá para amarrarme los cordones de los zapatos, cuando de pronto salió él de la cocina con dos enormes tazas de café, notaba su mirada un poco indiferente, se acercó a mi dándome una de las dos tazas de café mientras él se sentó en el sillón de enfrente, me miraba un poco raro, cuando toma un poco de café y se prepara para hablar -Ayer me besaste?- cuando escuché aquellas palabras salir de su boca mi corazón latía como loco, no le sabía que contestar, si me quedaba callado sabría que es verdad y no tuve el valor para decírselo, diablos qué le digo -Por qué piensas que yo te besé?- en realidad fue lo primero que se me vino a la cabeza -Pues es difícil, no lo vi directamente, solo lo sentí- Bueno y por que cres que yo haría eso, bueno ya sabes que eres mi amigo-, diablos en el fondo no quería que se enterara -Bueno creo que tienes razón, no tendrías por que hacerlo, Cierto?- Pues claro que no- a estas alturas ya nada podía ser peor -Está bien, perdóname por levantarte falsos amigo- me sentía totalmente mal, como si quisiera morir no mucho peor.
Después de un rato salí de su casa deseando que tal vez, solo tal vez hubiera pasado algo más, pero era tan triste que solo imaginara cosas ridículas que nunca podían pasar...
Llegué a mi casa, me dirigí a mi cuarto, cerré los ojos e intenté no llorar, Dios , Qué eh hecho?, después de lo que hice lo más probable es que Ezequiel no me quiera hablar, pero un momento, él cree que no le dí el beso así que no tengo de que preocuparme aun así, si según el sintió que yo lo besé por que en ese mismo momento no hizo o nada, bueno si es cierto que los sintió, podía ser que tal vez, no hizo nada en ese momento porque después de todo le gustó que yo lo besara?, si puede ser entonces aún tengo una oportunidad con el...
Durante todo el fin de semana intenté no recordar lo que pasó esa noche, pero fue algo totalmente difícil.
El fin de semana pasó desperté de mi cama por el sonido del despertador, genial era el peor día de la semana Lunes, me levanté fui al baño para lavarme un poco la cara, me peiné, me vestí, desayuné un poco, arreglé mis cosas, y me dirigí a la escuela, realmente no me costaba trabajo ir a la escuela, se encontraba a 15 minutos de mi casa caminando, así que tenía tiempo para pensar en algunas cosas, como la tarea, que veríamos hoy o lo que pasó esa "noche", no Alejandro cálmate.
Llegué a mi escuela, me dirigí a mi salón y como siempre en la puerta me estaban esperando Abby y Rodrigo, mis dos mejores amigos, aun que ya me había acostumbrado a que siempre me esperaran ahí.
-hola Ale- decía la dulce niña linda de Abby -hola Abby le dije con una voz un poco soñolienta- Cómo estás amigo?- Bien, supongo -Enserio?, Cómo estuvo tu fin de semana?- me preguntó Abby-Pues a decir verdad un poco aburrido- me preguntaba por qué le contesté eso, sabiendo como habían resultado las cosas...
Me senté en mi lugar cuando de pronto sentí que alguien me agarraba del brazo muy fuertemente, de hecho creí que iba a reventar, cuando levanté la cara para ver de quién era la mano que me me sostenía con tanta fuerza, era él ese chico lindo de quien estaba enamorado... Ezequiel
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Está bien? o Está mal?
Teen FictionUna historia de Amor vinculado a la homosexualidad que marca el inicio de varios amores, una novela ficticia de un joven llamado Alejandro que busca una respuesta a todo lo que siente . El cursa el primer año de secundaria, conoceremos lo que lo in...